BICENTENARIO: TESTIGO DEL CASTRENSE APOCALIPSIS-K

CARTA ABIERTA

Por el Ing. Tomás Julián Persichini

De Cornelio Saavedra y Mariano Moreno a Cristina Kirchner y Nilda Garré

-De Ejército de la Patria a Ejército-K. De Mariano Moreno el 28-mayo-1810 a Nilda Garré el 18-noviembre-2010-

«No tengas miedo.», dijo el Ángel a María y a José.

«No tengas miedo.», dijo Cristo a los Apóstoles, y a Pedro, en varias ocasiones.

«Cruzando el umbral de la Esperanza» (1994)

S.S. Juan Pablo II

El hecho de que, en días más, se habrán de entregar los Despachos de Egreso del Colegio Militar de la Nación con el Grado de Subteniente, y en posterior ceremonia los Sables correspondientes -símil para las otras Fuerzas Armadas-, constituye la oportunidad más propicia para que su sociedad conozca y tenga apropiada conciencia de lo que ello es para la Patria Argentina, y quiénes son los que lo reciben.

Para ello, es prioritario echar de ver, el esencial atributo vocacional que marcará a fuego su conducta de vida, dentro de la Institución, y fuera de ella: el Honor.

honor. Cualidad moral que lleva al cumplimiento de los propios deberes respecto del prójimo y de uno mismo. (Diccionario de la Lengua Española de la Real Academia Española; Edición 2001)

El Prólogo del Reglamento de los Tribunales de Honor de las Fuerzas Armadas, lo explicita al amparo de la indubitada autoridad ética y moral del Padre de la Patria:

«El Honor es la riqueza más grande que puede tener un militar. Mantenerlo sin mancha y sin tacha es el deber más sagrado de todo miembro de las Fuerzas Armadas. Observar en todo momento una conducta ejemplar es la mejor defensa del propio honor.

El Capitán en Jefe del Ejército de los Andes, D. José de San Martín, cabal expresión de lo que debe ser un hombre de armas y singular ejemplo de honor militar, fue el redactor del primer Reglamento de Honor, y, al ponerlo en vigor, dijo a sus oficiales:

“Yo estoy seguro que los oficiales de honor tendrán un placer en ver establecido en su cuerpo, una institución que los garantice de confundirse con los malvados y perezosos, y me prometo -porque la experiencia me ha demostrado- que esta medida les hará ver los más felices resultados, como la segura prosperidad de las armas de la Patria.”»

malvado, da. Dicho de una persona: muy mala, perversa, mal inclinada.

malo, la. Que carece de la bondad que debe tener según su naturaleza o destino. || 3. Que se opone a la razón o a la ley.

¿Cuáles pueden ser “Transgresiones al Honor”?

Se indicarán sólo dos:

1. Faltar a la palabra de honor.

2. Incurrir en actos de deslealtad para con las instituciones o camaradas de las Fuerzas Armadas.

¿Y respecto del Sable?

El dicente nunca ha leído una anécdota más quijotesca y demostrativa de lo sublime de la condición humana, que la escrita por el Teniente Coronel Américo Flaiban:

«En memoria del General Expedicionario del Desierto D. Ricardo Anacleto Solá.

Me estaba desenganchando el sable, para dejarlo junto a la gorra y los guantes en el guardarropa, cuando el General me preguntó si sabía lo que estaba dejando sobre la mesa. Un tanto sorprendido le contesté que sí, que era el símbolo de mando del oficial.

-De acuerdo -me dijo- ¿Pero cuál es su significado intrínseco?- A mi silencio correspondió pidiéndome permiso para tomarlo, dándome entonces la siguiente explicación:

“El pomo del sable significa: la verdad, donde está acuñado el Escudo Nacional”.

“Aquí, en el guardamanos, están talladas las más caras tradiciones nacionales, simbólicamente figura la efigie del Cuzco, hasta donde llegaron las armas argentinas llevando la libertad. La curvatura es igual a la usada por el Libertador de origen Morisco, que representa: Equilibrio - Justicia - Paz”.

“Este es marte, Dios de la Guerra, en el anverso está: la libertad”

“La dragona tiene una cinta con un lazo corredizo, que como Ud. sabe el oficial ciñe a su muñeca cuando desenvaina el sable. Bueno, si extendemos esa cinta, dentro de ella cabe la cabeza de un hombre.”

“Y aquí en la hoja está grabada la inscripción: “sean eternos los laureles”, que son los propósitos de nuestro Himno Nacional.”

Sorprendido por tantas cosas que ahora, ante la explicación tomaban verdadero relieve el señor General continuó su relato:

-En definitiva, mi joven amigo, el sable sintéticamente significa:

“Siempre que desenvaines tu sable, empuñando la Verdad y teniendo al Escudo Nacional como divisa, en defensa de nuestra Libertad, aunque te empeñes en la guerra, las más caras y gloriosas tradiciones nacionales te protegerán la mano. Tuya será la victoria y eternos serán los laureles. Pero piensa que atado a tu muñeca llevas un juramento que te recuerda:

¡Más vale morir ahorcado que traicionar a la Patria!»

¡Emocionante!

¿Se pueden encontrar juicios de personalidades civiles? ¡Por supuesto!

De ese genio filosófico que fue el doctor José Ortega y Gasset:

«... debe un pueblo sentir su honor vinculado a su ejército, no por ser el instrumento con que pueda castigar las ofensas que otra nación les infiera; éste es un honor externo, vano, hacia fuera. Lo importante es que el pueblo advierta que el grado de perfección de su ejército mide con pasmosa exactitud la moralidad y vitalidad nacionales. Raza que no se siente ante sí misma deshonrada por la incompetencia y desmoralización de su organismo guerrero, es que se halla profundamente enferma e incapaz de agarrarse al planeta.»;

y del doctor Arturo Frondizi:

«Ninguna Nación que lo sea realmente, puede prescindir de su brazo armado, como celoso y aguerrido defensor de la soberanía territorial, en todas sus acepciones. Sin él, la República pierde una condición prioritaria para la vigencia del Estado Nacional: la de garantizar el monopolio del uso de la fuerza dentro de la sociedad.»

¿Desde cuándo y para qué existe una Fuerza Armada?

Desde que países que quisieran ocupar territorios y/o ámbitos vitales de otra Nación, para los cuales el recurso del Derecho era insuficiente, ha existido la ineludible necesidad de disponer de un medio fáctico y confiable que le permitiera impedirlo.

país. Nación, región, provincia o territorio.

nación. Conjunto de habitantes de un país regido por un mismo gobierno.

patria. Tierra natal o adoptiva ordenada como nación, a la que se siente ligado el ser humano por vínculos jurídicos, históricos y afectivos.

Ese medio “fáctico y confiable” fueron, son y serán las Fuerzas Armadas, cuya misión y funciones institucionales jamás podrían asemejarse a las de ninguna de las profesiones civiles. Tal, la razón por la cual la juridicidad militar no es la de una profesión; la juridicidad que le incumbe al militar, es la de poseer un “Estado militar”, que es una categorización absolutamente distinta. Por eso es que lleva públicamente un “Uniforme militar” que lo distingue con impar nitidez ante la sociedad, y puede transitar entre esa sociedad con el arma más poderosa, sin que ella tenga un mínimum de recelo.

Por su señera misión y funciones institucionales, es que la mismísima Constitución Nacional de 1994 le ha otorgado al Poder Ejecutivo cuatro (4) Atribuciones ad hoc en el art. 99:

«Artículo 99. - El presidente de la Nación tiene las siguientes atribuciones:

12. Es comandante en jefe de todas las fuerzas armadas de la Nación.

13. Provee los empleos militares de la Nación: con acuerdo del Senado, en la concesión de los empleos o grados de oficiales superiores de las fuerzas armadas; y por sí solo en el campo de batalla.

14. Dispone de las fuerzas armadas, y corre con su organización y distribución según las necesidades de la Nación.

15. Declara la guerra y ordena represalias con autorización y aprobación del Congreso.»

En la CN de 1853/60, en el art. 88, los Items 15, 16, 17 y 18 (de 22).

Mismísimas atribuciones constitucionales que fueron olímpicamente desechadas a favor de un sistemático desbaratamiento, de una sistemática desorganización, con premeditado, alevoso y superlativo énfasis a partir del 25-mayo-2003 por Néstor Kirchner y Cristina Kirchner, por la simple razón que eran incógnitos, ocultos “subversivos y terroristas de bla-bla-bla”, que accedieron a la Presidencia de la Nación por vía de fraudulentos procesos electorales ad hoc, engañando al pueblo al contar con la complicidad -costosa por supuesto- de la totalidad de los medios de comunicación social.

Es fundamental que el lector tome cabal conciencia de que, a partir del “Golpe de Estado lumpemproletario-parlamentario” del 19/20-diciembre-2001, quienes se hicieron cargo del Poder Ejecutivo nacional, el Gobernador de provincia de San Luis en ejercicio Adolfo Rodríguez Saá desde el 23-diciembre-2001 y el Senador nacional por la provincia de Buenos Aires en ejercicio Eduardo Alberto Duhalde desde el 1-enero-2002, fueron elegidos y designados “Presidentes de la Nación” directamente por el Congreso (el pueblo… a la m…) es decir, que ambos no fueron otra cosa que “Delegados” del mismo. ¡Desvarío puro: el Ejecutivo nacional y el Congreso, manipulados por quienes cometieron delitos oprobiosamente! ¡Todos, todos sin excepción, debieron ser procesados in sólidum!

Golpe de Estado. Actuación violenta y rápida, generalmente por fuerzas militares o rebeldes, por la que un grupo determinado se apodera o intenta apoderarse de los resortes del gobierno de un Estado, desplazando a las autoridades existentes.

Rebelarse. || 2. Oponer resistencia.

Si: “Golpe de Estado lumpemproletario-parlamentario” porque, mientras los lúmpenes (contando con el asenso de sus encubridores y oportunos incitadores, los entonces senadores por la provincia de Buenos Aires Raúl Ricardo Alfonsín y Eduardo Alberto Duhalde) alteraban con violencia y pertinacia el orden público en distintos lugares de la zona céntrica de la Capital Federal, ‘oponiendo resistencia’ a las Fuerzas Policiales que debieron intervenir para restablecerlo, el Congreso, cómplice, miraba para otro lado sesionando como si nada pasara.

¿Qué asegura a la Nación, que las Fuerzas Armadas defenderán a la Patria?

¡La “Tríada Etica militar”: «Patria - Honor - Deber!

La “guerra”, en cualquiera de sus formas de expresión, donde cada día que pasa se incrementa el universo de daños, se hace más compleja, inesperada, indeterminada y sofisticada, es la única, exclusiva y excluyente razón que justifica plenamente la existencia de cada día más eficaces y eficientes Fuerzas Armadas de la Patria. Son las únicas con capacidad para actuar, cuando se “atenta contra la soberanía de la Nación, tanto externa como interna”.

¿De qué soberanía puede hablar una Nación, si el aparato productivo primario, el formador y fijador de precios con los bienes que la tierra proporciona, si, como dijera el escritor y musicólogo francés Romain Rolland (1866-1944):

«Dios nos entrega la tierra para que la gocemos todos en común, con la obligación de ser honrados.»,

están en manos de megamultinacionales?

Lo dijo con todas las letras S.S. Juan Pablo II el 5-octubre-1995, en oportunidad de celebrarse en Nueva York el Cincuentenario de la Fundación de las Naciones Unidas. Invitado por su Secretario General, el Doctor Boutros-Ghali, a pronunciar el Discurso de Apertura de la Asamblea General, lo hizo leyendo su Mensaje que tituló: «Los Derechos de las Naciones»:

«Presupuesto de los demás derechos de una nación es ciertamente su derecho a la existencia: nadie, pues, -un Estado, otra nación, o una organización internacional- puede pensar legítimamente que una nación no sea digna de existir.»

«El derecho a la existencia implica naturalmente para cada nación también el derecho a la propia lengua y cultura, mediante las cuales un pueblo expresa y promueve lo que llamaría su originaria “soberanía” espiritual. La historia demuestra que en circunstancias extremas (como aquellas que se han visto en la tierra donde he nacido), es precisamente su misma cultura lo que permite a una nación sobrevivir a la pérdida de la propia independencia política y económica. Toda nación tiene consiguientemente derecho a modelar su vida según las propias tradiciones, excluyendo, naturalmente, toda violación de los derechos humanos fundamentales y, en particular, la opresión de las minorías. Cada nación tiene el derecho de construir su propio futuro proporcionando a las generaciones más jóvenes una educación adecuada.»

«La libertad no es simplemente ausencia de tiranía o de opresión, ni es licencia para hacer todo lo que se quiera. La libertad posee una “lógica” interna que la cualifica y la ennoblece: está ordenada a la verdad y se realiza en la búsqueda y en el cumplimiento de la verdad. Separada de la verdad de la persona humana, la libertad decae en la vida individual en libertinaje y en la vida política, en la arbitrariedad de los más fuertes y en la arrogancia del poder. Por eso, lejos de ser una limitación o amenaza a la libertad, la referencia a la verdad sobre el hombre, -verdad que puede ser conocida universalmente gracias a la ley moral inscrita en el corazón de cada uno- es, en realidad, la garantía del futuro de la libertad.»

No hace falta explicar nada más. El 25-mayo-2003, Eduardo Alberto Duhalde y el Congreso de la Nación, instalaron fraudulentamente en el Poder Ejecutivo nacional a Néstor Carlos Kirchner, un incógnito, oculto representante de la subversión y del terrorismo vencido por las Fuerzas Armadas, de Seguridad, Policiales y Penitenciarias durante el autodenominado Proceso de Reorganización Nacional, quien a su vez, también fraudulentamente (por vía del Decreto 292/2005 y no por la Constitución Nacional de 1994), instaló para sucederlo a su esposa Cristina E. Fernández de Kirchner el 10-diciembre-2007.

Sucedió lo que debía de suceder: la repulsión abierta y llana del Preámbulo y por ende del Articulado de la Constitución Nacional, la virtualidad de los Poderes Constitucionales y demás Organismos por ella prescriptos, la sustantiva degradación de las Instituciones de la República, y, fundamentalmente, la fáctica inanidad operativa de las Fuerzas Armadas de la Patria.

Su megalómana, paranoica y perversa personalidad, inepta absoluta para desempeñar el cargo de “Primer Mandatario” -no “Primer Mandante”- de la República, le impidió diferenciar los dos primeros y elementales conceptos que debe conocer todo ciudadano: Nación y Patria.

“Nación” evoca la palabra “nacer”, tener uno origen, existir, ser uno persona en virtud de una madre; mientras que “Patria”, por su parte, evoca la palabra “fatherland” (padre; tierra, terruño, país, Nación), tiene el sentido de que esos “nacidos” conforman una misma familia. Y en una familia, normalmente, no todos piensan igual, pero están siempre unidos.

Tanto Néstor Kirchner como Cristina Kirchner han demostrado hasta el cansancio su devoción por el “Individualismo”, donde es inadmisible la diversidad de opiniones, así como su devoción por el “Utilitarismo”, donde la moralidad de las acciones no está basada en la incumbencia y/o necesidad de las mismas sino en las ventajas que les pudieren aportar.

¿Cómo se compatibiliza ese “Individualismo” y “Utilitarismo”, con lo examinado para con el “Honor” y el “Sable” (en este escrito), con la invocación:

¿Juráis a la Patria seguir constantemente su bandera, y defenderla hasta perder la vida?

a la que los oficiales responden:

¡Si, Juro!

y a la invocación:

¡Subordinación y Valor!

a la que los oficiales responden:

¡Para defender a la Patria!

¿Qué tiene que ver la “Patria” con una “Política de ascensos de la Fuerza”, definida además por una “dedocrática”, fementida “Presidente de la Nación”?

Absolutamente nada.

Además: ¿Dónde figura la “ideología política” entre los rubros a ser considerados por todas las Juntas de Calificaciones de Oficiales, para determinar su “Orden de Mérito” en la fracción a ser considerada para el ascenso?

En ningún lado.

Una carrera militar, toda una vida transitada, no es para ser juzgada por ajenos, y menos aún, por quienes desempeñan funciones públicas faltos de legalidad, como es el caso.

Casi siete (7) años de permanentes malevolencias-K, han dañado a un grado jamás existido la acendrada ética y moral del Ejército Argentino.

Comenzó con Cornelio Saavedra como Comandante General de Armas quien, el 28-mayo-1810 creó el Departamento de Gobierno y Guerra, y el día 29-mayo-1810 expidió el Decreto por el cual designó como Secretario al abogado Mariano Moreno; es decir, que Mariano Moreno no sólo fue quien fundó y dirigió “La Gazeta de Buenos Aires”, sino que fue, en cierto modo, el primer ministro de Guerra que tuvo el Gobierno de la Patria Argentina. Falleció en alta mar a bordo de la goleta inglesa “Fame” por sobredosis de la droga que se le daba para su estado febril el 4-marzo-1811, y, envuelto en una bandera inglesa fue arrojado al mar en proximidades de la isla de Santa Catalina (Brasil).

Pasamos más de dos (2) Siglos -diciembre-2010-, durante los cuales el Ejército Argentino fue el principal medio de fundación de pueblos, de consolidación de nuestro territorio continental y extracontinental -compruébense la infinidad de localidades, ciudades, etc., con nombres de esforzados militares-, a los que llegamos con Cristina Elisabet Fernández de Kirchner como “dedocrática”, fementida “Comandante en Jefe de todas las Fuerzas Armadas”, con Nilda Celia Garré como subversora Ministra de Defensa, y 27 Generales que hicieron letra muerta de la lealtad para con la Institución y sus camaradas, así como del valor del “Sable” que los acompañó durante casi toda su vida; con el agravante de haber permitido que la Patria esté, desde hace años, en “Estado de indefensión militar”.

Que la política antimilitar ha triunfado cumplidamente -responsabilidad exclusiva de cada Fuerza Armada-, y por ende la Argentina estar al borde de su extinción, lo prueba el desinterés periodístico para con las mismas. Veamos del diario la nacion, “Tribuna de doctrina” desde el año 1870:

-Viernes 19-noviembre-2010. Publicado en edición impresa.

“Frenan el ascenso de diez militares por sus apellidos” El Ejército excluyó de la promoción a familiares de oficiales que actuaron durante la dictadura.

-Sábado 27-noviembre-2010. Publicado en edición impresa.

“Postergarían ascensos hasta 2011”. En el Senado esperan señales del Gobierno para avanzar en el tratamiento de los pliegos del personal militar. (332 efectivos, entre las 3 FF.AA.)

-Lunes 29-diciembre-2010. Apostilla del dicente.

Presentación de denuncia del dicente -patrocinado por el Dr. Enrique A. Piragini- ante la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal contra la Presidente Cristina Fernández de Kirchner, la Ministro de Defensa Nilda Celia Garré y 27 Generales por Traición a la Patria, Discriminación y Violación de los deberes de funcionario público. Exp. Nº 15.105/10. Asignado al Juzgado Nº 7 a cargo del doctor Norberto Mario Oyarbide.

- Comunicado por e-mail a DyN.

-Miércoles 1-diciembre-2010. Publicado en edición impresa.

“Habrá sesiones extraordinarias en el Senado por los ascensos” La Presidenta hará la convocatoria, pero no habilitará el tratamiento del presupuesto.

- Jueves 2-diciembre-2010. Comunicación del dicente por e-mail a: La Nación; Julio Saguier; José Claudio Escribano; Mariano Grondona; Joaquín Morales Solá.

-Martes 7-diciembre-2010. Editorial 1.

“Inadmisible criterio para ascensos”. Es aberrante e ilegal que los familiares de integrantes del gobierno militar no puedan ascender en la Fuerzas Armadas.

Desde una primera crónica del 19-noviembre-2010 sobre el rechazo del ascenso y pase a retiro por “Portación de apellido” a 10 calificados Jefes y Oficiales Superiores, recién el 7-diciembre-2010, o sea, 18 días después, en su Editorial cabeza hizo pública su formal declaración de indignación, ilegalidad y tropelía. A pocos días del egreso de la nueva Promoción de oficiales del Colegio Militar de la Nación. ¿Autenticidad…o excusa? Juzgue el lector.

Si esos 27 Generales tuvieran vergüenza, lo que deberían hacer es no asistir a la ceremonia de egreso de los nuevos Subtenientes. Así, por lo menos, los nuevos oficiales “tendrán el placer de ver establecido en sus cuerpos, una Institución que les garantiza no confundirse con los malvados y los perezosos” que, con intachables conductas y debidas capacidades, les “harán ver los más felices resultados, como la segura prosperidad de las armas de la Patria.”

Fuera de toda duda, esa suerte de “muerte Apocalíptica” de los 10 Jefes y Oficiales Superiores, no será tal. Antes o después serán restituidos, porque la Historia Argentina lleva incardinada la Historia del Ejército Argentino, y para el Ejército Argentino es dogma de fe su

Tríada Etica militar: «Patria - Honor -Deber»

Nota bene: Esta Carta Abierta será agregada al Expediente judicial Nº 15. 105/10 antes individuado. .

Destinatarios de esta Carta Abierta, por e-mail, entre otros:

- Autoridades eclesiásticas.

- Presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación: Dr. Ricardo Luis Lorenzetti, con petición de enterar a los señores Jueces: Dra. Carmen María Argibay, Dr.Carlos Santiago Fayt, Dra. Elena Inés Highton de Nolasco, Dr. Juan Carlos Maqueda, Dr. Enrique Santiago Petracchi y doctor Eugenio Raúl Zaffaroni; Procurador General de la Nación: Dr. Esteban Justo Antonio Righi; Defensor del Pueblo de la Nación, Dr. Anselmo Sella.

- Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional; Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires.

- ADEPA; La Nación; Clarín; Diario Perfil; Informador Público; Hoy Corrientes; Periodismo de Verdad.

- Julio Saguier; José Claudio Escribano; Mariano Grondona; Joaquín Morales Solá; Roberto Cachanosky; Nelson Castro; Carlos Manuel Acuña.

Buenos Aires, 12 de diciembre de 2010

Ing. Tomás Julián Persichini

www.tjpersichini.com.ar

El autor es ex Profesor Ordinario Titular, Consejero Académico Titular de Facultad Regional y Rector (con atribuciones de Consejo Académico Superior), de la Universidad Tecnológica Nacional. Analista histórico-político de la realidad nacional.