Con motivo de la salida de Santiago Montoya del gobierno bonaerense, Rafael Perelmiter declaró al diario La Nación: "Vamos a ser duros con los más duros". Además de contador personal de la familia, Perelmiter forma parte del círculo de máxima confianza de Daniel Scioli.
En el segundo semestre de 2009 Buenos Aires no estará en condiciones de satisfacer nuevos reclamos salariales y que esto podría desembocar en un escenario de parálisis y conflictividad, según el referido medio.
A fines de 2007, el gobernador recibió una caja con un déficit previsto de unos $ 2000 millones, mientras que actualmente todos los pronósticos ubican un rojo de entre 10.000 y 12.000 millones.
La provincia tiene como meta presupuestaria incrementar su recaudación en el presente año en un 29%. Esto implica recaudar impuestos provinciales por $ 22.000 millones.
La recaudación bonaerense subió en marzo último un 30 por ciento respecto de marzo de 2008. Montoya adjudicó ese resultado a su plan "anticrisis". Pero, como contrapartida, en el acumulado de 2009 los tributos crecieron sólo un 21,6%, 8 puntos por debajo de lo estimado.
Los 1543 millones de pesos recaudados el mes de marzo pasado, corroboran una tendencia descendente de los ingresos por impuestos propios si se los compara con los 1654 millones de pesos ingresados en febrero y los 1751 millones registrados en enero último. Por ello, la Provincia de Buenos Aires depende de la Nación para poder cumplir con sus compromisos económicos, y de allí surge una dependencia política, ante un panorama de ingobernabilidad.
La candidatura de Daniel Scioli, puede ser la vía de escape de un cargo altamente comprometido, abandonando el gobierno antes de tiempo.
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