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martes, 9 de marzo de 2010

OPOSITORES DE LA BOCA PARA AFUERA Y PRONTOS PARA LA TRAICION


Por Cosme Beccar Varela *
09 de marzo del año 2010 - 958


Ortega y Gasset pronunció una conferencia sobre la "vieja y la nueva política" en el Teatro de la Comedia de Madrid, en Marzo de 1914. La leí en la versión publicada por la "Revista de Occidente" en 1963. Debo empezar diciendo que Ortega y Gasset no es santo de mi devoción pero reconozco que ha hecho observaciones sobre la política y sobre otros asuntos, algunas de las cuales son brillantes. Hay que desprenderlas de su último pensamiento, que es ateo, originariamente socialista, luego naturalista liberal, pero por su indudable inteligencia él no podía dejar de ver la decadencia de España, aunque no admitiera que ello se debía a su apostasía del catolicismo, ni acertara a discernir cuál era la manera de restaurar la sociedad española tal como debía ser ni como podían repararse los daños inmensos de la modernidad.

En esa conferencia hay una frase que me interesa citar aquí porque me sirve para explicar algo que muchas veces he tratado de dar a entender en "La botella al mar" con poco éxito hasta ahora, probablemente por no tener, ni de lejos, la capacidad de expresión (a veces hasta pedante) de Ortega y Gasset. Dice Ortega:

"La política es, tanto como obra de pensamiento, obra de voluntad; no basta que unas ideas pasen galopando por unas cabezas; es menester que socialmente se realicen, y para ello que se pongan resueltamente a su servicio las energías más decididas de anchos grupos sociales. Y para esto, para que las ideas sean impetuosamente servidas, es menester que sean plenamente queridas, sin reservas, sin escepticismo, que hinchen totalmente el volumen de los corazones" (Op.cit., pag. 17)

* * *

Esta frase tiene mucha substancia y sirve para entender lo que nos pasa hoy a los argentinos. Hay mucha gente que aborrece a esta tiranía, pero en realidad no la aborrece sino porque en los círculos sociales que frecuenta está de moda aborrecerla, no porque tenga una idea claramente pensada y ardorosamente sentida acerca de la Justicia que es violada por la política actual.

En vez de ideas tiene intereses y sentimientos. Interesa no desentonar con el medio ambiente que es medio enemigo del régimen, de tal manera que apoyando un medio opositor su medianía queda satisfecha. En cuanto a las ideas, leyendo los diarios del "establishment" no necesita pensar ni hacer otra cosa que "seguir la corriente".

Desde este mirador que es "La botella al mar" puedo observar las reacciones de lo que podría llamarse la "creme de la creme" de los que critican el régimen tiránico de los Kirchner. La conclusión que invariablemente me veo forzado a sacar es que, en realidad, no son enemigos de ese régimen (que también integra la falsa oposición, así como los claroscuros integran el color de los cuadros) sino que fantasean con ser opositores sin estar dispuestos JAMÁS a serlo realmente.

O sea, no cumplen el requisito que señalaba Ortega: para que "las ideas sean impetuosamente servidas, es menester que sean plenamente queridas, sin reservas, sin escepticismo, que hinchen totalmente el volumen de los corazones".

Más que ideas son devaneos, "flirteos" con un patriotismo de opereta, no queridas realmente ni mucho menos con esa plenitud que decía Ortega y que conduce inexorablemente a la acción.

No hay propuesta que merezca su adhesión, a no ser la que venga con el sello del "nihil obstat" del "establishment".

Cualquier gesto aparentemente opositor, por obviamente falso o insuficiente que sea, les parece digno de admiración. Y eso porque no compromete, no tiene costo y... no sirve para nada, sino apenas para consolidar la tiranía.

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Ésta, que no es obra de los Kirchner sino de un "trust" de cerebros marxistas que está detrás de ellos, conducido aparentemente por Verbitzky a la cabeza del CELS, tiene un objetivo claro y una estrategia astutamente diseñada. Sabe cómo llegar a su objetivo, que es la destrucción de la Argentina mediante la instauración de un Estado socialista, y sabe cómo y cuánto vale la "resistencia" de estos "opositores a la violeta".

Ordenan a los Kirchner tomar decisiones que parecen ponerlos al borde de la destitución o del fracaso político, pero siempre terminan con una victoria inadvertida. Los argentinos "cultos" ni se dan cuenta que al cabo de una maniobra de esas, hay algo del viejo edificio de la Argentina tradicional, algún baluarte de resistencia, que cayó y que nunca más será reconstruido.

Así fue el 28 de Mayo del 2003 cuando Kirchner, para gran sorpresa de todos, destituyó toda la cúpula de las FFAA sin que hubiera resistencia alguna. ¡Qué bien estaba calculada la cobardía y la falta de principios de las FFAA! En otros asuntos fue igual: el repudio de la deuda externa en el 2005; la inseguridad no reparada por el afán de perseguir a la Policía; la imposición de la cónyuge de Kirchner como presidente; las confiscaciones contra el campo; el robo de los fondos de las AFJP; las amenazas de Moreno y sus “muchachos que arrancan ojos y quiebran espaldas” y muchos otros, el escenario fue el mismo. La tiranía toma una medida que parece suicida, pero al cabo de varios vaivenes, termina siendo una victoria.

Ahora es el asunto de las reservas del Banco Central. Todavía no terminó, pero ya se perfila el mismo escenario. La Sra. de Kirchner desafió al Congreso y a los jueces y amenazó a la oposición en un discurso aparentemente disparatado. La "oposición" pataleó, parecía que el gobierno iba a ser derrotado, pero ya hoy el radicalismo anuncia que ha llegado a un acuerdo y que "la sangre no llegará al río"... (ver "La Nación", 9/3/2010, pag. 4 y "Clarín" 9/3/2010, pag. 3)

* *

Mientras tanto, las clases cultas siguen representando el mismo papel de indignación hipócrita y una gran parte del pueblo sigue cobrando sobornos de la tiranía que lo desinteresan del trabajo y lo atan a la suerte del gobierno.

La "elite" de los disidentes no hace otra cosa que lo mismo. Nadie razona, nadie toma en serio las cosas, nadie oye, nadie responde, nadie actúa.

Me dirán que yo tampoco hago otra cosa que escribir artículos. Si alguien dijera eso no diría la verdad. He fundado dos partidos políticos, he convocado dos veces a una Asamblea por la Patria, he dado inicio a una Asociación Patriótica y he intentado, hace pocos días, incitar a un argentino patriota, que había felicitado "La botella al mar" a que invitara al menos a otros 15 argentinos a formar una sociedad para pensar y actuar que sirva de comienzo para una acción más vasta a la que debe ser convocada la opinión pública.

Además de escribir y dar ideas -por la obvia razón de que el pensamiento precede a la acción- siempre he actuado en la calle, en contacto con la gente. Nunca dejé de decir que si bien es necesario persuadir a una minoría, y para eso hay que escribir y hablar, el objetivo es movilizar a la opinión pública.

Sin embargo es esa minoría la que no existe o se niega a actuar. Sospechando que eso se debe a que yo "tengo mala prensa" para esta última iniciativa he invitado a otro con menos resistencias del "establishment" a tomar la iniciativa y me he ofrecido a secundarlo. No aceptó...

Ahora bien, como la única manera de destituir legalmente a esta tiranía es mediante una movilización de la opinión pública y eso no se conseguirá jamás sin una "minoría entusiasta que opere sobre ella con tenacidad, con energía, con eficacia" (op. cit. pag. 68) debo concluir que la Argentina parece perdida.

* * *

No hay que hacerse ilusiones. Esta Argentina de hoy es apenas una transición. Hay dos caminos imaginables: a) una restauración de la Argentina sobre la base de la Justicia, bajo la dirección de una Autoridad identificada con ella y plenamente capaz o b) un Estado marxista.

La primera alternativa está visto que no tiene posibilidad alguna. La segunda se configura cada vez más como inexorable.

El peronismo meramente demagógico, resentido y ladrón -que es lo que ha sido hasta ahora- es el instrumento usado por la siniestra elite marxista que dirige el país para lograrlo. La mentalidad demagógica, resentida y deshonesta del peronismo, en todas sus ramas, es un excelente semillero de aliados y "caldo de cultivo" para el marxismo.

Y el laicismo -también resentido- del radicalismo, lo hace un inmejorable "compañero de ruta" de ese intento. Mientras que la pretendida "oposición", constituida por marxistas declarados, y centristas acomodaticios y logreros de todo tipo, se plegará al proceso por afinidad ideológica o por miedo o por soborno, tan pronto se lo exijan y vea que corre peligro negándose...

Este es el panorama político y sociológico del país. Por eso debo decir, que mi desprecio por los farsantes de la "derecha" es cada día mayor. No puedo creer que no sean culpables por omisión de este derrumbe, con el agravante de que, sabiendo todo lo que saben, esa omisión se parece mucho a una traición.

Esto sea dicho por aquello de la Sagrada Escritura: "Corrige al justo y te lo agradecerá". Tal vez esta increpación los haga recapacitar y la Argentina se salve.

* e-mail: correo@labotellaalmar.com

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