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jueves, 9 de julio de 2009

67 AÑOS REMEMORANDO LA INDEPENDENCIA DEL 9 DE JULIO

Por Emilio Nazar Kasbo

Cada 9 de Julio es una fecha especial no solamente para la Patria, festejando nuestra Independencia, sino también para la ciudad de La Plata que en 1942 vio nacer un nuevo medio de prensa independiente: el Diario Pregón.

La Independencia argentina responde al origen, raíz y esencia nacional, pues implica una emancipación de la Madre Patria, España, de la cual se heredaron la Fe católica que constituye la base de la identidad, junto con el idioma castizo, el espíritu militar y el Derecho de los romanos, así como la reflexión de la filosofía y la ética grecolatina clásica que tuvieron su momento culmen en la Alta Edad Media prolongada en la Edad de Oro española. Llegada esta Tradición a América, se mestizó con la cultura autóctona, resultando así el criollo, que en Argentina es el gaucho.

Quien negare esta identidad mestiza americana, no puede ser más que un racista, ya sea por parte del estilo “inglés” que exterminó en un gran genocidio a los autóctonos norteamericanos, manteniendo sus absurdas teorías de supremacía de la dignidad de la raza blanca sobre las demás, como por parte de indigenistas que reivindican de modo racista la supremacía de razas cobrizas autóctonas sobre otras. La dignidad humana no tiene razas, y es dada y sustentada por Dios mismo, principalmente por el Orden Natural creado por El, en una fraternidad que tiene justificación Jesucristo como hermano, en quien somos hijos de Dios Padre. La moral, por eso, no admite racismos.

La Declaración de la Independencia, que tenía antecedentes políticos en el Primer Gobierno Patrio de Mayo de 1810, y que claramente tenía al Catolicismo como la Religión del Estado. El ejercicio de la Independencia y de plena Soberanía, fue bajo el mando del Brigadier General Don Juan Manuel de Rosas.

La Independencia no hay que proclamarla solamente, sino que debe ser ejercida a cada instante. Lamentablemente, los gobiernos que se han sucedido implantaron la Constitución liberal de 1853, a la vez que sometieron a la República proclamada a poderes internacionales que sojuzgaron y sojuzgan a nuestra Patria. Y la independencia implica por otra parte estar dispuesto a sacrificios para sostenerla.

Diario Pregón de La Plata nació por impulso de un grupo de ciudadanos, el 9 de Julio de 1942, siendo Hernando Navas su primer Director. Ya el Gobernador de la Provincia de ese entonces, el Dr. Rodolfo Moreno, en una carta dirigida al medio expresaba en esa misma fecha: “Iniciar una publicación periodística el día de la consagración jurídica de la libertad argentina, equivale a ponerla bajo el más grande auspicio nacional… Un órgano de prensa que nace limpio, claro y libre, está obligado a ser sincero, veraz, culto, moderado y patriota. No oculten la verdad, no mientan nunca, no escatimen el elogio merecido y no limiten la crítica justiciera”. Todo un programa para el futuro del Diario.

Don José Hernando Navas continuó manteniendo la presencia y vigencia del Diario Pregón de La Plata, con altibajos no excentos de injustas discriminaciones. Y el día 22 de Agosto de 2002, día de María Reina, se inició la nueva dirección del medio vigente al presente.

Hoy, este medio que tiene en desarrollo la presencia en Internet, en diversas fases, se publica impreso en papel de lunes a lunes, excepto días feriados, y es distribuido entre la dirigencia platense.

Afirmaba al respecto del periodistmo el Papa San Pío X: "En vano construirán iglesias, predicarán misiones y edificarán escuelas; todas sus buenas obras, todos sus esfuerzos serán destruídos, si no saben manejar al mismo tiempo el arma ofensiva y defensiva de la prensa católica leal y sinceramente". "Es necesario decirlo de nuevo enérgicamente en estos tiempos de anarquía social e intelectual en los que cada uno se erige en doctor y legislador... no se levantará la ciudad sino como Dios la ha levantado, no se edificará la sociedad si la Iglesia no pone los cimientos y dirige sus trabajos. No, la civilización no está por inventarse, ni la ciudad por construirse en las nubes. Ha existido, existe; es la civilización cristiana, es la CIUDAD CATÓLICA. No se trata más que de instaurarla y restaurarla sobre sus naturales y divinos fundamentos cotra los ataques, siempre renovados de la utopía nociva de la rebeldía y de la impiedad: OMNIA INSTAURARE IN CHRISTO".

Asistimos a un nuevo aniversario de la Patria, y también de este medio tradicional de la ciudad, y por ambos motivos saludamos a los lectores en la consigna que une ambas causas: la Fe.

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