APUntes sobre mercados granarios
Por Alejandro Pérez Unzner
Martes 10-11-9, a las 8.15.
Antes de un martes que probablemente sea de bajas, si vemos datos tales como el avance de cosecha en EE.UU., con buen tiempo a su favors, o el informe mensual USDA (que no debería sorprender, pensamos a priori, con datos alcistas), se dio una apertura semanal con subas de 6-7-8 u$s/t en soja-maíz-trigo, en Chicago.
El verde de las pizarras se debió ayer a que el apoyo político a los mercados externos de importancia sigue vigente, el petróleo goza de buena salud, el oro no para de batir récords y el dólar volvió a mostrarse débil en su diario cotejo contra otras monedas fuertes. Aunque permanecen vigentes las posibilidades de que se sumen al tono bajista elementos tales como los indicadores económicos de aquel país.
Mientras, si Sudamérica no define concretamente sus intenciones de siembra, sobre todo de soja, podría sobrevenir algún “sacudón” dentro de un andar que, según hemos dicho varias veces, no puede sino contener un fuerte componente bajista, hasta que la demanda global se reordene, y esto en la medida que los efectos de la crisis económica se vayan decantando, cosa que quizás se dé en el segundo semestre de 2010.
Hoy, Día de la Tradición, andamos “guitarra” en mano, y vemos que aún no hay un balance definitivo de las lluvias y el granizo de ayer, pero sí que estamos ante una semana más bien seca y templada, con probabilidad de nuevas precipitaciones hacia el fin de la misma. Animo del productor lluvia mediante + perspectivas de cosecha + cuentas fiscales, siguen, en tanto, concatenados.
En el Medio Oeste estadounidense, el reporte de progreso de cultivos conocido ayer dio el 75% de la soja cosechado, y el 37% del maíz (sigue fuertemente atrasado): estos datos oficiales cayeron en el rango de expectativas de los operadores, así que difícilmente haya “sustos” por ese lado. El trigo de invierno, a su vez, 71% nacido, a la espera del invierno para “dormir” bajo la nieve.
La demanda local copió el tono alcista llegado de afuera, y los precios del físico se asemejaron a los de mediados de la semana anterior, con $ 20/t de aumento en soja vieja (a 960 sobre Rosario y zona) y u$s 5 (a 225) en cosecha. En Bahía Blanca se vieron 950 pesos y de 225 a 227 dólares, según mes de entrega, y en Necochea 940 y de 221 a 223, respectivamente.
El maíz se trató de negociar a 118 dólares en cosecha, pero sin volumen claro, y también hubo u$s/t 122 para entregas dentro de un par de semanas. En trigo, los molinos intentan hacerse de los relativamente pocos lotes que están llegando desde el Norte del país, pagando hasta 520 pesos, contra la idea de 600 por el mejor trigo panadero, vista en cercanías de esta Capital Federal. El girasol sigue en 765 pesos, esperando definiciones sobre su área de cultivo, y el sorgo mejoró a 390-393 pesos.
Perder el miedo a emplear los mercados de futuros y sus diversas herramientas sigue siendo para los interesados importante, por sus variantes y beneficios, si se las sabe emplear. No sabemos si hoy “darán miedo” o no las cifras que dé el USDA, en principio de alrededor de 330 mill./t de producción de maíz en EE.UU., de casi 89 millones en soja y de 60,4 mill./t en trigo.
En tanto, un acuerdo en la cuestión de la operatoria de los recibidores de granos, reduciendo la jornada laboral a 6 horas y logrando con esto un sustancial aumento nominal del salario, traería la necesaria paz a las terminales portuarias, de la cual dependerá buena parte de la marcha de la hasta ahora incierta cosecha que viene.
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