EMERGENCIA PERIODÍSTICA EN EL ESTADIO DE LA PLATA DURANTE EL PARTIDO DE ESTUDIANTES-CRUZEIRO

En la foto: Vista aérea del Estadio Único de La Plata.

Por Emilio Nazar Kasbo

Uno de los datos que no ha tenido mayor difusión, es la situación de la prensa durante el Partido del 8 de julio de 2009 en el Estadio Unico de La Plata. El encuentro era por la Copa Libertadores de América, el cual por su relevancia resulta de interés no solo local o nacional, sino internacional, lo cual no requiere de mayores explicaciones. ¿Se encuentra preparado el Estadio para eventos semejantes en cuanto al trato y manejo de la cobertura periodística? ¿Es contradictoria la seguridad con el trabajo periodístico?

Hay que destacar que la cobertura en un evento semejante, abarca como cuestión central el Partido, pero existe también la cobertura del marco general, que no siempre se produce en el Estadio, con notas que dan color y vida al encuentro. Hasta minutos antes de que los jugadores ingresen, hay tiempo para hacer este tipo de notas, tras lo cual se deben ocupar lugares asignados.

Para el periodismo, el Estadio posee 204 lugares para prensa escrita que pueden ser ampliables a mil, más 24 cabinas de Radio o TV, a lo cual se suman tres salas, una de entrevistas con estudio de TV, una de Conferencia para 200 personas, y la tercera de comunicaciones.

Hasta ahí, todo pareciera correcto. Sin embargo, algo falló.

En el ingreso, se restringió al periodismo todo tipo de movimientos, incluso el ingreso. Camarógrafos no solo de pequeños medios, sino de los grandes multimedios, vieron obstaculizada su labor, sin autorización para desenvolverse libremente en el lugar.

En el ingreso de la cochera del Estadio, donde numerosos camarógrafos captaban la entrada de personalidades, las puertas corredizas de metal fueron cerradas, produciéndose amontonamientos y altercados entre el personal de seguridad y los periodistas. La prensa fue víctima de gritos, y severos enojos, hasta empujones y agresiones físicas.

“Estamos trabajando, no nos dejan trabajar, no podemos volver sin la nota”, era la frase repetida de periodistas, fotógrafos y camarógrafos.

Desde el sector de Prensa, indicaron que hubo un récord de acreditaciones, que rondaron las 480, y afirmaban que en 20 años jamás hubo tantos medios acreditados para un partido de Estudiantes. La página Web de Estudiantes se había cerrado para acreditaciones el día lunes 6 de julio.

Por otra parte, acabaron acreditando a medios en el sector visitante, y se cerraron los portones metálicos que unen las distintas Secciones del Estadio. La puerta del sector visitante estaba abierta sólo de un costado del Estadio al cual se podía acceder sólo con autorización, mientras periodistas, fotógrafos y camarógrafos que buscaban su ubicación, debieron dar toda la vuelta al Estadio para ingresar por la puerta contraria. Ni siquiera permitieron el ingreso del personal que corre las vallas, quienes se retiraron ofuscados: “ya me tienen cansado, que las vallas las retiren ellos”, decían, refiriéndose a quienes autorizaban el ingreso del personal.

El sector brasileño contó con la máxima seguridad policial y sanitaria. Fueron pocos los hinchas visitantes, los cuales fueron reubicados juntos en la tribuna, entre dos filas de custodia policial. También gozaron de un gran despliegue de médicos, enfermeros, camillas y de medicamentos para cualquier emergencia, que finalmente no se produjo. “No queremos que después digan ‘nos contagiamos de gripe’ en La Plata”, dijo un médico que organizaba el despliegue a Diario Pregón.

Durante el partido, en que no hubo goles, hubo sin embargo alguien que perdió: el Periodismo.