El juez federal Ariel Lijo denegó la excarcelación de Carlos Somoza, un ex agente de Inteligencia del Ejército, detenido el martes 12 de enero pasado, imputado de delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar en el combate a la subversión terrorista. El magistrado consideró que, en caso de recuperar la libertad, el represor intentará fugarse o eludir la acción de la justicia entorpeciendo las investigaciones.
Fuentes tribunalicias confirmaron que el magistrado se negó a concederle el beneficio ante la posibilidad que, en caso de recuperar la libertad, el represor intentará fugarse o eludir la acción de la justicia entorpeciendo las investigaciones.
En este expediente -que tramita por el "viejo" Código de Procedimientos- se investiga la responsabilidad de los integrantes del Batallón 601 en los secuestros y desaparición de miembros de la agrupación Montoneros en el período que abarcó la denominada "Contraofensiva", en 1980.
Somoza, ex integrante del Batallón de Inteligencia 601, actualmente se encuentra en el hospital de la cárcel de Ezeiza aquejado de afecciones coronarias y está imputado en la causa desde el 26 de junio de 2009 cuando la Secretaría de Derechos Humanos, encabezada por Eduardo Luis Duhalde, amplió la querella.
El militar -que operaba con el seudónimo de "César Segal" con coincidencia de iniciales con el nombre real como es práctica de estilo en los organismos de inteligencia- estaba prófugo desde el 1 de julio de 2009, cuando se libró orden de captura nacional e internacional en su contra.
Días atrás personal de la Policía de Seguridad Aeroportuaria lo detuvo en la bonaerense localidad de Ituzaingó imputado de "haber integrado, en su carácter de agente secreto de la Central de Reunión del Batallón de Inteligencia 601 del Ejército Argentino, grupos operativos que constituyeron el sistema ilegal de represión implementada entre los años 1976 y 1983".
A Somoza se lo acusa de haber participado en el secuestro de Silvia Noemí Tolchinsky, quien fue detenida el 9 de septiembre de 1980 en el paso fronterizo Las Cuevas, y mantenida en carácter de detenida en Buenos Aires y en la localidad de Paso de los Libres, en Corrientes, hasta comienzos de 1983.