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miércoles, 20 de junio de 2012

UN SABOTAGE* INTENCIONALMENTE DAÑINO MAL LLAMADO "PARO" O "HUELGA"




Por el Dr. Cosme Beccar Varela
Buenos Aires, 19 de Junio del año 2012 - 1111

Van a hacer los paros "en las actividades que mayor malestar y repercusión social pudieran tener" ("La Nación", 19/6/2012, pag. 6). La "idea del gremio es que los paros sean sorpresivos de verdad. Si los anunciamos corremos doble riesgo. Uno, Trabajo puede dictar la conciliación obligatoria. Dos el paro pierde su efecto. Si decimos que vamos a parar la rama de recolección de residuos, las municipalidades pueden adelantar las tareas de limpieza y se minimiza el daño." Habrá un "conflicto permanente hasta desembocar en un paro nacional de 24 horas en las 15 ramas de la actividad (de transporte)" ("Clarín", 19/6/2012, pag. 12).

Estas son declaraciones o resúmenes de declaraciones o informaciones procedentes de los Moyano, uno Secretario de la CGT y el otro, jefe del sindicato de camioneros.

Desde que Menem suprimió el ferrocarril de larga distancia en una operación devastadora del interior del país que dañó gravemente a muchos pueblos, los camiones monopolizan el transporte y el sindicato que los reúne bajo la égida del estanciero Moyano (enriquecido en la dirección del sindicato sin que sus serviles afiliados digan "esta boca es mía"), pasó a tener un poder que ejerce arbitrariamente para parar el país con la intención de dañar, sea que logre sus abusivos reclamos o que no los logre.

Ahora, por ejemplo, reclama que aumenten un 30% los sueldos de los camioneros, que son de los más altos del mundo laboral, que les paguen a sus 200.000 afiliados una compensación de $4.000 y que les eximan del impuesto a las ganancias.

La intención de dañar está clara en las declaraciones y comentarios que transcribo más arriba. Harán paros sorpresivos en actividades vitales para impedir que los empleadores puedan actuar anticipadamente para minimizar el daño y elegirán "las actividades que mayor malestar y repercusión social pudieran tener".

Es decir, la intención es francamente subversiva del orden público y claramente perjudicial para la población indefensa. Esto puede implicar la comisión del delito penado por el art. 194 del Código Penal con prisión de 3 meses a 2 años.

La tiranía, mientras tanto, persigue  a la gente de bien, corrompe la moral, autoriza la corrupción de sus sicarios que ocupan cargos públicos, pero no hace respetar el orden público con lo cual los funcionarios responsables, desde la supuesta presidente de la Nación, sus ministros y demás encargados de hacer cumplir la ley, estarían incurriendo en el delito de violación de los deberes de los funcionarios públicos, penado por el art. 248 del mismo Código con prisión de 1 mes a 2 años e inhabilitación especial por el doble del tiempo.  Estos individuos corruptos e ineptos están haciendo lo mismo, en forma reiterada, desde hace nueve años, sin que haya ningún Fiscal que los acuse ni de éste ni de los demás delitos que pueden estar cometiendo, con lo cual los Fiscales se harían pasibles de la misma pena.

Hace rato que el país vive en el caos causado por piqueteros y sindicalistas, fomentado o tolerado dolosamente por las "autoridades". En el nro. 4051 de la sección "Correo del Lector", publiqué el 5 de Junio del año 2012 un informe de "Política Argentina de Diagnóstico Político", del Lic. Patricio Giusto en el que dice que desde el 1 de Enero del 2012 hasta el 31 de Mayo se han cometido 484 cortes de vías públicas, en un "crescendo" mes a mes que desde ya podemos anticipar que ha aumentado en Junio ya que, la semana pasada, la CTA, confederación gremial de izquierda, cortó 100 calles y rutas en un sólo día.

Esta escalada no puede ser considerada una "protesta social", como la define la tiranía totalmente resuelta a no impedirla y prohibiendo a la Policía preservar el orden. Es una verdadera "subversión social y política" que no afecta al gobierno sino a la población honesta que no tiene medio alguno de defenderse de este atropello, a no ser una rebelión ciudadana que, esa sí, sería rápidamente reprimida por la Policía y severamente penada por los jueces complacientes y prevaricadores.

El derecho de huelga es un derecho que debe usarse con la máxima prudencia y tratando de no dañar a la gente común, ajena al conflicto laboral en cuestión. Lo que hacen los sindicalistas en este país, a vista y conformidad del gobierno, es muy distinto: son verdaderos actos de sabotaje al bien común, con la expresa intención de dañar y de causar la mayor "repercusión social", o sea, la mayor molestia posible a los sufridos habitantes.

Además de los innumerables paros de los camioneros, hemos visto interminables huelgas en hospitales, aún de niños, durante las cuales los sufrimientos de los pobrecitos enfermos son aumentados cruelmente por sus los mismos que están encargados de curarlos y aliviarlos.  Hemos visto paros de trenes subterráneos por peleas sindicales internas, realizados a las horas en que estos miserables saben que perjudican más a la gente, o sea, a las horas en que van o vuelven de sus trabajos.

Esa clase de "actos de fuerza" laboral, especialmente en aquellos servicios que interesan directamente al público, son inmorales e ilegales. El Papa León XIII decía que "a este mal frecuente y grave se debe poner remedio públicamente, pues esta clase de huelgas perjudica no sólo a los patronos y a los mismos obreros, sino también al comercio y a los intereses del Estado; y como no escasean la violencia y los tumultos, con frecuencia pone en peligro la tranquilidad pública" (Enciclica "Rerum Novarum", nro. 29).

A los daños debe agregarse el perjuicio enorme que se le causa a la gente común.

Por ejemplo, en estos momentos los camioneros amenazan con cortar el transporte de combustibles. Eso impacta intolerablemente en la vida cotidiana de todos los habitantes porque les impide movilizarse, les obliga a peregrinar de una estación de servicio a otra para conseguir combustible y esperar en largas colas que les vendan un poco del imprescindible fluido. Y en el campo debe interrumpirse la siembra y la cosecha hasta que a Moyano se le dé la gana reanudar el servicio de transporte.

¡Moyano! Difícil imaginar un individuo más impresentable y menos confiable. Las sospechas sobre su enorme enriquecimiento existen desde hace mucho tiempo, sin embargo, el gorila sindical sigue sin ser investigado, consigue parar los intentos de investigarlo y goza de la inconcebible tolerancia de sus dirigidos.

Si él repartiera entre los camioneros el valor de las estancias que se dice que ha comprado a precios fabulosos, éstos no tendrían necesidad de hacer paros para aumentar sus sueldos. Uno sólo de esos campos, que según rumores habría sido comprado hace poco por $450.000.000, dividido entre los 200.000 camioneros, daría $2.250 para cada uno. ¿No habrá algún camionero que en vez de embromar a todo el mundo, se decidiera a pedirle explicaciones a Moyano?

Se hace correr la especie de que "Moyano está enfrentado con el gobierno". El único enfrentamiento que puede haber entre peronistas cuya dedicación a la política tiene por objetivo principal enriquecerse sin que les importe un bledo el pueblo con cuyo nombre se llenan hipócritamente la boca, es por el reparto del botín.  Pero en cuanto la secta neo-comunista que controla esta tiranía considere que eso perjudica sus planes, toda querella cesa y todos cooperan en la obra de destruir la Argentina tradicional y reemplazarla por un Estado marxista-leninista.

Los peronistas, por resentidos sociales, son afines al neo-comunismo y saben que sus fortunas mal habidas están a buen recaudo y pueden gozar siempre de ellas en el exterior o aún en el país si no obstaculicen los planes de la secta. ¿No les llama la atención la desaparición de Duhalde, que ahora es larga y completa?

En una situación de caos y de tiranía al mismo tiempo, como la que padece el país, es imposible que haya prosperidad ni bienestar general. Sólo lucran los ladrones, los de escritorio y los de mano armada.

Mientras tanto, avanza en paralelo y sin pausa la obra de demolición moral del país. Aborto; homonomio; educación sexual; salud reproductiva (que mejor se llamara "prostitución juvenil inducida"); derogación y reemplazo del Código Civil atentando gravemente contra la familia, la propiedad privada y la libertad de contratar; secuestros políticos con la cooperación de jueces prevaricadores, alianza con los países del bloque neo-comunista de América y del mundo; estatización de empresas; destrucción de la ganadería; confiscación del producido agrícola de los campos; presión impositiva insoportable que traerá la quiebra de muchos agricultores; imposibilidad de ahorro por la inaudita carga fiscal sobre los salarios (es de más del 50% y de las más altas del mundo, ver "La Nación" sección economía, pag. 1, del 19/6/2012), etc. etc. etc.

La reacción de los "cacerolazos" es la única señal de resistencia, pero es evidente que está deliberadamente desorganizada, infiltrada, desinformada y con consignas falsas, como esas que dicen: "No queremos que se vayan, queremos que nos escuchen" y "no hacemos política". No podría haberse encontrado una combinación más letal para engañar a los "indignados" argentinos, jóvenes en su mayoría, y para inutilizar sus esfuerzos.

Desde ya me ofrezco para asumir la dirección de esa resistencia, siempre y cuando me lo pidan jóvenes entusiastas que estén dispuestos a trabajar en serio y acompañarme integrando una Junta directiva, con algunos un poco mayores, valientes, generosos e inteligentes, que no estén comprometidos con ninguno de los partidos de la falsa oposición.

Cosme Beccar Varela
e-mail: correo@labotellaalmar.com

NOTA DE DIARIO PREGÓN DE LA PLATA:
* SABOTAGE: Sabotage (sabotaje en francés y en inglés) es la denominación original de varias obras artísticas (entre otras, es el nombre del sexto álbum de la banda británica de heavy metal satánico Black Sabbath). El Sabotaje (en inglés) es una forma de guerra política, que varía desde actos de un alto nivel técnico de golpe de mano que requieren una planificación detallada al uso de agentes especialmente entrenados, hasta innumerables actos simples que cualquier individuo común ciudadano saboteador puede realizar. El simple sabotaje se lleva a cabo de tal manera que implica un peligro mínimo de daño, detección y represalia para quien lo comete. Hay dos métodos principales de sabotaje: la destrucción física y el "Elemento humano". La destrucción física como método se explica por sí misma, sus objetivos son matizados, objetos a los que el saboteador tiene acceso normal y discreto en la vida cotidiana. El "factor humano" se basa en las oportunidades universales para tomar decisiones erróneas, de adoptar una actitud de no cooperación, y de inducir a otros a seguir su ejemplo. En un lugar de trabajo, el sabotaje es la retirada consciente de la eficiencia en general, dirigida a provocar algún cambio en las condiciones de trabajo. Quien se involucra en el sabotaje es un saboteador. Como regla general, los saboteadores tratan de ocultar sus identidades debido a las consecuencias de sus acciones. Según el DRAE, “SABOTAJE” es: “m. Destrucción o deterioro de productos o maquinaria e instalaciones como medio de lucha contra el poder establecido: planearon el sabotaje del tren de aterrizaje. Oposición u obstrucción disimulada: sus rivales sometieron a sabotaje todas sus campañas.”

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