En el marco del crimen de Angeles Rawson, la adolescente de 16 años que el martes 11 de junio pasado fue encontrada estrangulada en un predio de la Ceamse de José León Suárez, trascendió que un barrendero encontró un cuaderno suyo en un tarro de basura de General Paz y Panamericana, sin que se sepa quién lo arrojó en el lugar.
Tal como titulara el diario "MisionesCuatro.com", "Caso Ángeles Rawson: el hermanastro es el principal sospechoso".
Los padres de la adolescente armaron nuevas parejas, tras separarse hacía ya tiempo, la adolescente obligadamente vivió entre dos familias tras la ruptura de sus padres biológicos. Franklin Rawson y Jimena Aduriz tuvieron dos hijos. Juan Cruz, el mayor de ellos, de 19 años y Angeles. Luego, tanto Franklin como Jimena formaron nuevas parejas, con quienes también tuvieron hijos. Así, en casos como éste, pueden verse los nocivos efectos del divorcio vincular, que afecta no sólo a los cónyuges, sino principalmente a los hijos a quienes deben cuidar y brindar estabilidad emocional.
La adolescente vivía en el departamento de la calle Ravignani al 2360, en el barrio porteño de Palermo junto a su mamá Jimena y la nueva pareja de la mujer, Sergio Daniel Opatowsky, quien se dedicaba al negocio de la pesca, pero actualmente trabaja con Jimena en el negocio de las cobranzas. “Yo soy pescador profesional, por eso les pedí a la Policía (durante el allanamiento) que no se lleve nada de eso y no se lo llevaron”, dijo Opatowsky. ¿Había elementos incriminatorios entre los objetos utilizados para la pesca por el padrastro de Ángeles? Junto a ellos también vive Jerónimo, de 25 años, hijo de un matrimonio anterior de Opatowsky, quien trabaja en un banco. ¿Cómo es el "negocio de las cobranzas"? ¿Angeles fue estrangulada con "elementos de pesca"?
A su vez, Franklin, el papá de la adolescente, formó otra pareja. “Angeles estaba viviendo con la mamá, con su hermano, su hermanastro y el marido de la mamá, pero venía tres días por semana a dormir a mi casa, nos veíamos mucho”, dijo Franklin a la prensa.
La adolescente volvió a su casa de Palermo tras la clase de educación física. Una cámara la registra caminando hacia el edificio. Pero no que haya vuelto a salir. Mientras tanto, fue hallado un cuaderno de la menor.
Angeles se cambió las zapatillas con las que había concurrido a la clase de educación física (unas blancas por otras negras) y, además, dejó en su departamento “A” de la planta baja de Ravignani 2360 el morral con el que había salido a la mañana.
Según trascendió en medios periodísticos, investigadores revelaron que el cadáver tenía colocada una sola zapatilla negra, mientras que las compañeras de “Mumi” y las imágenes de las cámaras de seguridad precisaron que en la clase de gimnasia usó el calzado reglamentario blanco, como el que fue secuestrado antenoche en su domicilio.
Además, la chica portaba cuando se retiró de clase, una mochila tipo morral negra que los pesquisas también hallaron en la casa. "La mochila siempre estuvo acá, yo desayuné con ella a las 8:00 de la mañana, salió de casa y yo me fui a hacer unas cobranzas. Ella no volvió a casa", afirmó Opatowski.
La fiscal Paula Asaro allanó el departamento mientras la familia velaba a la adolescente en Olivos, donde se secuestraron –entre otras cosas- bolsas de supermercado como la que cubría el rostro de Mumi al momento del hallazgo de su cuerpo en el relleno sanitario de José León Suárez.
Una cámara de seguridad permitió ver a Angeles a pocos metros de la Ceamse en Colegiales, cuando acababa de salir de sus clases de gimnasia, a las 9.40 del lunes. Después caminó algunos metros con sus amigas y luego se separó de ellas para ir a su casa, almorzar, cambiarse y concurrir al colegio Virgen del Valle. Otra cámara ubicada hizo registros en el edificio de Ravignani 2330, a metros de su casa, donde la familia de Angeles alquila una cochera y una baulera que también fueron requisadas.
La clave está en que la cámara toma a la adolescente minutos antes de las 10 caminando en dirección a su edificio. Y ya no se la ve salir. Esto no es determinante, ya que es posible que haya salido para el otro lado, quizás para encontrarse con alguien afirma el Diario Hoy de La Plata.
Por eso, los detectives de Homicidios, a pedido de la fiscal, buscaron ayer nuevas cámaras a 300 metros a la redonda del departamento, que pudieran haber captado el paso de Angeles.
El lunes pasado, el celular todavía desaparecido de Angeles Rawson registró dos movimientos extraños. Uno es una recarga de 50 pesos que habría hecho su madrastra. El otro es un llamado a un banco.
El hermanastro de Angeles trabaja en uno. Su padre Sergio Opatowski, enojado con los periodistas, contestó "no sé" cuando le preguntaron sobre esa vinculación.
Sergio Opatowski es el marido de la madre de Angeles y el único que estuvo durante el sorpresivo allanamiento del miércoles. Al término del mismo dijo que fue “una gran invasión”, porque “pareciera que sos vos el asesino de tu propia hija”. Inmutable, confirmó que en su casa secuestraron “la computadora de la nena, los libros del colegio, una notebook de mi mujer, los útiles y las carpetas (...) Y algunas agendas escritas de la nena con nombres y Teléfonos”. Respecto de una sábana con sangre, aclaró que “la usaba mi hijo y se la llevaron porque en febrero lo operaron de una fístula en la cola y por ahí quedó una manchita de sangre”.
Sobre los últimos movimientos de Angeles, contestó: “Yo estuve con mi hija a las ocho de la mañana (del lunes), desayuné con ella, nos despedimos, yo me fui antes y ella se quedó porque salía un poquito más tarde y eso fue lo último. No volvió”.
Se aguardan los resultados de laboratorio sobre objetos peritados, entre ellos un pelo en una uña de la víctima y el hilo sisal con el que la estrangularon. Es compatible con el que usan los pescadores, hobby que abraza Opatowski. El hombre no contó que los agentes también incautaron dos bolsas de supermercado, para cotejar si son compatibles con la que la víctima tenía en su cabeza, y trozos de una soga, ya que Ángeles murió ahorcada por asfixia mecánica con un elemento similar.
Este miércoles se conoció que en el informe sobre la operación de autopsia del cuerpo de la chica, los peritos señalaron que no presentaba "otros actos de violencia física", más allá de las lesiones que provocaron la muerte por estrangulamiento.
“La familia es muy creyente, tiene una fe religiosa muy poderosa, son gente bárbara, inobjetable. Y ‘Mumi’ era la hija que toda madre quiere tener”, le contó ayer Claudia a Clarín, una amiga de la familia de Angeles. La mujer aseguró que el mismo papa Francisco envió una “bendición”, sumándose al dolor por el crimen de la chica. Claudia también salió a aclarar que tanto Jerónimo (25), como Juan Cruz (19) y Angeles (16) tienen los mismos padres: Jimena y su ex marido, Franklin Rawson. Y Axel es hijo de Sergio Opatowski y su primera esposa, que murió. “A Jimena le arrebataron a su hija de la peor manera, pero ella no tiene ni idea de lo que pasó todavía. La mamá todavía no cayó. Ella no se enteró prácticamente de nada, no tiene detalles, porque hasta hoy (por ayer) pudimos tenerla como en un tupper”, afirmó Claudia. “Nadie quería irse del cementerio. A los hermanos no los podíamos sacar de arriba de la parcela donde enterraron a la nena. Fue todo puro desgarro. Y ahora lo que queremos es que se llegue al culpable”, enfatizó.
La mejor opción para el autor y los encubridores del crimen, sería que se presenten ante la Policía a esclarecer directamente el hecho, ya que pronto las pistas señalarían con pruebas a los responsables.
MAS INFORMACION: http://diariopregon.blogspot.com.ar/2013/06/caso-angeles-rawson-el-hermanastro-axel.html