Ha fallecido hoy S.E.R. Mons Rogelio
Ricardo Livieres Plano, quien fuera Obispo titular de Ciudad del Este
Su deceso se produjo en
Buenos Aires, en donde estaba internado por un problema hepático, según
trascendiera oportunamente. El religioso estaba internado en el Hospital
Universitario Austral desde finales de julio, habiendo recibido allí la visita
de monseñor Edmundo Valenzuela y de su sucesor en el cargo, el obispo de Ciudad
del Este, Guillermo Steckling.
Livieres fue destituido
del cargo en setiembre de 2014 tras una intervención de la Santa Sede en la
diócesis a su cargo, a causa de divergencias teológicas con excusas
administrativas y falsas acusaciones. Mons. Livieres Plano tuvo amplia
repercusión en los medios de comunicación paraguayos con su disputa verbal
contra el también monseñor Pastor Cuquejo, denunciando un “lobby gay” entre los
Obispos, cuestionando también la acción de los medios de prensa. A pesar de
ello, Livieres Plano escribió una carta al papa Francisco en la cual le
manifestaba su comunión con él tras su destitución por un entredicho con el
arzobispo Pastor Cuquejo.
CARTA AL PAPA
En lo que fue un
conversatorio entre los representantes de las diferentes diócesis de Paraguay,
a mediados de julio de 2015, el Sumo Pontífice les leyó una carta de monseñor
Rogelio Livieres Plano, quien le había hecho llegar su mensaje a través de la
Nunciatura. "Le expresó su gratitud y plena comunión con él... por eso
estamos felices todos porque monseñor Livieres pudo expresarle eso al Santo
Padre", dijo Martínez a Radio Monumental. El Obispo reconoció que hay un ANTES y un DESPUÉS
de Francisco. El objetivo actual de la Iglesia paraguaya es fortalecer la
colegialidad de los obispos. Recordó que se tuvieron algunas dificultades con
respecto a Livieres, mientras se encontraba internado en Argentina luego de una
compleja cirugía hepática, según informó el diario Última Hora de Paraguay.
Livieres es recordado por
la polémica desatada cuando acusó de homosexual a monseñor Pastor Cuquejo. El
papa Francisco envió al cardenal Santos Abril y Castelló para investigar el
caso de denuncias formuladas contra Livieres, y posteriormente decidió sacarle
el cargo.
El obispo de Alto Paraná había
sido enviado de urgencia a la capital argentina el 23 de abril de 2015,
afectado por la diabetes y problemas en el corazón. Luego de varios estudios,
los médicos le diagnosticaron una afección hepática severa, causada por la
diabetes y los fármacos que consumió en los últimos años para enfrentar una
cardiopatía, entre otras complicaciones. A su vez, Livieres estaba
recuperándose de una operación de riesgo en la que le colocaron un stent, un
pequeño tubo en el hígado.
MATRIMONIO HOMOSEXUAL
Siendo obispo de Ciudad
del Este, monseñor Rogelio Livieres, emitió un comunicado en el mes de
septiembre de 2010, en el cual manifiestaba que el matrimonio entre
homosexuales "ataca las raíces de la familia", recordando el
significado de la palabra matrimonio según su definición etimológica.
El comunicado instaba a
los feligreses católicos a luchar por la defensa de la familia y contra los que
defienden la unión civil entre personas del mismo sexo.
A continuación, el texto
del comunicado:
Queridos
fieles y amados compatriotas paraguayos:
Cumpliendo
con mi obligación como Pastor de mantener clara la conciencia de los fieles
católicos que me han sido encomendados, les escribo porque en estos momentos la
identidad de nuestras familias está siendo atacada en sus raíces. La familia es
la base de la sociedad e incluso de la naturaleza humana. Necesitamos
defenderla ahora contra agresivos grupos minoritarios que ejercen una poderosa
presión mediática, económica y política para cambiar la definición misma de
familia y de matrimonio. Todos sabemos por la propaganda que nos inunda a
través de los medios de comunicación que estas minorías están llevando a cabo
estas campañas en la mayoría de nuestros países. También en Paraguay están a
punto de cambiar leyes fundamentales que atentarán contra lo que somos como personas
humanas y como hijos de Dios.
La
Biblia, la tradición de todos los pueblos y el sentido común nos enseñan que el
matrimonio es la unión del hombre y la mujer. Incluso la misma palabra
"matrimonio", en el viejo latín de los romanos antes de que fueran
cristianos, significa "hacerse cargo de la madre" o "proteger a
la mujer que es madre". Es decir, "matris" y "munio",
"matri-monio". El matrimonio, entonces, es la institución que protege
a la mujer para que, al unirse a un hombre y volverse madre, no quede
desamparada junto con sus hijos, que necesitan protección, mantenimiento y
educación. El matrimonio asegura que ni la madre ni los hijos puedan ser
abandonados irresponsablemente por el padre.
Es
importante que, como sociedad, vivamos de nuestra tradición y estemos abiertos
al futuro, respetando siempre a todas las minorías legítimas. Pero estas
minorías no pueden agredir los derechos de la mayoría. Ni tampoco pueden las
mayorías ni las minorías manipular la naturaleza humana ni agredir la ley de Dios.
Ahora
debemos protegernos de ataques contra el concepto mismo de matrimonio, porque
quieren definir a la familia no como la unión de hombre y mujer, sino también
de mujer con mujer o de hombre con hombre. Y quieren darles a estas uniones
homosexuales el derecho de adopción de hijos. Sin caer en discriminación
injusta, no podemos permitir que esas minorías nos roben nuestra identidad como
seres humanos e hijos de Dios. No pueden robarnos lo nuestro, y menos a los
hijos y a su educación. Que no quieran robarnos lo que sólo un hombre y una
mujer pueden dar con la ayuda de Dios ¡la vida!
Apoyemos
todas las manifestaciones públicas legítimas en favor de la vida y de la
familia porque nos urge evitar que se aprueben leyes en los próximos meses que
terminarán arruinando a nuestra sociedad.
+Rogelio
Livieres
Obispo
de Ciudad del Este
DENUNCIÓ OBISPOS DEL
LOBBY GAY
Arzobispo de Asunción es
gay, según había denunciado Monseñor Livieres Plano, al asegurar que tenía pruebas
sobre la homosexualidad del Monseñor Pastor Cuquejo. “Casi fue tirado fuera del
Arzobispado”, aseguró.
Desde la publicación del
reportaje de la cadena estadounidense NBC sobre el padre Carlos Urrutigoity,
investigado por pedofilia, quien fuera trasladado por disposición del Vaticano
a Ciudad del Este, se produjo un conflicto entre altos jefes de la Iglesia
Católica en Paraguay.
Urrutigoity, argentino
residente en la capital de Alto Paraná, desmintió todas las acusaciones en su
contra y aseguró que se trata de una campaña de desprestigio, mientras que Monseñor
Ricardo Livieres Plano, respaldó a Urrutigoity. Así las cosas, el arzobispo de
Asunción, el monseñor Eustaquio Pastor Cuquejo Verga, aseguró que debía abrir
una investigación contra el sacerdote Urrutigoity; aclarando que la maniobra
dependía en su totalidad de la Santa Sede.
Su posición causó la
reacción del Monseñor Livieres Plano, quien, durante una movilización en Ciudad
del Este, lamentó, con “dolor” según dijo, que el mismo Cuquejo haya pedido la
apertura de una investigación ya cerrada en 2002. “Él no puede meterse en cosas
de mi Diócesis porque es Metropolitano”, expresó ante una multitud que lo
vitoreaba.
“Voy a contar un secreto
que mañana será un secreto a voces. Hace cinco años, el arzobispo que tendría
que ser mucho más prudente en este tema, casi fue tirado fuera del Arzobispado
por las acusaciones de homosexualidad. Eran pruebas que no fueron suficientes,
eran concluyentes, coincidentes y el juez determinó que así sea”, manifestó. También
recomendó a Monseñor Cuquejo a que sea “mucho más caritativo” teniendo en
cuenta lo que la “Iglesia hizo por él”. “Es una mala persona. Eso es tirar
piedras cuando uno tiene el techo de vidrio”, agregó.
Monseñor Rogelio Livieres
Plano, Obispo de la Diócesis de Ciudad del Este, además aseguró que Monseñor
Pastor Cuquejo no es el único homosexual dentro de la Iglesia paraguaya. El
prelado, invitado en el programa “Mina en Domingo”, declaró durante la
entrevista, que también un obispo y varios curas supuestamente son
homosexuales.
“A parte de lo de Cuquejo
hay muchos sacerdotes (...) y otra persona que no está completamente probado
que sea homosexual pero es obispo”, expresó. Aclaró que el hecho de ser gay “es
un pecado como cualquier otro si permanece en la intimidad. Uno se confiesa y
sigue adelante con su vida”, agregando que el problema comienza cuando “se
trata de organizarse sobre esa idea, es decir, de dar rienda suelta a sus
instintos y llevar una vida escandalosa”.
Enfatizó que al tener esa
situación la única salida es apartarlo de la vida eclesial. “Ahí hay que
decirle mirá vos sos muy buen tipo pero acá no tenés lugar”, agregó. También
aseveró en la misma oportunidad, que a sus pares les incomoda que la diócesis a
su cargo haya lanzado la mayor cantidad de clérigos, y precisó que desde el
2010 empezó a ordenar un promedio de 15 sacerdotes por año, mientras que del
Seminario Mayor solo salían 5.
BIOGRAFÍA
Nació el 30 de agosto de
1945 en la ciudad de Corrientes, Argentina, siendo ordenado el día 15 de agosto
de 1978, recibiendo la consagración episcopal el día 12 de julio de 2004. Fue
Doctor en Derecho Canónico y su lema episcopal era Santifícanos en la Verdad.
Fue Obispo de la Diócesis de Ciudad del Este en Paraguay del 2004 a 2014, año
en que fue destituido por el Papa Francisco so pretexto de "serias razones
pastorales" y por "así convenir a la Iglesia de Paraguay".
En su adolescencia, se
trasladó a Paraguay para cursar sus estudios de Bachiller en el Colegio San
José de Asunción. Se recibió como Abogado, Notario y Escribano Público en la
Universidad Católica "Nuestra Señora de la Asunción", logrando el
título de Especialista en Derecho Administrativo por la Escuela Nacional de
Administración Pública de Madrid (España) y Doctor en Derecho Canónico por la
Universidad de Navarra (España). A su vez, fue ordenado Sacerdote el 15 de
agosto de 1978, habiendo pertenecido al clero de la Prelatura de la Santa Cruz
y Opus Dei.
Desarrolló su servicio
sacerdotal en la actividad pastoral directa como Capellán del Centro
Universitario CUDES y de la Universidad Austral en Buenos Aires y del Centro
Universitario Ycuá y de la Escuela de Formación para asistentes de Empresas de
Servicios (EFAES) de Asunción, tras haber actuado como Vicario de la prelatura
de la Santa Cruz y Opus Dei en Buenos Aires.
Tuvo una intensa labor
académica como Profesor de Introducción al Derecho en la Facultad de Ciencias
Jurídicas de la Universidad Católica de Asunción, siendo además Profesor de
Derecho Administrativo en la Facultad de Derecho de la Universidad de Navarra
(España), desarrollando también su actividad Profesor de Derecho Canónico en el
Seminario Internacional de la Prelatura de la Santa Cruz y Opus Dei en Roma y asimismo
Profesor de Teología en la Facultad de Derecho de la Universidad Austral de
Buenos Aires.
Fue nombrado obispo de
Ciudad del Este por el Papa Juan Pablo II, el 12 de julio de 2004, efectuando
la toma de posesión del cargo el 3 de octubre del mismo año.
Su lema episcopal, “Santifícanos
en la Verdad” se inspiró en las palabras dichas por Jesús en la Última Cena,
cuando se dirigió a Dios Padre diciendo “Santifícanos en la Verdad: Tu Palabra
es la Verdad” (Jn 17,17). Significa que conociendo el mensaje de Cristo,
conociendo a Cristo e identificándonos con El, nos conducimos por el camino de
la santidad, logramos el fin de nuestra vocación cristiana y el objeto de
nuestro vivir terreno. Consideraba que tal es el norte de la labor del Obispo:
animar a los cristianos en el camino de la santidad.