Estimados camaradas:
Les remito esta carta
que junto con mi Sra esposa le enviamos a la representante legal del colegio “La
Asunción”, de nuestra ciudad; a los efectos de que la misma sea publicada en el
sito web de Fuerza Patriótica, ya que fuimos testigo (mi esposa y yo) de lo que
está ocurriendo en dicho colegio, en donde se dictan “talleres de formación”, y
se abordan temas como el de "diversidad sexual" de la maneras más
secular posible.
Les comento que
hasta ahora no tuvimos una respuesta formal por parte de la representante
legal, más que solo una sintética charla "al paso" en la que la misma
me comentó sobre la postura "aperturista" del colegio.
Pues bien camaradas, es
evidente que el enemigo está en nuestras narices, por lo tanto como
nacionalistas católicos no podemos estar con los brazos cruzados, tenemos que
defender sin desmayos nuestra cultura original, nuestra religión y nuestros
hogares de los embates de marxistas, liberales y progresistas. Por eso cerremos
filas y movámonos de una vez!!!
Enrique Marañon (h)
A continuación la carta
de nuestro camarada
Santiago del Estero, 30
de Septiembre del 2013.
A la Señora
Representante Legal del
Colegio La Asunción
HH Dominicas del Ssmo. Nombre
de Jesús
Ana NATERO
“Donde haya
Error, pongamos Verdad”.
De nuestra mayor
consideración:
Enrique Fernando
Marañón y Verónica de Fátima Vega Marañón, padres de un alumno concurrente al
Nivel Inicial de esa Institución Educativa, nos dirigimos
a Usted y por su intermedio, a quien corresponda, con el fin de comunicar
nuestra disconformidad por el carácter equívoco y contrario a los principios de La
Iglesia Católica, por los temas abordados en el Taller: “Educación Sexual”,
durante el desarrollo de la 2ª Jornada Nacional “Escuela – Familia –
Comunidad”, llevada a cabo el día 20 de Septiembre próximo pasado, a los fines
de que se adopten las medidas que sean necesarias.
Nuestra posición se
fundamenta principalmente en los contenidos del Catecismo de la Iglesia
Católica Apostólica Romana, que exige la preservación del Orden Natural
propio del Hombre y que corresponde al orden establecido por Dios, quienes como
criaturas suyas debemos respetar y defender. Por lo desarrollado en el
mencionado Taller, los conceptos vertidos van a contrapunto y en plena
oposición al concepto de Orden Natural, pretendiendo igualar como moralmente
bueno y aceptable la Homosexualidad con la Heterosexualidad,
respaldando dicha afirmación con las siguientes expresiones erróneas plasmadas
en el material informativo entregado a los padres y alumnos:
“Que la homosexualidad
es una expresión de amor, traducido en una atracción sexual, física y afectiva
de dos personas del mismo sexo”.
El Catecismo de La
Iglesia Católica (compendio aprobado por la Conferencia Episcopal Argentina)
indica claramente en los siguientes apartados:
1- 487-
“Dios ha creado al hombre como varón y mujer, con igual dignidad personal, y ha
inscripto en él la vocación del amor y de la comunión. Corresponde a cada uno aceptar
la propia identidad sexual, reconociendo la importancia de la misma para
toda la persona, su especificidad y complementariedad”.
2- 488- “La
castidad es la positiva integración de la sexualidad en la persona. La castidad
es una virtud moral, un don de Dios, una gracia y un fruto del espíritu”.
3- 492-
“Son pecados contrarios a la castidad (…): el adulterio, la masturbación, la
fornicación, la pornografía, la prostitución el estupro y los actos
homosexuales. Estos pecados son expresión del vicio de la
lujuria”
“Que la homosexualidad
es una manera de vivir la sexualidad por nuestros hijos, donde los padres no
debemos sentir que hicimos “algo mal” o “sentir culpa alguna”.
El apartado 460 indica
que: “Los padres, partícipes de la paternidad divina, son los primeros
responsables de la educación de sus hijos y los primeros anunciadores de la
Fe cristiana”. También en el 461:“Los padres educan a sus
hijos en la Fe cristina principalmente con el ejemplo, la oración, la
catequesis familiar y la participación en la vida de la iglesia.”
“Que la homosexualidad
es una demostración de cariño y confianza y un pedido de apoyo, respeto y
comprensión. Aunque nos lleve un tiempo aceptarlo, es bueno para todos (padres
e hijos)”.
Apoyándonos en la
Sagrada Escritura que presenta a los actos homosexuales como
depravaciones graves (cf Gn 19, 1-29; Rm 1, 24-27; 1 Co 6, 10; 1 Tm 1, 10), la
Tradición de La Iglesia Católica ha declarado siempre que; “los
actos homosexuales son intrínsecamente desordenados” (Congregación para la
Doctrina de la Fe, Decl. Persona humana, 8), son contrarios a la ley
natural, cierran el acto sexual al don de la vida y no proceden de una
verdadera complementariedad afectiva y sexual. Por lo tanto, no pueden
recibir aprobación en ningún caso.
“Que el mal
llamado “matrimonio” igualitario le otorga a las personas homosexuales los
mismos derechos que a las heterosexuales: casarse y adoptar hijos e hijas”.
En concordancia con lo
antes expuesto, pretender llamar la unión de dos personas de un mismo sexo como
unión matrimonial y por lo consiguiente permitirles la adopción de hijos o la
manipulación genética para la obtención de los mismos, es algo aberrante e
irracional, nada más alejado de toda auténtica Doctrina Cristiana, que esta
afirmación.
Cabe aclarar que rechazamos
rotundamente toda forma de discriminación ya sea por raza, religión o sexo,
pero la Verdad en Cristo, nos obliga como cristianos comprometidos a
manifestarnos plenamente en la defensa de nuestros valores morales que se ven
avasallados día a día y sistemáticamente.
Por lo tanto sugerimos
que la institución que Ud. Representa, se abstenga en suministrar todo
material, escrito o audiovisual marcadamente opuesto a la Doctrina de la
Iglesia Católica, o bien que los mencionados contenidos sean tratados
previamente con el asesoramiento espiritual de un sacerdote y de un profesional
de la Salud.
Sin otro particular, y
poniéndonos a vuestra entera disposición, saludos a Usted atentamente.