Páginas

viernes, 29 de junio de 2012

LA POLÍTICA EN DOS DIMENSIONES




Por el Dr. Cosme Beccar Varela
Buenos Aires, 29 de Junio del año 2012 - 1113


Hay dos dimensiones de la política en esta etapa crucial de la historia de lo que fue la Argentina.

En una de ellas se mueven una cantidad de muñecos sin importancia pero que la prensa se encarga de convertir en personajes, que se pelean entre ellos, que van y vienen, que se juntan y se separan, que se critican entre sí sin que se sepa realmente por qué se pelean siendo que son todos más o menos iguales en su peronismo más o menos confeso y en su insignificancia moral e intelectual, personajes de cartón, deshonestos y mediocres, ineptos y descarados.

Las "noticias" de las aventuras imaginarias de estos enanos, sin embargo, llenan las páginas de los diarios y monopolizan las noticias de las radios y de la televisión y los "analistas" políticos, incluyendo los que posan de inteligentes pero que no son más que unos pedantes con publicidad, se dedican a desmenuzar los más mínimos gestos y las palabras más o menos cifradas que pronuncian, fingiendo que disciernen el grado de poder que tiene cada uno de estos actores de reparto en la aburrida tragi-comedia de la política aparente.

Figuran en este escenario, en primer lugar "Cristina la Bonachona", con sus diarias payasadas que serían totalmente intrascendentes sino fuera porque usurpa el cargo de Presidente de la Nación. Por esa razón nos humillan y nos avergüenzan en el extranjero sus malévolas idioteces, en las que apenas disimula su desprecio por los 40.000.000 de habitantes del país de los cuales se burla diciendo mentiras, lanzando al voleo datos falsos y haciendo comentarios jocosos que sólo hacen reír a sus adulones. Sin perjuicio de su notoria tilinguería, apenas un poco más inteligente que el "minus habens" de su ex-marido, los diarios nos quieren hacer creer que ella es la que manda y la que planea las políticas de esta tiranía.

La lista de los otros títeres es larga, pero los más nombrados en el libreto del sainete son Scioli, Moyano, G. Moreno, De Vido y algunos sindicalistas de cuyo nombre no me acuerdo, ni quiero acordarme. Estos individuos tienen en común que son peronistas, deshonestos y burros, aunque sean unos vivillos para hacer las pequeñas jugarretas que les permitieron llegar a los cargos que ocupan indebidamente y desde los cuales se enriquecen ininterrumpidamente. Pero lo cierto es que no interesan, ni realmente pesan, siendo como son meros mandaderos que representan un papel que podría representar cualquier atorrante con el primario más o menos aprobado. Por eso, si son substituidos, todo este tinglado infame seguiría exactamente igual o con poca diferencia.

Porque la verdadera política está en la otra dimensión, en aquella en que se planea la destrucción de lo que queda de la Argentina y su reemplazo por un Estado comunista. En esa dimensión actúan las "eminencias grises" que dirigen el movimiento de los figurones.  

Es obvio, para quien quiera verlo, tenga alguna perspicacia y sepa algo de Historia, que desde que Kirchner usurpó la presidencia en el 2003 se está poniendo en práctica un plan sistemático de cambios en el país, todos los cuales implican anular alguna posible resistencia, controlar la oposición, corromper la moral pública y privada, anular las garantías individuales, acumular poder, vaciar las instituciones constitucionales, masificar y sobornar a los sectores  más ignorantes del pueblo, atemorizar y empobrecer a la generalidad de la clase media favoreciendo en cambio a los sectores de esa misma clase que estén dispuestos a sumarse al "modelo", idiotizar a los más "conservadores" y estrechar vínculos con el bloque neo-comunista encabezado con por Rusia y China e integrado por los otros siete países de Iberoamérica gobernados por la izquierda, contando, abierta o encubiertamente, con todos los grupos de izquierda que hay en el país.

Nuestra suerte está ligada a la política de esta última dimensión en la cual tanto la Sra. Kirchner como Moyano juegan papeles subordinados, aunque importantes, pero no en la forma en que lo entienden los sesudos "analistas".

Desde este punto de vista hay que interpretar la supuesta oposición de Moyano contra el gobierno.  Basta un poco de atención para darse cuenta de que esa "oposición" tiene varios agujeros:

1) Moyano es peronista, o sea, coincide ideológicamente con esta tiranía. Los "peronistas románticos" (aunque parezca increíble, existen) dicen que esta tiranía no es peronista porque es de izquierda. Les pregunto, ¿acaso Perón no fue el introductor de la lucha de clases y del estatismo en la Argentina? ¿No son esos los principales postulados del "Manifiesto comunista" de Marx y Engels? Y los opositores católicos que luchan contra el aborto y el homonomio por ser contrarios a la doctrina de la Iglesia, no deberían olvidar que Perón quemó las iglesias más antiguas de Buenos Aires e implantó el divorcio vincular.

2) Durante los últimos nueve años Moyano fue el mimado del kirchnerismo. Hasta los sabihondos "analistas" políticos lo reconocen. ¿Cómo puede creerse que, de repente, por un "quítame allá ese impuesto a las ganancias" se habría convertido en un opositor confiable?

3) Moyano es tan corrupto como los funcionarios de la tiranía. En lo único que puede diferenciarse de los Kirchner es en no haber participado en la canallesca depredación fundada en la circular 1050 del Banco Central, que en cambio, fue la llave de la primera riqueza de los Kirchner.

4) Si se considera su discurso del 27 de Junio en la Plaza de Mayo se verá que no atacó la tiranía en aquello que tiene de más odiosa o sea, en su odio a la moral católica, la violación de las garantías individuales, el avasallamiento del Poder Judicial, el inicuo secuestro seguido de muerte de cientos de militares y su alianza con el comunismo. Mal podía hacerlo cuando en su acto de la Plaza de Mayo del 27 de Junio estaba el Partido Obrero (comunista violento) y otros grupos de izquierda.

Sin embargo, allí hubo también "caceroleros" ingenuos que creen que Moyano es la solución. Pero, peor aún, en algunos sectores de la alta clase se sostiene la misma opinión. Por ejemplo, un estanciero cuyo apellido hace sospechar que es muy rico, escribió y circuló en la red la siguiente frase:

"En mi opinión, creo que hay que apoyar a Moyano y hay que hacerlo explícito. No pienso en nada como él dice pensar, pero creo que hay que apoyarlo porque tiene razón y porque precipita el final de los acontecimientos."

La tontera de la gente no tiene límites. Estamos donde estamos y donde vamos a estar (mucho peor que ahora) no sólo por la prepotencia de la tiranía sino por la falta de inteligencia de las "clases cultas". El señor que escribió esa frase, probablemente, se irá del país cuando el régimen sincere su marxismo-leninismo, y le quite su estancia. Pero la mayoría de las víctimas de su idiotez y de la de sus amigos de la "café society", no podrá irse y el país caerá en el comunismo.

Cosme Beccar Varela 

e-mail: correo@labotellaalmar.com

1 comentario:

  1. Estimado Sr,

    Honestamente yo difiero de su pensamiento en una gran cantidad de puntos, incluyendo la relación peronismo-comunismo. Para leer a Marx hay que tener conocimientos de filosofía, saber qué es una tesis y una antítesis, qué es la dialéctica, y muchas otras cosas. No creo que alguien como Moyano tenga la capacidad de entenderlo. En mi opinión el relativismo es peor que el marxismo, porque ataca a Dios subrepticiamente y a muchos los toma desprevenidos. El marxismo tiene una idea de lo que es el "bien", pero está equivocada. En cambio esta gente no cree que exista ningún tipo de valor: dicen que nada es bueno y nada es malo - lo cual es mucho peor. El marxismo son pésimas leyes; pero "el ataque moderno" no es ninguna ley, es la a-ley. Creo que los peronistas se acercan mucho más a esta segunda postura, que al comunismo.

    ResponderEliminar

Los mensajes son moderados antes de su publicación. No se publican improperios. Escriba con respeto, aunque disienta, y será publicado y respondido su comentario. Modérese Usted mismo, y su aporte será publicado.