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sábado, 26 de marzo de 2011

WILLIAMSON CITADO POR LA JUSTICIA ALEMANA, EN TANTO SUS DICHOS EN EL EXPEDIENTE PODRÍAN CONVERTIR AL REVISIONISMO EN UN LIBRO LEGAL

Joseph Ratzinger 1940 con uniforme nazi

Un nuevo proceso contra el obispo británico Richard Williamson tendrá lugar a partir del próximo mes de julio de 2011 en la ciudad de Ratisbona, en Alemania, según ha dado a conocer la Fiscalía. Williamson, a quien se le conoce por sus tesis revisionistas sobre la matanza de judíos durante el régimen nazi, está acusado en Alemania de incitación al odio racial. El juicio, inicialmente programado para noviembre de 2010, fue aplazado porque Williamson quiso cambiar de abogado.

REVISIONISMO Y ACUSACIONES

El revisionismo histórico aplicado a la Segunda Guerra Mundial, implica el sostenimiento científico de cada afirmación, desde una visión integral y sin seguir meras afirmaciones ideológicas intencionadas que buscan algún tipo de rédito. El revisionismo histórico tiene su contrapartida en el liberalismo histórico, en tanto que este último convierte en dogma una afirmación considerada “políticamente correcta”, aunque no responda a la verdad histórica.

Las acusaciones contra Williamson se centran en una entrevista realizada en Alemania por la televisión sueca en la que el obispo, de 71 años, puso en duda el número de víctimas del “Holocausto” y la existencia misma de las cámaras de gas: "Creo que las pruebas históricas hablan fuertemente en contra de que seis millones de judíos fueran gaseados intencionadamente en las cámaras de gas como estrategia alevosa de Adolf Hitler. (...) Creo que no hubo cámaras de gas". Según el obispo, las victimas judías del régimen nazi en Alemania no superarían las 200 o 300.000, lo cual implica el reconocimiento de un genocidio pero no de la magnitud atribuida sin respaldo científico por los medios de comunicación y por la historiografía mundial después de que Alemania perdió la II Guerra Mundial. El llamado “holocausto” además, sirvió para tapar los crímenes de guerra cometidos por los aliados, como las bombas atómicas arrojadas sobre las ciudades de Hiroshima y Nagasaki, las cuales eran además un blanco civil, no militar. 

Aunque la entrevista televisiva por la cual se acusa a Williamson no iba destinada al público alemán, fue realizada en Zaitzkofen, cerca de Ratisbona, donde está la sede de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X a la que pertenece Williamson, y por esta razón consideran que la justicia local es la que debe procesar al británico Williamson.

CAMBIAN REVISIONISMO POR DINERO

En Alemania, negar el Holocausto en la versión oficial que se difunde en todo el mundo, sobre todo en las películas cinematográficas, se considera un delito de incitación al odio racial y es perseguible hasta con seis años de reclusión. En abril de 2010 el tribunal de Ratisbona condenó a Williamson al pago de una multa de 12.000 euros, que la juez Karin Frahm rebajó a 10.000 euros.

Es decir, por unos 10 o 12 mil euros se puede decir que hay una trama de mentiras urdidas sobre el “holocausto”. Un costo algo oneroso para semejante afirmación, en tanto que si Williamson detallara toda la versión revisionista en un escrito judicial y luego la publicara como un libro, estaría obteniendo por dicha suma la habilitación legal para difundir el revisionismo histórico.

Dicho libro, al corresponder a textos tramitados en un proceso judicial, se convierte en legal. Es más, dicho escrito puede ser presentado como una mera manifestación del Obispo ante la Justicia alemana, aunque esta lo trate como procedente o como improcedente, formará parte del expediente. 

Tanto el obispo como la Fiscalía recurrieron esta decisión acerca de la aplicación de una multa… y convertir parte de un expediente en un libro, no puede ser considerado delito.

OBISPO CATÓLICO

Las controvertidas declaraciones, retransmitidas en Suecia a principios de 2009 tras el levantamiento por parte del Vaticano de la excomunión que pesaba, desde 1988, sobre el obispo británico y otros tres seguidores del Obispo francés Marcel Lefebvre, fundador de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X. Cabe destacar que el levantamiento de la excomunión por el Papa, implica el estado de plena comunión de los Obispos con la Iglesia Católica, y por tanto reciben ese trato aunque falte una regulación canónica para su situación. El levantamiento de la excomunión implica la aceptación de las acciones y de la postura sustentada por los Obispos como ortodoxia doctrinal. No es posible por tanto afirmar que son “obispos lefebvrianos”, u “obispos cismáticos” ni con “problemas disciplinarios” en la actualidad, desde que no pesa excomunión alguna sobre los mismos: son Obispos católicos.

A causa de la difusión de la entrevista en Alemania,  la canciller demócrata cretiana Angela Merkel dijo refiriéndose al Papa Benedicto XVI: "Si una decisión del Vaticano llega a causar la impresión de que el Holocausto puede ser negado, esta tiene que ser aclarada. Por parte del Papa y del Vaticano tiene que afirmarse muy claramente que no puede haber negación".

Sucede que Williamson reconoce un genocidio de aproximadamente 200 a 300 mil judíos durante el régimen nazi, y la situación por la cual el Vaticano ayudó a miles de judíos a salvar su vida y sus bienes, junto con la condena que el Magisterio de la Iglesia realizó a las desviaciones de dicho régimen. Williamson no niega la existencia de un genocidio, sino que adopta la postura científica del revisionismo histórico, por la cual es el Fiscal el que tendría que probar los extremos en discordia ante la Justicia en un pie de igualdad, y no valiéndose del artilugio de una presunción de derecho que no tiene correlato con la verdad histórica.

El pasado noviembre, la revista Der Spiegel denunció que Williamson ha escogido para dirigir su defensa a Wolfram Nahrath, notorio miembro de la extrema derecha alemana, afiliado al neonazi Partido Nacionaldemócrata (NPD) y último jefe de la prohibida organización juvenil ultraderechista Wiking Jugend (Juventudes Vikingas).

El genocidio cometido por los nazis contra los judíos no debe ser negado ni minimizado. Pero tampoco debe ser exagerado: ha de reconocerse la verdad histórica tal y como fueron los hechos que respalda la documentación y un sinnúmero de elementos que contribuyen a sustentar las afirmaciones sobre el mismo, en lo cual reside el método revisionista.

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