El Secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, aumentó su patrimonio un 91,5% entre 2010 y 2011. Los datos surgen de su última declaración jurada en la que reconoce que su riqueza pasó de $ 512.247 a $ 981.073.
El funcionario pretendió justificar el incremento en sus ganancias por su actividad comercial como ferretero y en el rendimiento de inversiones en títulos públicos (en tanto que el funcionario posee acceso a información gubernamental que le permite conocer de antemano cómo serán valuados dichos títulos públicos, lo cual implica un acto de corrupción). Así lo consigna el diario Clarín en su edición de hoy.
En ocho años, su fortuna se multiplicó 30 veces, y el funcionario no puede excusarse en una galopante inflación, ya que para el mismo esta es inexistente, y por lo tanto los valores que señalan cómo se potencia su propio patrimonio carecen de tal atenuante.
Cuando entró a la gestión kirchnerista como secretario de Comunicaciones, en 2003, Moreno presentó un patrimonio de $ 33 mil pesos, uno de los más bajo del equipo de gobierno.
A pesar de que ya alcanzó un capital casi millonario, el funcionario no tiene casa, es dueño de un auto modelo 97 y mantiene el negocio con el que llegó a la función pública: una distribuidora de artículos de ferretería que no declara como activo pero sí reconoce los ingresos que le genera.
¿Cómo es que una ferretería genera ingresos, pero que a su vez no es reconocida como activo por el funcionario? Un nuevo dilema que señalaría un acto de corrupción, y de falta de transparencia en la gestión pública.
¿Cómo es que los funcionarios públicos multiplican exponencialmente su patrimonio, mientras el ciudadano común lucha por una mera supervivencia, contando con grandes masas de indigentes que reciben planes sociales sin posibilidad de ubicar un trabajo digno? ¿Hay una asociación ilícita en el poder, que utiliza la función pública para su enriquecimiento personal?
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los mensajes son moderados antes de su publicación. No se publican improperios. Escriba con respeto, aunque disienta, y será publicado y respondido su comentario. Modérese Usted mismo, y su aporte será publicado.