EL DIFÍCIL CAMINO HACIA EL FINAL O “NO QUIERO SER COMO ISABELITA…”

 

Por Carlos Manuel Acuña

Al promediar esta semana que concluye Cristina Fernández de Kirchner comenzó a sopesar una realidad que vislumbraba lejana y casi imposible: la derrota, el final inevitable y el desmembramiento apresurado del grupo político que la respaldaba. Por un instante, pasaron frente a sus ojos las figuras intolerables de la fuga o la inaguantable escena posible de tener que entregarle la bandera y el bastón de mando a un oponente pólítico junto con el surgimiento y la avalancha de datos, informes y apreciaciones negativas sobre su gobierno. ¿Serán ciertas las cosas que se dicen y que De Vido niega? ¿Hasta donde son reales las noticias de que la droga, el narcotráfico y el delito se han enseñoreado del escenario cotidiano del país...? Fue una semana muy dura, por cierto, con el escándalo de las "Madres" y la promesa de que sería imparable pese a los esfuerzos que había ordenado. Ya hubo amigos que se lo habían adelantado: "es una cuestión geopolítica muy delicada. Nuestro amigo Chávez tiene un lugar muy importante en este negocio que se mezcla con las ideas de los iraníes. Es muy interesante pero no puede quedar en manos de quienes lo manejan aquí y además, Timerman no sirve para nada". Si, pensó, "ha sido un error su nombramiento. Me hizo meter la pata en el asunto de Papel Prensa cuando ideamos quebrarle el espinazo al monopolio informativo pero se reivindicó con eso de las acciones de Clarín en la banca norteamericana y rápidamente modificó el discurso que tenía preparado. Néstor no tenía esa información pero Héctor nos avisó a tiempo y hubo que aceptar que esa vieja burguesía ganara la partida. Con nuestros medios todavía no logramos doblegarla y es verdad que con Canal 7 no convencemos a nadie. Esta Sarlo los revolcó a estos periodistasd el programa 6,7,,8 que salen tan caros. No se cómo puede cambiar tanto una que viene del trotskismo..."
Estas y otras preguntas y respuestas que se hacía a si misma fueron, con seguridad, las que animaron las discusiones que mantuvo en Olivos antes de tomar la decisión de reunirse con la "mesa chica". El tiempo apremia y había que elaborar la lista de candidatos con el asesoramiento principal del secretario Zannini y del jefe de la SIDE que conoce al dedillo la personalidad y posibilidades de quienes deberán ocupar las listas que complican los intendentes. Las discusiones también llegaron a ese nivel pues cada uno tenía sus simpatías. Unos por ideología, otros por negocios y todos en función de ese motor inexorable de lograr y mantenerse en el poder, sobre todo cuando también estaba en juego la propia libertad y el futuro personal. Los intendentes tienen  sus compromisos, quieren participar y lógicamente hay que escucharlos pero el tejido que debemos armar para la profundización del "modelo" requiere fidelidades y un apoyo completo y decidido. Todos con su juego y ella sola para mandar en este país tan difícíl y sin Máximo para darle una mano. Este chico es un malcriado y nada le importa. Sólo darse "dique" y jugar a las cartas con sus amigos de Río Gallegos y para colmo ya estoy al tanto de que le gusta "la pichicata". "Tengo la impresión de de que hay un círculo que se achica, que estoy encerrada en el medio y que se me acercan los bordes más y más. Es asfixiante".
Por cierto, las elucubraciones de la presidente de la ex República Argentina no pasaban por determinados aspectos de la realidad como, por ejemplo, la designación de un millar de funcionarios de distinta jerarquía - o ninguna - que nombrados por Timerman y por La Cámpora convertida en una efectiva bolsa de trabajo, que deambulan todavía sin mayores obligaciones por las dependencias del ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, con sus zapatillas y camisetas desprendidas. Esperaban para convertirse en la avanzada de una nueva diplomacia renovadora que a Bettini no le había gustado para el proyecto del mañana. "Nada menos que él había dicho que estaba loca..." Levantó los hombros y paseó la mirada por los cuadros y los muebles del despacho.
Tampoco formaba parte de sus inquietudes el medio millar de empleados designados en el INADI, mostrados como un éxito administrativo por la vicepresidente del organismo, Rachid, candidata a diputada metropolitana en cuarto lugar por el Frente para la Victoria - no se sabe si por el correspondiente porcentaje femenino o masculino - y peleada a muerte con Morgado, el titular, por cuestiones inherentes a las preferencias homosexuales de la funcionaria y el manejo de la cuantiosa  y apetecible"caja" para atender las importantes cuestiones de gobierno que debe llevar adelante en la Argentina del presente. Todo un tema por cierto, tan caro a los esfuerzos de Néstor cuando se votó el matrimonio de los invertidos. ¿Cuántos votos representaban? "Pocos pero  vencimos a la Iglesia", musitó al recordar la frase de Verbitsky en Página 12, días atrás, pero el caso es que "con los curas nunca se sabe y menos ahora que se han sumado los Evangelistas..."
Igualmente no le inquietaban a Cristina las declaraciones de Leandro Despouy, presidente de la Auditoría General de la Nación en el sentido de que "hay cosas que nos alarman y asustan" cuando se refirió al problema de las "Madres de la Plaza de Mayo", un asunto que ya arreglarían el fiscal Di Lello, un viejo y entusiasta militante, y el fiel Norberto Oyarbide para concluir con la tormenta de las casas, la droga y el lavado.  ¿O sería cierto que esta cuestión gigantesca se desbordaría e iría más allá - mucho más allá - de lo esperado...? ¿Por qué Verbitsky está tan preocupado?
El día gris contribuía a su desazón aunque le aseguraron que el problema surgido en el Regimiento de Infantería 25 por el homenaje a un marino cuyo nombre no recordaba, era una cuestión menor.  El error por el cuadro de Ghiaccino también era un tema que se superaría. No era el momento. Se sonrió casi automáticamente. "Siempre hay un cuadro de por medio" se comentó en la intimidad y se le dibujó en la memoria la escena de este general ¿cómo se llamaba...? ¿Bendini...? trepado al banquito mientra Néstor le daba la orden con el brazo extendido y la palma de su mano derecha abierta, indicativa y decidida. Había sido toda una jugada pero la ganaron y eso permitió avanzar con los juicios... "Sólo algunos civiles cacarearon con declaraciones que no llegaron a ninguna parte aunque ahora están esos abogaditos que hacen tanto ruido..."
Lo que ahora importaba - y eso sí lo había entendido - era que en Córdoba de la Sota no respondería a su candidatura y ella perdería en ese importante distrito. En Santa Fe las cosas estaban igualmente feas y ya en Buenos Aires los intendentes del conurbano comenzaban el retorno a la férula de Duhalde, como se lo dijo a Randazo...¿Y Urtubey en Salta...? "Ese chico tiene ambiciones y dará trabajo". La ciudad se movía lenta y amenazante lejos de su ventana.  Siempre se había opuesto a la candidatura de Filmus "al que no trago", en la Capital y pese a lo que le decían había escuchado que los del PRO estaban seguros del triunfo del odiado Macri. Si esto seguía así la derrota sería inevitable. Si ganaba Alfonsín, las cosas se mostrarían más fáciles pero...¿Si era Duhalde...? Icazuriaga le aseguró que ella llegaría a la segunda vuelta y que si bien la pelea sería difícil, ganar no era imposible. Ya tenía sus cosas arregladas con el amigo Slim durante su último viaje a México, pero de todos modos...
La duda la carcomía y el rictus de su cara en el espejo  no le gustó. Hizo un mohín, el resultado fue mucho peor y con esfuerzo se empeñó en no gemir. ¿Que vestido se pondría para la trasmisión del mando si llegaba el temido momento...?. ¿Y para el viaje..? Las cifras del 28 o 29 por ciento le daban vuelta por la cabeza y no la dejaban dormir. No, no y no !!Por favor!! No quería ser como Isabelita. ¿Que significaría eso que había leído de que se repetía la historia...?  Era inaguantable imaginarse lo que dirían los diarios después de su partida. ¿Se arriesgaría a presentarse...?Algunos ya hablaban del "general inflación" y otros batían el parche sobre la cuestión del "negocio o la estafa de los derechos humanos". También, esta Hebe !que mal había organizado las cosas¡ ¿Cómo se le había ocurrido poner un parricida al mando, cuando apenas lo conocía? ¿Que había detrás de los vuelos de Moyano en el avión de Schocklender, ese "forúnculo" como escribió un periodista insolente...?¿Y el "modelo"? Otra vez volvía la pregunta inquisidora: ¿En que quedaría, como pasaría a la historia...? ¿Y los juicios indispensables para este asunto de los "derechos humanos...? ¿En que quedarían los militares presos y condenados...? ¿Y los jueces que tan bién actuaban...? Otra vez se arregló el pelo y miró la hora.  Había llegado el momento del Rivotril y de la otra serie de remedios que la mantenían activa y para consolarse recordó las palabras de su hija Florencia: "No importa mamá, no importa... ya estamos hechas. Ahora !A vivir, a vivir¡¡¡". Entonces se abrió la puerta, las elucubraciones concluyeron bruscamente y junto con la realidad que tejía y destejía fuera de esas paredes, entró Zannini, serio pero firme, y comenzó a darle órdenes....