Por Alejandro Pérez Unzner
Soja/CBOT, a 475:
Es para “Usté”, que la mirá por tevé
En horas durante las cuales se insiste en la creación de un núcleo-eje-centro (táchese lo que no corresponda) de poder regional (y lo de “eje” despierta reminiscencias…), el núcleo-eje-centro de la polémica que viene conmoviendo a la Argentina desde marzo, esto es el precio de la soja y su tajada fiscal consecuente, muestra cierto deterioro, comparable al de los números de una administración que -parece- halla crédito sólo desde inversores venezolanos, que con tal de escapar a las trabas invierten en bonos argentinos, y “aire” desde grupos económicos locales que compran partes de compañías de servicios públicos cuyas tarifas se renegocian actualmente al más alto nivel.
“Liquidación de temporada” (estival en este caso) en Chicago, en un lunes que tal vez aparentaba proclive a las bajas aunque no se esperaba tanto. En cifras, u$s/t 25,70 abajo el poroto (límite de baja, “tarifa” del día), y encima con ingredientes extra-mercado también negativos. Algunos operadores dijeron que “fue una rueda con todo a favor de la baja, desde el crudo que se cae y el tiempo jugando a favor del cultivo en EE.UU., hasta la menor presencia demandante del sector de consumo interno” de ese país.
Sobre el aceite de soja, que cayó 55,10 u$s/t, hay que seguir lo de la palma en el SE asiático y su mayor stock, presionando a la baja, y lo de China, que si libera stocks estatales de aceite sumaría otro elemento a la baja, pues algunas importaciones caerían tanto como los precios internos del producto. La harina de soja se plegó a la movida y cedió 22,05 dólares por tonelada, en CBOT.
Atención, porque en lo técnico (otro factor bajista en la apertura semanal y antes de que USDA diera el estado del cultivo) se ven indicios de “juegos” alrededor de la barrera psicológica de los 13 u$s/bushel, y de hecho ayer las tres primeras posiciones negociadas rompieron -para abajo- esa barrera.
En una palabra, cuán lejos quedan aquellas palabras oficiales sobre que la soja iba a llegar a los 600 dólares y seguiría trepando: ahora, la Noviembre en CBOT cotiza al equivalente de 475,83 u$s/t y hay quien sigue mirando en la pantalla curvas que, asintóticamente, dibujan esos 600 como premio ideal para alimentar el arcón de los tesoros en disputa…
Mientras el mercado esperaba 2 puntos porcentuales de mejora en la mejor franja de condición de la soja estadounidense, USDA dio +1 (al 63%, contra 56 en 2007); los alcistas se van a agarrar de este dato, en la medida en que los dejen. Floración y formación de vainas avanzaron rápido la semana pasada, si bien la primera está 10 puntos debajo de lo normal y la segunda muestra un progreso 21 puntos-% más lento que la media 2003/7.
El maíz se mantuvo, como era de esperar, tras seis semanas de mejoras, y muestra una polinización veloz, producto del buen tiempo imperante tras las inundaciones de junio (trepó 24% en la semana y quedó a solo 8% del promedio de los últimos años), a la vez que la formación de granos va por el 17%, un 15% más lenta que lo normal. Es decir, soja y maíz se frenan a la hora de definir la base de los rindes, y esto -por ahora- no es un detalle menor.
La cosecha de los trigos de invierno avanzó al 86% (79, previo), con demoras contra el 93% del año pasado y el 92% del promedio quinquenal. Los de primavera exhiben una trilla del 6%, contra 23% hace un año, y su calidad sigue cayendo (13 puntos debajo de la registrada en 2007)
El mercado nocturno muestra a la soja bajando otros 12,5 dólares, al maíz cayendo 5,10 y al trigo -3,30 u$s/t.
Copia inmediata.
La tendencia externa no se hizo esperar en cuanto a eco a nivel nacional, ni tampoco la retirada de los vendedores. Los 860 pesos por soja (60 menos que el viernes) se reflejaron en la ausencia de oferta; lo mismo ocurrió en maíz, que perforó el piso de los 400 pesos (390) bajando 30. Un maíz que bajó 11 dólares en Chicago, a lo más bajo en cuatro meses. El trigo bajó 50 $/t, desinflando el entusiasmo del viernes 1: se ofrecían 550: nadie respondió y el cereal cayó -13 u$s en CBOT.
MATBA cedió 10 u$s/t en soja (a 305/Nov. y a 282,20/Mayo), 6 en maíz (a 145/Sep.) y 2,50 en trigo (a 194,50/Enero), ajustando también en baja el girasol (-5, a 315 Marzo). A su vez, ROFEX cayó 12 u$s/t en su Índice Soja Rosario, a 299,50/Nov., 3,50 en promedio el maíz a 152,50/Dic. y 5 en trigo (a 189,50/Enero).
En lo gremial, no se ha confirmado el encuentro SAGPyA-Comisión de Enlace, siguen las tratativas para ajustar las tarifas de fletes viales y las destinadas a encuadrar en la actualidad salarial a los trabajadores de recibo de granos en las terminales.
Comisión senatorial pro-investigación de la evasión en exportaciones.
MATBA cedió 10 u$s/t en soja (a 305/Nov. y a 282,20/Mayo), 6 en maíz (a 145/Sep.) y 2,50 en trigo (a 194,50/Enero), ajustando también en baja el girasol (-5, a 315 Marzo). A su vez, ROFEX cayó 12 u$s/t en su Índice Soja Rosario, a 299,50/Nov., 3,50 en promedio el maíz a 152,50/Dic. y 5 en trigo (a 189,50/Enero).
En lo gremial, no se ha confirmado el encuentro SAGPyA-Comisión de Enlace, siguen las tratativas para ajustar las tarifas de fletes viales y las destinadas a encuadrar en la actualidad salarial a los trabajadores de recibo de granos en las terminales.
Comisión senatorial pro-investigación de la evasión en exportaciones.
La Comisión Investigadora que se pretende crear en el Senado tendría seis miembros, probablemente cuatro senadores oficialistas y dos opositores, y la iniciativa oficialista le quiere atribuir facultades para "solicitar todo tipo de información, escrita u oral, relacionada con los hechos", requerir testimonios "bajo juramento de decir verdad", exigir la exhibición de cualquier clase de prueba "pudiendo revisar y secuestrar libros de comercio", "practicar inspecciones" y hasta "requerir el auxilio de la fuerza pública". Si se quiere que algo no avance, entonces fórmese una comisión para ocuparse del tema. ¿De quién habrá sido esta idea?
Temores y dudas. Mientras el ambiente granario considera que sólo podrán pagar al declarar exportaciones los operadores que tienen resto, los de siempre… léase, los grandes exportadores, si se plasma en los hechos la idea oficial de modificar (otra vez) el régimen de declaración de ventas externas, el medio empresarial en general transmitió una sensación de incertidumbre y temor a la delegación brasileña, con motivo de su visita a la par de la del presidente del vecino país.
De hecho, las declaraciones de brasileños a medios locales fueron casi unánimes en su postura: 1-temor por la inflación argentina; 2-inseguridad en anunciar inversiones porque aun los mismos empresarios argentinos temen aparecer como opositores y callan sus diferencias en materia impositiva, ya que no tolerarían otro “impuestazo”; 3-preocupación por las diferencias Gobierno-empresarios, sobre todo del agro, y su repercusión en rubros alimentarios y en acuerdos bilaterales; y 4-mantenimiento de las acciones de unificación en la elaboración de “alimentos con valor agregado” para atender los mercados asiáticos, europeos y el estadounidense.
Directivos de la Asociación Brasileña de la Industria Alimentaria buscan una alianza con la COPAL local, que permita exportar con valor agregado y mayor volumen al mundo, mostrando una capacidad sectorial muy fuerte para seguir invirtiendo en el mercado argentino, con respaldo de la banca estatal y con el fin de no dejar caer a la Argentina en cuanto a la producción de alimentos.
Temores y dudas. Mientras el ambiente granario considera que sólo podrán pagar al declarar exportaciones los operadores que tienen resto, los de siempre… léase, los grandes exportadores, si se plasma en los hechos la idea oficial de modificar (otra vez) el régimen de declaración de ventas externas, el medio empresarial en general transmitió una sensación de incertidumbre y temor a la delegación brasileña, con motivo de su visita a la par de la del presidente del vecino país.
De hecho, las declaraciones de brasileños a medios locales fueron casi unánimes en su postura: 1-temor por la inflación argentina; 2-inseguridad en anunciar inversiones porque aun los mismos empresarios argentinos temen aparecer como opositores y callan sus diferencias en materia impositiva, ya que no tolerarían otro “impuestazo”; 3-preocupación por las diferencias Gobierno-empresarios, sobre todo del agro, y su repercusión en rubros alimentarios y en acuerdos bilaterales; y 4-mantenimiento de las acciones de unificación en la elaboración de “alimentos con valor agregado” para atender los mercados asiáticos, europeos y el estadounidense.
Directivos de la Asociación Brasileña de la Industria Alimentaria buscan una alianza con la COPAL local, que permita exportar con valor agregado y mayor volumen al mundo, mostrando una capacidad sectorial muy fuerte para seguir invirtiendo en el mercado argentino, con respaldo de la banca estatal y con el fin de no dejar caer a la Argentina en cuanto a la producción de alimentos.
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