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viernes, 8 de abril de 2011

CARTA JESÚS NUESTRO DIOS: SEÑOR HEMOS LLAMADO MAL A LAS COSAS…

Herejes Apostatas y Modernistas_thumb[3]4

Señor Jesús,

Venimos delante de Ti este día, para pedirte perdón y para pedir tu dirección.

Sabemos que tu palabra dice;"maldición a aquellos que llaman "bien" lo que está mal y es eso lo que exactamente hemos hecho.

Hemos perdido el equilibrio espiritual y hemos cambiado nuestros valores.

Hemos explotado la pobreza y hemos llamado a eso "distribución de la riqueza".

Hemos recompensado la pereza y la hemos llamado "planes sociales".

Hemos matado a nuestros hijos, que aun no habían nacido y lo hemos llamado "la libre elección".

Hemos dejado que maten y roben y lo hemos llamado "derechos humanos".

Hemos sido negligentes al disciplinar a nuestros hijos y lo hemos llamado "desarrollar su autoestima".

Hemos sido corruptos y abusadores desde el poder, y hemos llamado a eso "política".

Hemos codiciado los bienes ajenos, y a eso lo hemos llamado "tener ambición".

Hemos contaminado las radios y los canales de televisión con muchas groserías y pornografía, y lo hemos llamado "libertad de expresión".

Hemos ridiculizado los valores establecidos desde hace mucho tiempo por nuestros ancestros, destruimos nuestras propias creencias, nos burlamos, y destruimos, y calumniamos a militares, policías, religiosos, y a todo aquel que piensa distinto, y lo hemos llamado "obsoleto y pasado".

Hemos llamado “Caridad” a la violación de los tres primeros Mandamientos, aceptando las blasfemias, jurando en falso, abandonando la transmisión de la Tradición, desviando las obligaciones litúrgicas

Hemos llamado “Amor” a la violación de la castidad, a perder la virginidad antes del matrimonio, al amancebamiento de sacerdotes y Obispos, a las relaciones homosexuales y a cuanta aberración fue condenada en los Evangelios

Hemos llamado “tolerancia” a las herejías y a la heterodoxia

Hemos llamado “nuestra Fe” al modernismo condenado por San Pío X

Hemos llamado “nueva evangelización” a la introducción de abusos litúrgicos, de sincretismo religioso y a la negación del principio de que fuera de la Iglesia Católica no hay salvación

Hemos llamado “Misa” a bailar en torno a la Eucaristía, hemos tomado la Eucaristía con nuestras sucias manos, hemos descreído de la transubstanciación, hemos protestantizado a la Iglesia desde dentro.

¡Oh, Dios! Mira en lo profundo del corazón de nuestro pueblo, recupera nuestra Fe y nuestra Patria,

¡Purifícanos y libarnos de nuestros pecados!

¡Amén!

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