Autoconvocados comenzaron una campaña de cacerolazos en todo el país contra el homomonio, que se está multiplicando. El reclamo es por el veto de la Ley.
Un grupo de ciudadanos se autoconvocó en la Capital Federal ante el Congreso de la Nación para repudiar la ley aprobada que inventa el matrimonio homosexual.
Munidos de cacerolas y elementos que eran golpeados para producir ruido, los manifestantes defendieron los derechos de los heterosexuales y de los niños, que serán los perjudicados por la Ley.
EN SAN JUAN
En la Plaza 25 de Mayo de San Juan, por mensajes de texto, por Facebook, correos electrónicos y corriéndose la voz entre diversos grupos, los manifestantes se autoconvocaron en la Plaza produciendo un cacerolazo mientras daban vuelta al espacio público.
El repudio a la modificación del Código Civil Argentino que posibilita el matrimonio homosexual, salieron a la calle para defender la familia y que no sea enseñado a los niños que no se nace con un determinado sexo, sino que la sexualidad se construye.
La convocatoria comenzó al mediodía, y se expande por todo el país lentamente, porque muchos están siguiendo el ejemplo de quienes primero emprendieron la acción de protesta contra el Gobierno y los partidos políticos que aprobaron la ley.
Más de 350 personas salieron a la calle con cacerolas y otros utensilios para hacer ruido en señal de protesta a un proyecto que el kirchnerismo quiere imponer a rajatabla.
EN TUCUMÁN
Beatriz Rojkés y Sergio Mansilla fueron repudiados por sus votos, ya que el repudio es simultáneo tanto al matrimonio homosexual como a la unión civil.
Distintos sectores convocaron a un cacerolazo que se realizó en Plaza Independencia en la noche del jueves 15 de julio, en repudio "a la cobardía del senador Sergio Mansilla, que no se presentó a la sesión para tratar la ley de matrimonio gay, como lo había prometido.
Lo mismo respecto de la senadora Beatriz Rojkés, que votó en contra de la voluntad del pueblo tucumano al que ’representa’", según señalaron los organizadores.
OBISPO DE SAN JUAN
El Obispo de San Juan, Alfonso Delgado, declaró que la ley de matrimonio igualitario “carece de la necesaria legitimidad social”, y aseguró que “el pueblo” debe sacar cuentas, de quien está a favor o en contra de sus convicciones.
Delgado asumió que la lucha no se termina por el revés parlamentario. “El empeño por la dignidad de la persona, de la familia y de los niños más vulnerables no termina con esta votación del Senado. Empieza a expresarse de un modo muy ciudadano y a comunicarse de una manera nueva ante las agresiones políticas y las discriminaciones casi habituales”. A modo de advertencia, consideró que “este panorama está sirviendo para que el pueblo empiece sacar cuentas: qué legisladores y gobernantes están a favor de sus convicciones y quiénes están en contra”.
“La norma legal aprobada carece de la necesaria legitimidad social porque desconoce la fuerte expresión del federalismo argentino y el amplio consenso social observado en el país y verificado en las Audiencias Públicas. Se trata de un daño grave al bien social. ¿Es este el “regalo” que unos cuantos legisladores y gobernantes hacen al pueblo argentino, en estos Bicentenarios de la Patria?”, se preguntó el religioso.
Negó la discriminación hacia la comunidad homosexual, al expresar que “un sector importante del oficialismo y quienes van detrás, han legislado unos derechos y unos beneficios para una minoría que ha sido respetada y no ha sido discriminada por nadie”, e interpretó que la ley “se ha dictado en contra de los derechos de la mayoría del pueblo argentino y de los niños más vulnerables”.
Insistió en lo “diferente” de unas personas y otras según su elección sexual: “Todos somos iguales ante la ley en las mismas circunstancias de la vida. Pero la diversidad que se proclama genera derechos y beneficios diferentes”.
Apeló a que “los argentinos saben muy bien que la familia surge del matrimonio entre una mujer y un hombre, que produce nueva vida y se responsabiliza de esa vida. No es igual que otros tipos de uniones de personas”.
Delgado aclaró que la ley es un ataque hacia los derechos de los más chicos. ”Los legisladores que han aprobado la ley tampoco se han detenido a pensar en las personas más vulnerables –los niños huérfanos–, que así se convierten en “objeto” de afecto en vez de ser “sujeto” de amor y calidez de una familia con padre y madre. Esto es duro decirlo, pero esta ley se ha “perpetrado” en un país donde las leyes priorizan los derechos de los niños por encima de cualquier otro derecho, por más legítimo que sea”, insistió.
EN SALTA LLEGAMOS LOS 100 Y MAS ALLA DE LA NIEVE Y LAS BAJAS TEMPERATURAS TB NOS HICIMOS PRESENTE!! VAN A HABER MAS Y CON ESTO LOS SENADORES VAN A DARSE CUENTA QUE NO TODA LA POBLACIÓN ESTUVO NI ESTA DE ACUERDO CON LA APROBACIÓN DE ESTA LEY!!!!
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