La Federación Agraria emitió un comunicado en que describe la situación actual agropecuaria, a la vez que propone medidas para su solución. Transcribimos a continuación el texto del comunicado:
Sequía: el Estado debe ser socio en las pérdidas y no sólo en las ganancias
Ante la crisis, la prioridad debe ser la deuda interna, y la continuidad del aparato productivo nacional
Los productores agropecuarios enfrentamos en el último tiempo una situación angustiante, que ya se está tornando dramática. Las imágenes se repiten por estos días en los medios de comunicación: animales muertos, plantaciones perdidas o en constante deterioro, y paisajes áridos que se han trasladado al corazón de la Pampa Húmeda. Lo que está en riesgo es mucho más que una cosecha: hay desolación e incertidumbre. Se ha perdido la confianza y se resiente a cada momento el aparato productivo. Está interrumpida la cadena de pagos, y la agroindustria está paralizada hace meses. Así, obreros y chacareros que fuimos capaces de juntarnos en una misma protesta, visualizamos que pueden repetirse escenarios similares, para evitar las consecuencias de la recesión y el crecimiento de la desocupación.
El país vive una situación extraordinaria, y por eso hacen falta medidas de extraordinario impacto. Y en este contexto, tenemos que tener la grandeza de cambiar las prioridades de la agenda pública para este año: el pago de los vencimientos externos no puede ser un objetivo central, mientras esté en crisis el aparato productivo nacional, en serio riesgo muchos empleos, o el capital de trabajo de las pymes del campo y la ciudad. No puede privilegiarse al Club de París cuando sigue sin estar resuelta la deuda interna, con indigencia y pobreza para millones de argentinos.
Es por esto que, con una alta dosis de responsabilidad, desde Federación Agraria llamamos a un cambio de actitud en el gobierno nacional. Es tiempo de dialogar sin resentimientos, procurando la concertación. En este marco, se deben implementar acciones firmes, de carácter extraordinario, que estimulen no sólo al consumo sino también a la inversión, con la fuerza y la participación de todos los actores sociales, económicos y políticos. En lo que atañe a nuestro sector, solicitamos:
1 - Declaración de emergencia y/o desastre agropecuario a nivel nacional de todas las regiones afectadas por factores climáticos adversos con el correspondiente decreto de exención impositiva, y reprogramación de créditos vencidos y a vencer, hasta que el productor pueda salir de las consecuencias económicas del desastre o la emergencia.
2 - Aportes no reintegrables de $200 por vaca hasta los primeros 500 vientres, como ayuda directa.
Asistencia financiera a los agricultores para recomponer su capital de trabajo, por la vía de créditos a tasa subsidiada. Aporte directo para pequeños y medianos productores, de $500 por hectárea.
3 - Segmentar alícuotas de los derechos de exportación privilegiando la situación de los pequeños y medianos productores, que ya no soportan el pago de retenciones.
4 - Tratamiento extraordinario de exportaciones ganaderas. Apertura y normalización de las exportaciones lecheras. Precio mínimo sostén.
5 – Análisis en particular de la diversidad de situación de las economías regionales. Entre otros aspectos, posibilitar la eliminación de los derechos de exportación de los productos para los pequeños y medianos productores de estas regiones.
Los que conocemos el campo sabemos por nuestra experiencia que el drama vivido en esta campaña tendrá las consecuencias sociales y económicas que se padecerán por los próximos cuatro años. Por eso debemos actuar a tiempo, y hacer un esfuerzo especial en evitar que se profundicen los daños y garantizar la paz social de los argentinos. El gobierno nacional tiene en sus manos la posibilidad de dialogar, escuchar y atender las propuestas de todos los sectores. Son tiempos difíciles, se deben evitar nuevos desencuentros y frustraciones.
Rosario, 26 de enero de 2009
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