El diputado radical Manuel Garrido difundió un informe de
la Casa de Moneda de 2010 según el cual la empresa Ciccone, cuya expropiación
fue concretada el día 22 de agosto de 2012 por la Cámara Diputados nacional, es
"una fábrica obsoleta que no sirve para producir billetes", en el
marco de denuncias contra la Empresa que involucran al vicepresidente Amado Boudou. En tales condiciones, debiera dictarse una medida cautelar a los efectos de que la Justicia se provea de los balances y documentación de la Empresa, efectuando un puntual seguimiento de las operatorias a futuro, a fin de que no sean borrados los elementos que señalarían los potenciales delitos denunciados oportunamente en sede penal.
¿SOBERANÍA MONETARIA?
"Las condiciones de la
planta son lapidarias. Más que una fábrica de billetes es una imprenta, y para
transformarla hay que hacer una inversión muy grande en dólares. Faltan
máquinas, no tienen numeradoras. Lo que se está expropiando es obsoleto. Este
documento se ocultó. La discusión pasó por otras cuestiones, como la causa
judicial. Se dice que el país va a recuperar la soberanía monetaria, y la Casa
de Moneda dice que es 'una fábrica obsoleta que no sirve para producir
billetes'", denunció Garrido en declaraciones a Radio Mitre.
"Está claro que el Congreso
terminó aprobando una expropiación ignorando informes técnicos del propio
Estado. Una expropiación que implica una erogación monumental. La Afip tiene un
crédito de 247 millones de dólares que dicen que va a alcanzar para cubrir las
deudas, pero no alcanza. Uno de los acreedores más importantes es Rentas de la
provincia de Buenos Aires. Hay otros acreedores por 140 millones de dólares. Es
muy poco serio. Se está comprometiendo el patrimonio del Estado", aseguró
el ex Director de Investigaciones de la Oficina Anticorrupción.
"Ciccone no está en
condiciones de producir billetes, salvo que se compren máquinas, cosa que
podrían haber hecho sin necesidad de hacerse cargo del 'muerto' de esta
empresa, que encima está envuelta en un escándalo que se busca tapar, para
favorecer al vicepresidente", concluyó Garrido.
ES UNA ESTAFA
Coincidentemente, el diputado nacional
Miguel Bazze (UCR-Buenos Aires),
expresó que el proyecto de expropiación de la ex Ciccone “tiene por objeto
principal beneficiar a un reducido grupo de personas que está vinculado con el
gobierno, y que tiene por objeto esconder, disimular, ocultar una fenomenal
estafa al Estado nacional y que ha sido perfectamente diseñada”.
“Si como se ha dicho en este debate que se
trata de un proyecto para dar una respuesta a la soberanía monetaria, no se
entiende por qué a lo largo de tanto tiempo el gobierno nacional no procuró
mejorar las condiciones de producción de la Casa de la Moneda”, remarcó Bazze.
Dijo que “desde la propia Casa de
la Moneda se requirió en varias oportunidades la posibilidad de adquirir el
equipamiento necesario para que el Estado nacional estuviera en condiciones de
imprimir los billetes y el gobierno nacional tomó la decisión de no adquirir
ese equipamiento”.
El diputado agregó que se trata
de “una fenomenal maniobra que tiene por objeto estafar al Estado para que un
reducido grupo de personas vinculadas con el gobierno se quede con la ganancia
de la impresión de billetes en la Argentina”.
Aludió luego al debate en el
Senado del proyecto, y refirió: “Me parece que la actitud del presidente del
Senado, vicepresidente de la República, de no dar respuestas a los
cuestionamientos que se hacen alrededor de su persona vinculada con este tema
es una falta de respeto grave a las instituciones”.
“Se confunde hoy el oficialismo
cuando cree que está votando, en un acto patriótico, un acto de soberanía. No
tiene nada que ver con eso”, subrayó Bazze.
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