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lunes, 1 de marzo de 2010

CRISTINA INAUGURA LAS SESIONES 2010 DEL CONGRESO DESCRIBIENDO UN PAIS "IMAGINARIO"


A las 10.40 hs los senadores realizaron un minuto de silencio por el terremoto en Chile, mientras Elisa Carrió y Carlos Menem no concurrieron y se encuentran ausentes en el acto de inauguración de las sesiones ordinarias del Congreso Nacional 2010.
El Gabinete del Gobierno Nacional llegó junto con el Gobernador bonaerense Daniel Scioli, e inmediatamente después, a las 11 de la mañana, ingresaron la presidente Cristina Kirchner junto a Néstor Kirchner, siendo recibidos por el presidente del Senado Julio Cobos. En tanto, el kirchnerismo ha dejado de ser mayoría en el congreso.
Al hacer uso de la palabra, entre un griterío y personas que chiflaban, hizo alusión a los terremotos de Chile y a la colaboración que la Argentina está brindando al vecino país.
Por su parte, la diputada Elisa Carrió y la senadora María Eugenia Estenssoro anticiparon que no asistirían al acto para repudiar la actitud de los legisladores oficialistas, quienes se retiraron del recinto el miércoles pasado cuando se debía definir el reparto de poderes en el Senado.
El senador Agustín Rossi asentía mientras Cristina Kirchner expresaba que "más de 100 mil trabajadores recibieron ayuda del ministerio", y que "el objetivo frente a la crisis era evitar los despidos masivos", criticando las cifras extraoficiales que difunden los medios de comunicación, mientras afirmaba que el 2009 cerró con un 8,4 % de desocupación en el país.
"Quiero aclararles que voy a hablar del país real. Surgieron dos países en los últimos tiempos. Un país real y un país virtual en el que suceden cosas horribles", interpretándose que su referencia al "país real" al mundo imaginativo de los funcionarios del Gobierno, y como el "país virtual" a la (mediática) situación en que vive cotidianamente la población". "La Argentina virtual, mediática nos hablaba de que nuevamente se iban a disparar los índices de desocupación. Pero cerramos el año con 8.4 de desocupación".
También que el desarrollo fuerte "del mercado interno fue lo que permitió superar la crisis" (dando a entender que ya no existe ninguna crisis en el país: ni en desmpleo ni en ingreso per cápita). "El crecimiento se debió a la solidez del modelo económico y político", afirmó la Presidente, previo a leer cifras oficialistas de crecimiento.
"El crecimiento económico debe generar empleo y disminución de la pobreza", manifestó. "Todo esto fue posible gracias a la solidez de un modelo económico que desde el 25 de mayo de 2003 generó las condiciones macro económicas que permiten que un país salga adelante"
Estela de Carlotto aplaudió mientras Cristina Kirchner afirmaba la cantidad de planes sociales y describía prácticamente una situación de pleno empleo en el país, en afirmaciones disparatadas que solamente podría realizar una persona que vive en un farandulesco micromundo de lujos y placeres alejado de la realidad cotidiana de la población.
La "Argentina real" que describió es la de 3 millones y medio de chicos que reciben una nimia asignación familiar insuficiente para las más básicas necesidades elementales de los niños. "La Argentina mediática solamente habla, obstruye", afirmó mientras Hebe de Bonafini (beneficiaria de millones de Pesos aportados desde el Presupuesto de la Nación sin necesidad de rendir cuenta sobre los mismos) la aplaudía desde un balcón.
Una mirada de odio con mezcla de temor se veía en los legisladores y funcionarios opositores.
"Vamos a poder aplaudir más el día que podamos decir pobreza 0 a lo largo y a lo ancho del país. Por ese día seguimos trabajando. No necesito aplausos, necesito esfuerzo y cooperación. La Patria, no Cristina, no el Gobierno, la Patria necesita que nos despojemos de nuestras ambiciones legítimas. Todos los que están sentados acá quieren ser todo y mucho más, como yo también. Pero por un momento, despojarnos de estas ambiciones para ver el país real y que se nos permita tener una clara visión de lo que está ocurriendo", manifestó Cristina Kirchner.
En medio de un griterío en el recinto, Cristina replicó: "Basta, hay que escuchar a todos".

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