CAUSAS JUDICIALES POR “ASOCIACIÓN ILÍCITA” SON UN ARMA POLÍTICA DEL GOBIERNO

 

Por Emilio Nazar Kasbo

El Código Penal de la Argentina establece ciertos requisitos particulares para la comisión del delito de “Asociación ilícita”, y cualquier fiesta de cumpleaños puede caer en esa tipicidad. Esta falla legal está siendo aprovechada por el Gobierno para abrir denuncias que dejan a toda la población en “libertad condicional”.

¿“ASOCIACIÓN ILÍCITA”?

En efecto, una reunión compuesta por dos de las siguientes posibilidades, convierten a la reunión en “asociación ilícita”, y sólo falta que alguien denuncie la reunión como “peligrosa” para la vigencia de la Constitución Nacional, y por tanto delictiva: a) Estar integrada por diez o más individuos; b) Poseer una organización militar o de tipo militar; c) Tener estructura celular; d) Disponer de armas de guerra o explosivos de gran poder ofensivo; e) Operar en más de una de las jurisdicciones políticas del país; f) Estar compuesta por uno o más oficiales o suboficiales de las fuerzas armadas o de seguridad; g) Tener notorias conexiones con otras organizaciones similares existentes en el país o en el exterior; h) Recibir algún apoyo, ayuda o dirección de funcionarios públicos.

Veamos: una reunión de opositores donde se muestre una disidencia con las políticas del Gobierno Nacional, dada la identidad del Gobierno con la Constitución, conforma ya de por sí un peligro para la vigencia de la Constitución-Gobierno. Si a esa reunión participan diez o más personas, y entre ellos hay al menos una persona perteneciente a las Fuerzas Armadas o de Seguridad, aunque sea una fiesta de cumpleaños se convierte en una asociación ilícita.

A su vez, por ejemplo, un gremio opositor al gobierno tiene una estructura jerárquica, ya que tiene autoridades y subordinados (esto implica una “organización de tipo militar”), opera en más de una de las jurisdicciones del país, tiene notorias conexiones con otras organizaciones similares existentes en el país o en el exterior (por la misma naturaleza gremial), e incluso hay organismos públicos que les ofrecen algún apoyo, ayuda o dirección mediante los funcionarios públicos respectivos… ¿No es esto acaso una “asociación ilícita”? Y si se trata de una asociación de integrantes de las Fuerzas Armadas o de Seguridad, ¡con más razón aun!

“VIENEN POR TODO”

Ya lo dijo el  secretario general de la UATRE, Gerónimo “Momo” Venegas: “Vienen por todo el movimiento obrero". "Estamos todos en la mira. No vienen por uno o por otro: vienen por todo el movimiento obrero", denunció el titular del gremio de peones rurales tras recuperar su libertad.

Eduardo Duhalde tampoco está exento de espionaje, de que abran alguna causa por “complot”, o cosas semejantes. Lo mismo cada disidente del Gobierno o del sistema vigente actual.

Efectivamente, desde el Gobierno se están efectuando “escuchas telefónicas” a muchas personas comunes y personalidades, llegando a la intromisión en la vida privada de las personas por una intervención de la Secretaría de Inteligencia del Estado que es habilitada en causas judiciales abiertas a los efectos.

Opositores y afines son víctimas de semejante maniobra, que responde exclusivamente a una intencionalidad política de persecución de opositores, una práctica que no es nueva en la Historia del comunismo. Escuchas, testigos “de identidad reservada”, seguimientos de personas a los cuales les sacan fotos del frente de sus domicilios, les sacan fotos haciendo mandados, sacan fotos a las personas que ingresan o egresan de un domicilio, investigación a fondo de la condición patrimonial de la persona determinada, sumado a la apertura de causas judiciales que habilitan a espiar a los que públicamente se definen en una postura contraria al gobierno, sólo pueden describirse con una palabra: persecución.

¿COMPLOT?

Lo de la “mafia de los medicamentos” es sólo una excusa: no están buscando reprimir un delito. Hay expedientes que se abren artificiosamente y sin que nadie se entere, para el seguimiento de personas. Lo mismo sucede con las causas por “Derechos Humanos”, ya que estos organismos señalan personas a quienes se les realizan seguimientos.

Del mismo modo, hay en La Plata otra causa que también habilita a escuchas telefónicas a opositores, y esa causa es tan abierta que puede abarcar a cualquier persona que no muestre sumisión al Gobierno Nacional. Dicha causa es por “asociación ilícita”, y en particular por “complot”. Desde esa causa también se realizan seguimientos y escuchas telefónicas, aparecen “testigos de identidad reservada” y cosas semejantes que sólo reafirman lo dicho: se trata de una persecución de opositores disfrazada de causa judicial.

Un partido político en el actual esquema constitucional, tiene por finalidad el convertirse en gobierno, desplazando a las actuales autoridades. ¿Un partido político es un complot para desplazar al actual Gobierno?

El problema es que es muchísima gente, cada vez más, la que se opone a este régimen. ¿Acaso van a hacer seguimiento a Doña María, que cuando va a hacer mandados se queja de los precios y dice que el gobierno miente con la inflación?

CONTROL STALINISTA

El movimiento gremial debe ser desarticulado, ya que los ideólogos de este Gobierno buscan implementar el comunismo stalinista donde no existen derechos gremiales sino personas que dependen de un plan social del gobierno, sumidos todos en la miseria. Todo resabio de Militares y Fuerzas de Seguridad también debe ser desarticulado, en virtud de la misma ideología en el marco de un Gobierno que “idealistamente” dice que no hay “hipótesis de conflicto”, mientras las Islas Malvinas siguen usurpadas y el Mar Argentino es depredado impunemente, a la vez que los recursos minerales del país salen sin pagar prácticamente nada como canon.

Este es el plan de Gobierno: ciudadanos anarquizados y sin gremios ni seguridad, sumidos en la miseria frente a las autoridades del Estado que los dominan, para lo cual se hacen seguimientos y espionajes muy detallados de cada opositor (no importa si es grande o pequeño).

No importa si el opositor está en el sistema o se opone directamente al sistema: la consigna es perseguirlo.

Lindo presente tenemos.