MÁS DEL 50% VOTARÍA CONTRA EL OFICIALISMO, SEGÚN RECIENTE ENCUESTA

Según una encuesta de Poliarquía de abril de 2009, ante la pregunta “Si hoy hubiera elecciones para diputados, ¿usted votaría a un candidato que apoye al gobierno de Cristina Kirchner o a un candidato de la oposición a Cristina Kirchner?”, en diciembre de 2008 había un 52% de intención de voto directamente negativos al oficialismo, que para marzo de 2009 se ampliaron al 54%, reduciendo el margen a favor del 25% al 22% en ese mismo período. Sumados al mes de marzo de 2009 los votos contra el gobierno y los indecisos, llegan al 78%, con una intención de voto de sólo el 22% para el oficialismo.

En virtud de las “candidaturas testimoniales”, los funcionarios deberán dedicarse a la campaña política, y por tanto abandonarán la atención a la gestión de gobierno. No solamente sucedería esto con el gobernador bonaerense Daniel Scioli, sino por ejemplo con el ministro de Economía provincial Arlía, y todos aquellos que se sumen a lo “testimonial”. No hay tiempo para ejercer funciones políticas y a la vez hacer recorridos de campaña política, para lo cual debe abandonarse el cargo. Los funcionarios dejan de tomar decisiones, para dedicarse a las promesas comiciales.

Internamente, muchos funcionarios creen que la “estrategia electoral” de Néstor Kirchner puede empujar a todo el oficialismo a la más grande derrota, y un consenso en que tampoco debe él presentarse por la provincia de Buenos Aires, donde no tiene antecedentes de gestión, ni conoce el territorio. ¿No se presenta en Santa Cruz porque teme perder, o se presenta en Buenos Aires para tratar de “arrebatar” el “aparato” bonaerense de Duhalde?

La “nacionalización” de la campaña electoral obliga a los candidatos a quedar “atrapados” y condenados a recibir el voto castigo que se podría evitar si no se presentaran, y que además les “quemaría” su propia carrera política. Se plebiscita el matrimonio Kirchner, en el poder desde el año 2003, con el desgaste de seis años, lo cual envalentona a la oposición. Llegan incluso a calificarlo como “una especie de suicidio”.

Según un vocero gubernamental, refiriendo “off the record” acerca de su decisión de ponerse al frente de la lista de candidatos a diputado nacional que “es un cabezadura, cuanto peor le dan las encuestas, más se emperra en pelear”.

Buenos Aires

Todas las miradas apuntan al principal distrito del país porque representa el 37, 05% del padrón electoral, con 134 municipios y 10 millones de votantes. Conviene recordar que se eligen 35 diputados nacionales, 23 senadores provinciales y 46 diputados provinciales. El Frente para la Victoria debe renovar 21 bancas en el Congreso Nacional, 19 senadores bonaerenses y 24 diputados locales.

El oficialismo perderá su hegemonía en la Legislatura provincial y la mayoría en la Cámara de Diputados, mientras que los intendentes corren el riesgo de perder sus propias mayorías en los Concejos Deliberantes, al punto que en algunos casos podría acabar con la destitución del Intendente.

Según las últimas encuestas, el rechazo a la imagen del ex presidente es tan profunda que se ha consolidado también en segmentos sociales del segundo cordón del GBA, con un escenario muy negativo para el Frente para la Victoria.

En La Plata, Kirchner tiene una intención de voto del 10%, en tanto que la figura de Pablo Bruera supera ampliamente dicho porcentaje.

En San Isidro y Vicente López, por ejemplo, Kirchner no supera el 10% de la intención de voto. Hugo Curto (de Tres de Febrero) y Jesús Cariglino (de Malvinas Argentinas) afirmaron que no se presentarán en las elecciones, y Alberto Descalzo (de Ituzaingó) tiene prevista una derrota del FpV, ya que las encuestas dan por ganador allí a Francisco de Narváez.

Joaquín De la Torre (de San Miguel) es reacio a encabezar la lista de concejales, mientras Aldo Rico (avalado por el diputado montonero Carlos Kunkel, quien se ha separado del oficialismo) se presentará arrebatando numerosos votos tras haber ganado en la interna del PJ. También están en la misma situación Luis Acuña (Hurlingham), Humberto Zúccaro (Pilar) y Sandro Guzmán (Escobar)

Los intendentes más comprometidos con el kirchnerismo son Mario Ishi (José C Paz), Juan José Mussi (Berazategui), Fernando Amieiro (San Fernando), Fernando Espinoza (La Matanza), Andrés Arregui (Moreno), Baldomero Álvarez de Oliveira (Avellaneda), Francisco Gutiérrez (Quilmes), Darío Díaz Pérez (Lanús), Alejandro Granados (Ezeiza) y Jorge Rossi (Lomas de Zamora). Pero muchos de ellos han comenzado a dudar de la conveniencia de plebiscitarse electoralmente, puesto que una caída electoral anunciará una próxima derrota para el año 2011.

Los más decididos son Ishi, Pereyra, Mussi, Amieiro, Espinoza y Granados porque pueden ganar con comodidad.

Díaz Pérez (de Lanús), tiene una gestión cuestionada y en ese distrito está ganando De Narváez. Un sondeo indica que Gutiérrez en el municipio de Quilmes tiene casi un empate entre K (30%) y De Narváez (27%), mientras Sergio Villordo está militando activamente en las filas de Unión PRO.

En Mar del Plata, donde los K no gozan de popularidad, Gustavo Pulti es de un partido vecinal, y tiene buena relación con Scioli, y se ve comprometido a presentarse como candidato testimonial y convertir a su partido en una “colectora” más.

También tienen un 10% de popularidad los K en la ciudad de Cristian Breitenstein, en Bahía Blanca.

Capital

Gabriela Micheti renunció a la Vicejefatura para lanzar su candidatura a diputada nacional, mientras Elisa Carrió prefirió ir al tercer lugar para respaldar a Alfonso Prat Gay y al radical Ricardo Gil Lavedra. L

Según una encuesta de Artemio López, Micheti lidera las preferencias electorales con más del 30%, Prat Gay está segundo con 22%, lo sigue Aníbal Ibarra con un escaso 9%. Por el Frente para la Victoria, Carlos Heller y Rafael Bielsa no superan el 4%, pronosticándose una derrota histórica.

En el PRO lista de legisladores locales sería encabezada por el diputado nacional Federico Pinedo, trascendiendo que Pinedo sólo encabezaría esa nómina si le aseguran la vicepresidencia de la Legislatura.

El bloque oficialista esta actualmente integrado por 26 diputados, requiriendo de la oposición para aprobar leyes con mayoría especial. En junio se votan 11 bancas y el objetivo es lograr entre 3 y 4 escaños más.

Santa Fe

Carlos Reutemann decidió apostar con su propio neolema sin presencias kirchneristas para asegurarse una cómoda victoria, y muchos piensan que no hay ruptura con los Kirchner.

Reutemann por su lado y Agustín Rossi se presentará con el sello del Frente para la Victoria.

El escenario quedó muy desfavorable para el gobernador socialista Hermes Binner. En Santa Fe (8, 59% del padrón) se eligen 3 senadores y 9 diputados. Buscarán su reelección Reutemann y Roxana Latorre contra el socialista Rubén Giustiniani.

Reutemann tiene una intención de voto del 40% aproximadamente pero la eventual candidatura de Rossi apunta a otro público. Los que quieren votar a favor del campo lo harán por el ex corredor y aquellos que deseen defender a K elegirán a Rossi.