Por Lucio Catano (h)
Compatriotas y Amigos:
Nunca he presumido de conocer profundamente acerca de economía, solo de sentido común.
Al menos lo reconozco, mientras que la mayoría que presumen de serlo, pontifican sobre nuestros devaneos con esa suficiencia, propia de los más ignorantes.
Haciendo caso omiso de estos augures que deambulan por los diarios y la televisión, pontificando sandeces, trataré de realizar un humilde aporte al tema de las reservas y el uso indiscriminado que el gobierno, pretende hacer de ellas.
La Presidente juró ayer ante la clac estable de aplaudidores que si le indican cómo afrontar el pago parcial de la deuda externa, sin disponer de los activos del Central, lo haría.
Pues bien, existe creo, un mecanismo que podría conformar a todos.
Si la cosecha de gruesa nos otorga un stock de soja por, digamos unos doce mil millones de dólares y uno de maíz por otros dos mil quinientos, el gobierno podría adquirir en pesos dichas existencias a los productores, tomando la cotización de la pizarra de Chicago, de la última rueda, antes de disponer el pago del líquido producto.
Y de esa forma estaría en condiciones de disponer de ese físico, para ofrecer un pago en especie a los acreedores extranjeros, que peticionan la cancelación de las obligaciones contraidas.
Mediante este mecanismo, se aliviaría enormemente la capacidad de ensilaje de cereales y oleaginosas, que estara próximamente a su máxima tolerancia.
Los chacareros percibirían de inmediato sus existencias y se evitaría así que estas balandronadas oficialistas, nos conduzcan a un seguro e inexorable naufragio.
Como carecemos de una dirigencia seria, tanto en el plano político como en el sectorial, a poco de escucharla a Carrió, que no tiene la mas mínima idea de cómo replicar lo que esta ignorante de Presidente desea llevar adelante, desmonetizando de dólares a la Nación, y en consonancia con la gorda, los referentes de la Mesa de Enlace, que persisten en abulonarse a sus cargos, pese al estrepitoso fracaso que experimentan, por sus ideas inconexas, soy de la opinión que los recursos están disponibles para sortear este difícil trance en el que los K nos pretenden colocar.
Pero esta idea conlleva un propósito adicional.
Si esta Kretina recibe esta propuesta u otra similar o mejor incluso, pondremos al descubierto el sostenimiento de su juramento y destaparemos de paso todas las tramoyas sobre un manejo indiscriminado de los fondos públicos, patrimonio de todos los contribuyentes.
Estos autotitulados referentes ruralistas exhibirían sus incapacidades y podríamos así dejar que emerjan quienes tienen una idea concreta de cómo desprenderse de una presión tributaria que está enlutando a todo el campo argentino.
Los productores podrían así disponer de liquidez para proseguir con una actividad productiva que se alejaría así de la política sovietizante de este crapuloso gobierno y nos sacudiríamos de una buena vez de todos estos oradores sin neuronas.
La economía se sinceraría sin necesidad de las absurdas recetas, que estos atorrantes de esta política barribajera pregonan y la Nación emergería de estas cenizas que son el residuo de tantos años de sostener a todos estos dirigentes berretas de la política vernácula.
Es imperativo reseñar
LO QUE NI LA OPOSICION NI LA DIRIGENCIA RURALISTA PUEDEN CAPTAR.
Cordialmente Lucio Catano (h).-
Compatriotas y Amigos:
Nunca he presumido de conocer profundamente acerca de economía, solo de sentido común.
Al menos lo reconozco, mientras que la mayoría que presumen de serlo, pontifican sobre nuestros devaneos con esa suficiencia, propia de los más ignorantes.
Haciendo caso omiso de estos augures que deambulan por los diarios y la televisión, pontificando sandeces, trataré de realizar un humilde aporte al tema de las reservas y el uso indiscriminado que el gobierno, pretende hacer de ellas.
La Presidente juró ayer ante la clac estable de aplaudidores que si le indican cómo afrontar el pago parcial de la deuda externa, sin disponer de los activos del Central, lo haría.
Pues bien, existe creo, un mecanismo que podría conformar a todos.
Si la cosecha de gruesa nos otorga un stock de soja por, digamos unos doce mil millones de dólares y uno de maíz por otros dos mil quinientos, el gobierno podría adquirir en pesos dichas existencias a los productores, tomando la cotización de la pizarra de Chicago, de la última rueda, antes de disponer el pago del líquido producto.
Y de esa forma estaría en condiciones de disponer de ese físico, para ofrecer un pago en especie a los acreedores extranjeros, que peticionan la cancelación de las obligaciones contraidas.
Mediante este mecanismo, se aliviaría enormemente la capacidad de ensilaje de cereales y oleaginosas, que estara próximamente a su máxima tolerancia.
Los chacareros percibirían de inmediato sus existencias y se evitaría así que estas balandronadas oficialistas, nos conduzcan a un seguro e inexorable naufragio.
Como carecemos de una dirigencia seria, tanto en el plano político como en el sectorial, a poco de escucharla a Carrió, que no tiene la mas mínima idea de cómo replicar lo que esta ignorante de Presidente desea llevar adelante, desmonetizando de dólares a la Nación, y en consonancia con la gorda, los referentes de la Mesa de Enlace, que persisten en abulonarse a sus cargos, pese al estrepitoso fracaso que experimentan, por sus ideas inconexas, soy de la opinión que los recursos están disponibles para sortear este difícil trance en el que los K nos pretenden colocar.
Pero esta idea conlleva un propósito adicional.
Si esta Kretina recibe esta propuesta u otra similar o mejor incluso, pondremos al descubierto el sostenimiento de su juramento y destaparemos de paso todas las tramoyas sobre un manejo indiscriminado de los fondos públicos, patrimonio de todos los contribuyentes.
Estos autotitulados referentes ruralistas exhibirían sus incapacidades y podríamos así dejar que emerjan quienes tienen una idea concreta de cómo desprenderse de una presión tributaria que está enlutando a todo el campo argentino.
Los productores podrían así disponer de liquidez para proseguir con una actividad productiva que se alejaría así de la política sovietizante de este crapuloso gobierno y nos sacudiríamos de una buena vez de todos estos oradores sin neuronas.
La economía se sinceraría sin necesidad de las absurdas recetas, que estos atorrantes de esta política barribajera pregonan y la Nación emergería de estas cenizas que son el residuo de tantos años de sostener a todos estos dirigentes berretas de la política vernácula.
Es imperativo reseñar
LO QUE NI LA OPOSICION NI LA DIRIGENCIA RURALISTA PUEDEN CAPTAR.
Cordialmente Lucio Catano (h).-
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