La justicia federal de La Rioja ordenó la detención del ex jefe del Tercer Cuerpo del Ejército, Luciano Benjamín Menéndez, en la investigación por el supuesto crimen del ex obispo Enrique Angelelli, quien murió en un accidente de tránsito.
El nuevo arresto de Menéndez, quien cumple prisión domiciliaria en Tucumán por otros delitos de lesa humanidad, fue dispuesto por el juez federal de La Rioja, Daniel Herrera Piedrabuena, quien viajó a la capital tucumana para indagar al ex militar.
Fuentes judiciales dijeron que Menéndez negó su participación en las hipótesis de alternativas de la muerte de Angelelli, tras lo cual el juez lo imputó por su aparente vinculación con el homicidio del ex obispo riojano perpetrado durante la dictadura.
Angelelli murió en un accidente de tránsito en la ruta, mientras viajaba con un acompañante que sobrevivió al accidente. El juez imputó a Menéndez de de homicidio, y por tal motivo ordenó su arresto.
El magistrado viajó junto a su secretario y la fiscal Marta Kunat y la defensora oficial, Roxana Roqué, para indagar a Menéndez en Tucumán dado que los problemas de salud del militar y otro juicio que afronta en esa provincia imposibilitaron su traslado.
El estado de salud de Menéndez también llevó a la justicia tucumana a autorizar que siga los debates de los juicios en su contra por videoconferencia desde el domicilio donde cumple arresto.
En la causa que investiga el homicidio de Angelelli, el juez federal riojano tiene previsto indagar en breve al ex presidente de facto Jorge Rafael Videla, quien cumple arresto en Buenos Aires, por el accidente de tránsito referido.
Videla, de 85 años, fue sometido recientemente a una operación.
Dos semanas atrás, la justicia federal de La Rioja ordenó la detención del ex vicecomodoro Fernando Estrella por su vinculación con el hipotético asesinato del ex obispo Enrique Angelelli, ocurrido el 4 de agosto de 1976.
Estrella, quien cumplía arresto domiciliario en Córdoba por una causa por delitos de lesa humanidad, actuaba como segundo jefe durante el Gobierno Militar en la base aérea de Chamical, desde donde hipotéticamente se movilizó una comisión que secuestró, torturó y asesinó a los sacerdotes Carlos de Dios Murias y Gabriel Longueville días antes del accidente en el que Angelelli murió.
Herrera Piedrabuena ordenó detener a Estrella, de 78 años, y alojarlo en el Servicio Penitenciario Provincial además de trabar embargo sobre sus bienes por un millón de pesos para afrontar los costos del proceso.
Enrique Angelelli fue un intelectual marxista, junto con Hessayne, Jaime de Nevares, Novak y Laguna, que compartían el movimiento de sacerdotes tercermundistas, curas obreros y la incipiente teología de la liberación, todo ello condenado por el Magisterio de la Iglesia. Angelelli incluso hacía apología de la violencia y de la lucha armada, a cuyos efectos había solicitado a un Capellán militar que utilizara su posición para facilitar armas “a los muchachos” (montoneros) para cometer los actos de terrorismo que asolaron al país durante la década de 1970.
El Obispo Enrique Angelelli pretendió una escisión en la Iglesia, según la cual consideraba la existencia de “dos Iglesias”: la “Preconciliar” y la “postconciliar”, siendo esta última de orientación marxista-socialista-comunista revolucionaria y de índole materialista y humana, que incluso podía acudir a la violencia en pos de la ideología de la lucha de clases, despojada de Verdad y Trascendencia hacia el único Dios que es Trinitario. En su momento, Angelelli fue echado de Anillaco por los feligreses, debido a sus herejías y posturas que no eran teológicas, sino políticas. Por ello, ni por su vida ni por su muerte, ninguno de los que han compartido estas herejías pueden tener abierta una causa de canonización, puesto que sería canonizar a militantes marxistas materialistas, contrarios al Magisterio de la Iglesia, y sería tanto como canonizar a Marx, al Che Guevara o al mismo Lutero (quien también, al igual que estos Obispos y sacerdotes heréticos, pretendió la desjerarquización de la Iglesia).
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