San Nicolás de Bari es el verdadero Obispo que distribuia regalos a los niños de su diócesis, pero su regalo más importante nunca fue material, sino la Palabra de Dios y el mensaje del Evangelio distribuidos como lo que siempre han sido: el más importante regalo de Dios.
Papá Noel es un impostor inventado,| que también recibe el nombre de Santa Claus, y solamente sirve para el marketing.
Caminando por las calles, San Nicolás de Bari, se dio cuenta que entre los regalos materiales que llevaba había un celular. Justo cruzaba la calle el impostor Papá Noel, y San Nicolás no dudó: tomó el teléfono y llamó a la Policía al 911.
Inmediatamente apareció el patrullero, y el Agente del Orden detuvo a Papá Noel para encarcelarlo por haber comprobado in fraganti la comisión del delito: paganizar y convertir en materialista el más importante regalo que San Nicolás de Bari lleva a todos los que reciben obsequios.
El policía agradeció al Santo su denuncia, y llevó a Santa Claus a ser juzgado por impostor modernista.
Así, fue restablecido el orden, y San Nicolás siguió predicando el Evangelio en la actualidad... porque si no lo predican los curas y Obispos actuales, se levantarán los santos de sus tumbas para hacer la prédica, tal como sucedió en este caso.