Según La Política On Line, el Arzobispo de la ciudad de La Plata, Héctor Aguer, en esta ciudad alienta a candidatos que son afines a la Iglesia. El más poderoso sería Eduardo Di Marco, pre candidato por el duhaldismo y de Hilda "Chiche" Duhalde.
Según el referido medio, Mons Aguer le pidió a Francisco De Narváez que ubicara a Di Marco en la Legislatura bonaerense durante una visita del candidato a gobernador a la Catedral, pero el empresario se hizo el distraído.
Eduardo Di Marco es presidente de la Fundación Catedral de La Plata, una entidad dedicada a colaborar con las tareas de mantenimiento edilicio del Templo, que es uno de los diez mayores del mundo tras la construcción de sus dos imponentes torres.
Ademas, Di Marco fue presidente de la Unidad Ejecutora Catedral de La Plata, un organismo que se encargó de completar las obras de la Catedral. También es miembro del Consejo de Asuntos Económicos del Arzobispado de La Plata.
Di Marco se lleva en buenos términos con Pablo Bruera, habiendo apoyado en 2007 su candidatura a intendente. La Política On Line afirma que aportó para la campaña de ese año -en la que Bruera derrotó a Julio Alak- 200 mil pesos. A cambio Bruera le prometió ser senador por la Octava Sección, pero al cierre de listas quedó relegado.
Dicho medio consigna que se llevan bien con Mons. Aguer, el ex concejal Oscar Vaudagna, Alejandro Granillo Fernández, un hombre considerado de la “familia judicial” de La Plata, cuya trayectoria política proviene del peronismo y siempre fue un leal de Eduardo Duhalde. También Juan Manuel Morena, concejal platense que ingresó al legislativo por el felipismo en el marco de lo que fue la alianza Unión-PRO. Su llegada clérigo es a través de la Universidad Católica de La Plata. El mismo Gonzalo Atanasof también es egresado de la Universidad Católica de La Plata.
Según el referido medio, Mons Aguer le pidió a Francisco De Narváez que ubicara a Di Marco en la Legislatura bonaerense durante una visita del candidato a gobernador a la Catedral, pero el empresario se hizo el distraído.
Eduardo Di Marco es presidente de la Fundación Catedral de La Plata, una entidad dedicada a colaborar con las tareas de mantenimiento edilicio del Templo, que es uno de los diez mayores del mundo tras la construcción de sus dos imponentes torres.
Ademas, Di Marco fue presidente de la Unidad Ejecutora Catedral de La Plata, un organismo que se encargó de completar las obras de la Catedral. También es miembro del Consejo de Asuntos Económicos del Arzobispado de La Plata.
Di Marco se lleva en buenos términos con Pablo Bruera, habiendo apoyado en 2007 su candidatura a intendente. La Política On Line afirma que aportó para la campaña de ese año -en la que Bruera derrotó a Julio Alak- 200 mil pesos. A cambio Bruera le prometió ser senador por la Octava Sección, pero al cierre de listas quedó relegado.
Dicho medio consigna que se llevan bien con Mons. Aguer, el ex concejal Oscar Vaudagna, Alejandro Granillo Fernández, un hombre considerado de la “familia judicial” de La Plata, cuya trayectoria política proviene del peronismo y siempre fue un leal de Eduardo Duhalde. También Juan Manuel Morena, concejal platense que ingresó al legislativo por el felipismo en el marco de lo que fue la alianza Unión-PRO. Su llegada clérigo es a través de la Universidad Católica de La Plata. El mismo Gonzalo Atanasof también es egresado de la Universidad Católica de La Plata.
Aguer mantiene con Bruera la misma relación que tenía con Alak: una relación de intereses con algunos picos de tensión cada tanto, según concluye la nota de La Política On Line.
Sin embargo, la polémica va mucho más allá de lo que piensa Mons. Aguer, ya que desde el Arzobispado no hubo ninguna declaración oficial de semejante aval, mientras que en la democracia se busca el número de votantes.
La cuestión real está en el enfrentamiento del peronismo histórico con el kirchnerismo de la línea que fue echada por el mismo Juan Domingo Perón en 1974. ¿Se verá favorecido Di Marco por su lealtad segura, frente a tantos que han sido "veletas" en los últimos años, siguiendo con obsecuencia políticas del Gobierno nacional que son antinacionales?
El probable alineamiento del peronismo histórico detrás de Eduardo Di Marco tal vez marque una señal que se repita en otros sitios, y si esto se produce la lista entera que lleva a Cristina Fernández Wilhelm como candidata a presidente puede correr el peligro de una gravísima derrota.
Lo que queda claro, es que gane quien gane, no afectará la relación de la Iglesia platense con quien resulte electo Intendente.
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