Por Cosme Beccar Varela
Buenos Aires, 28 de Diciembre del
año 2011 - 1080
Ayer hablé con el Padre von Wernich quien me llamó desde el
campo de concentración de Marcos Paz en el que se encuentra secuestrado por
esta tiranía. Me contó que el régimen carcelario se ha hecho más cruel desde
que el Director de Servicios Penitenciarios Federales es un integrante de la
agrupación delictiva autodenominada "La Cámpora.
Entre otras cosas, han cerrado la
capilla del pabellón donde se encuentran los secuestrados políticos y en la que
antes el Padre von Wernich, después
de celebrar Misa en privado (puesto que ya hace rato que les prohíben asistir a
la Misa a los otros detenidos) guardaba
el Santísimo Sacramento en el Sagrario donde lo podían adorar los otros presos.
Ahora no pueden entrar a la Capilla
sino en ciertas ocasiones no religiosas. La "Hora Santa" está
suprimida. El Padre von Wernich
tiene una prohibición especial de dirigir las oraciones de los otros.
Obviamente, ellos no pueden comulgar las Hostias Consagradas por el Padre, que
es tratado como un laico más, ignorando su sagrada condición sacerdotal.
Es decir, los desgraciados
internos no pueden beneficiarse de la inmensa Gracia que significa que un
sacerdote este detenido con ellos y pueda prestarles el auxilio espiritual de
nuestra Santa Religión.
¿Qué razón hay para esto? No puede
haber otra que odio a la Fe Católica, en abierta violación de la doctrina
católica y del artículo 2do de la Constitución Nacional: "El gobierno
federal sostiene el culto católico, apostólico romano."
Según me informó el Padre, las
capillas de los otros "pabellones" de presos han sido convertidas en
depósitos de trastos viejos, profanándose el destino religioso que inspiró su
construcción.
Es decir, estos esclavos de Satanás
que nos tiranizan no se conforman con mantener en la cárcel a los mil secuestrados
que aprisionan contra todo derecho sino que, además, les privan del único
consuelo que pueden tener en esta vida y es la adoración del Santísimo
Sacramento, la oración en lugar sagrado y la invocación al auxilio divino,
visto el abandono inaudito en que los han dejado los hombres.
¿Qué argumento puede esgrimir el
canalla de "la Cámpora" que ordena esta monstruosidad para hacerlo?
No tiene ninguno, a no ser su odio insaciable contra la fe católica.
¿Cómo debemos responder los
católicos a ese odio? Con una
disposición completa para el combate total. Eso de "poner la otra
mejilla" se refiere a las ofensas personales pero no a las que se cometen
contra la Religión o contra los hermanos indefensos.
Ahora no tenemos cómo
responderles tal cual se merecen, pero sí podemos prepararnos para el día en
que se pueda y, entretanto, apelar a la conciencia de todos los hombres de bien
de este país y del mundo para que exijan el respeto a esa última libertad que les
quedaba a los que han sido privados de las otras por la arbitrariedad más
repulsiva que se tenga memoria desde los campos de concentración nazis o de la
KGB.
Esta apelación de dirige en
especial a los Señores Obispos. El Padre von
Wernich depende de Mons. Elizalde,
Obispo de 9 de Julio, Provincia de Buenos Aires quien debería hace rato haber
levantado su poderosa voz para reclamar por estas atrocidades que se comenten
contra un sacerdote incardinado en su diócesis. Él sabe que no es culpable de
los crímenes que le imputan pues no le ha retirado el permiso para decir Misa
ni para confesar penitentes. Pero no se atreve, por cobardía, a reclamar
vehementemente en defensa de su libertad sacerdotal, ya que no física.
Ni qué decir de Mons. Bergoglio, Presidente hasta hace poco
del Episcopado Argentino y de su actual titular. Su silencio es una estridente
acusación contra ellos de la que creo que Dios les pedirá cuentas.
* * *
Los jueces que mantienen en la
cárcel a estos hombres desde hace ocho años, sin derecho alguno o con
sentencias basadas en el “testimonio" de testigos falsos y parciales por
haber sido enemigos de ellos en la lucha antiterrorista, deben recordar que el
artículo 18 de la Constitución Nacional dice: "Las cárceles de la Nación serán
sanas y limpias, para seguridad y no para castigo de los reos detenidos en
ellas y toda medida que a pretexto de precaución conduzca a mortificarlos más
allá de los que aquella exija, hará responsable al juez que la autorice".
Algún día deberán responder por esta prevaricación.
Ocurre que el "juez de
ejecución" de la "pena" impuesta al Padre von Wernich es un juez de raza judía llamado Rosansky, que supongo también lo es de religión. Es extremadamente
probable que esté persiguiendo al Padre von
Wernich por ser sacerdote católico y quiera privar a los demás secuestrados
de los auxilios espirituales que él les puede prestar. Con eso comete el
horrendo crimen de “discriminación” (tan pregonado por él y sus cómplices) y
viola abiertamente el art. 18 de la Declaración de los Derechos Humanos de la
ONU del 10/12/48 y otros Tratados internacionales a los cuales adhirió la
Argentina elevándolos al rango constitucional por el art. 75, inciso 22 de la
reforma de 1994.
Además, este trato y el que
describe la denuncia que transcribo a continuación enviada por mi amigo el Sr. Eduardo Palacios Molina, son
indudablemente formas de tortura psicológica, claramente condenada por el art.
5 de la Declaración de Derechos Humanos y otros Tratados mencionados en el art.
75 inciso 22 ya citado.
También constituyen un delito
penado por el art. 144 ter, inciso 3ro del Código Penal penado con prisión de 8
a 25 años.
Cabe agregar que todo esto ocurre
con relación a personas privadas ilegalmente de su libertad desde hace ocho
años, varios de ellos, con lo cual los jueces y funcionarios que los retienen
incurren en la pena de 1 a 3 años de prisión del art. 143, incisos 1 y 6) del
Código Penal.
Casi todos los mil secuestrados
políticos lo están bajo la apariencia de una prisión preventiva que excede
todos los máximos legales o con sentencias notoriamente arbitrarias por falta
de pruebas no siendo tales las declaraciones "testimoniales" de sus
enemigos políticos, y con violación flagrante de la presunción de inocencia que
establece el art. 11 de la Declaración de Derechos Humanos, la ley y la
jurisprudencia argentinas.
Agrego la denuncia de mi amigo Eduardo Palacios Molina como
complemento de esta.
* * *
EMPEORA EN LA ARGENTINA EL MAL TRATO A LOS PRESOS POLÏTICOS
Lector: En forma directa he obtenido
información acerca de "empeoramiento" en el mal trato que están recibiendo los presos
políticos en el Complejo Penitenciario Federal II de Marcos Paz.
He recibiendo llamados
telefónicos de personas que revisten allí
tal condición y en forma sucinta he sido informado que las condiciones
de trato con los detenidos ha empeorado en estas últimas semanas del año y que
rige gran severidad en el trato, endureciéndose el régimen de visitas, así como
restringiéndose las horas de descanso o recreos, y prolongándose en excesos los
horarios para la recepción de colaciones alimenticias, cada vez más denigradas
en calidad y cantidad.
Algunas voces cibernéticas nos
hicieron creer que la situación de los detenidos políticos, había mejorado y
que se había humanizado el trato. Lamentablemente esto no es cierto. Se han
reagravado y esto es la consecuencia de un cambio de autoridades que reorientados
por el grupo "la cámpora" han iniciado una verdadera tarea de
hostigamiento con propósitos de molestar y torturar psíquicamente a los presos
políticos, personas de avanzada edad profesionales y abuelos en su mayoría.
Haciendo revisiones y recuento de
detenido a alta horas de la noche, para interrumpirles el sueño, sabiendo que
en su mayoría son personas que padecen enfermedades cardiovasculares,
circulatorias, diabetes, cáncer, y otras patologías que no son tratadas , ya
que en dicha unidad carcelaria, carece de un establecimiento de mediana
complejidad médica y de lugares
adecuados de internación.
Los jueces intervinientes en cada
causa referida a cada detenido, son los verdaderos responsables de estos
internos, a los que se les ha negado la detención domiciliaria y son ellos que
deben hacer una investigación para esclarecer este mal trato con que se ha
discriminado a quienes padecen esta injusta persecución.
Hay un gran bajón en el ánimo de
los presos políticos, que se ven en estos momentos abandonados por la sociedad
y por todos. Para mayor gravedad, se les ha cortado las visitas a muchos amigos
y familiares, que no resisten las largas colas y la revisaciones cada vez más
humillantes que le realizan toda vez que deben pasar por la guardia a ver a sus
amigos o familiares.
Estos largos plantones que hay
que pasarlo de pié son consecuencia de que muchos familiares se hayan desmayado
en las largas colas, y todo para cumplir una visita que no puede extenderse más
de dos horas, tiempo este que se agota con los trámites previos que deben
realizarse. Son muchos los detenidos políticos, que tienen sus familiares y
amigos en situación de salud delicada y que no soportan estos malos tratos a
que son sometidos, por ordenes de la superioridad, par poder evitar que los
presos políticos sean visitados y torturarlos así con estos inconvenientes que
podrían obviarse, si hubiese buena voluntad.
Los delincuentes comunes tienen
más derechos que los presos políticos y sus familiares son mejor tratados. Es
ostensible el odio que mueve esta maquinaria terrorista desde el poder para
vengarse llevando a cabo estos actos de pura maldad.
No podemos ser indiferentes y nos
debe doler que esto esté ocurriendo en nuestro país. Por de pronto saber e
informar que nuestros presos políticos están en el peor campo de concentración
que puede pergeniar el más cruel de los sistemas totalitarios y que esto se ha
extendido a otros centros de detención del país, donde existen detenidos
políticos, razón por la cual no debemos permanecer ajenos y en cada
ocasión que se nos presente, debemos
reclamar por ellos. EPM.
* * *
Esto está pasando en la Argentina
de la “soja”, del consumismo, de los funcionarios ilícitamente enriquecidos,
del fraude electoral, de los empresarios ahítos, de las clases cultas
satisfechas. Esto exige un urgente rescate. S.O.S. "¡¡¡Save our
souls!!!" (eso quiere decir S.O.S y ese es precisamente el caso). Quien
pueda hacer algo que lo haga YA.
Cosme Beccar Varela
e-mail: correo@labotellaalmar.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los mensajes son moderados antes de su publicación. No se publican improperios. Escriba con respeto, aunque disienta, y será publicado y respondido su comentario. Modérese Usted mismo, y su aporte será publicado.