Por Emilio Nazar KasboKirchner y Brown amagan con una guerra, y mientras Inglaterra afirma proteger su "soberanía", la Argentina sin Fuerzas Armadas pide a la ONU que interceda.
Se trata en primer lugar de un desastre nacional. Arruinada la economía, la producción y la cadena de pagos interna, e imposibilitada la exportación de productos, y tras haber considerado a las Fuerzas Armadas como "enemigas" y como un "gasto" innecesario, el Gobierno Nacional ha provocado el máximo colapso en materia de indefensión.
Actualmente, no estamos en condiciones de mantener un conflicto bélico más que al modo del tema "Botnia" con Uruguay, conflicto "bélico" que lleva ya varios años (y según trascendidos, motivado por un problema de excesivas coimas del lado argentino).
Resulta ahora que Cristina Kirchner pidió a la ONU que interceda ante la "agresión" británica, tras prohibir por decreto la navegación de embarcaciones británicas hacia las islas Malvinas para evitar los trabajos de “exploración y explotación” de la petrolera Desire Petroleum.
Mientras tanto, el primer ministro británico, Gordon Brown, hace lo propio en Inglaterra, solamente que ese país no denigra a sus Fuerzas Armadas y podría enviar nuevamente su flota... El diario británico sensacionalista "The Sun" tituló "El petróleo enciende la chispa para otro 1982". Además consignó que la Argentina está furiosa con el plan británico de taladrar siete pozos en la islas”.
Las Malvinas y su región aledaña cuenta con la capacidad de producir 60 mil millones de barriles de petróleo de alta calidad, y que podría ser una de las mayores reservas de combustible del mundo.
Pero nuestro país reclama la soberanía sobre las islas usurpadas mucho antes de que se hallaran aplicaciones al petróleo. La Argentina puede entrar en un conflicto comercial, y hoy no será secundada por país alguno, ni por los ex "aliados". Es más, Chile, Brasil y Uruguay serán los primeros en buscar una tajada que les brinden los ingleses a los efectos. En el Siglo XXI todo se compra y se vende, los gobiernos también, y en ese marco el kirchnerismo está de saldo... o más bien de "clavo".
Brown, declaró que su gobierno hizo “todas las preparaciones necesarias para asegurar que los habitantes de las islas estén correctamente protegidos”, como infundiendo confianza en los isleños. Y recordemos que fueron los ingleses en 1982 quienes produjeron muertes y daños en las propiedades de los kelpers malvinenses, y no los argentinos que les dispensamos el mejor de los tratos y custodia de sus derechos.
Además, Brown aclaró que la prospección petrolera “está de acuerdo con nuestros derechos” (ingleses) por lo que debe imponerse el diálogo entre las dos naciones.
La prensa británica advirtió sobre vuelos clandestinos de aviones militares argentinos sobre las islas e informó que el Reino Unido envió en secreto embarcaciones de guerra a la zona. A su vez, la embajada argentina en Londres desmintió que se hubieran activado acciones militares.
La prensa británica desinformó sobre la situación actual de la gloriosa Fuerza Aérea Argentina que actuó en 1982, afirmando que creció el doble desde el conflicto bélico, cuando en la realidad no tiene capacidad operativa ni de 24 horas.
La Guerra de Malvinas no fue declarada, se produjo la situación de hecho como conflicto bélico, y tampoco ha tenido declaración de paz. La guerra es entre dos Naciones, y por tanto continúa hasta que una se de por vencida. El Derecho está del lado argentino, pero la fuerza del inglés... incluso la fuerza de influir en el Derecho Internacional.
Mezclar la causa Malvinas con Cristina Kirchner es tanto como mezclarla con el gobierno del Proceso Militar. Es posible que los Kirchner pretendan usar la causa como bandera electoral, o para sus propios fines, pero las Malvinas representa la situación actual en que vive sometida nuestra Patria.
Vivimos en un descalabro a todo nivel: espiritual, moral, intelectual, social, cultural, económico, político e ideológico, e indefensos ingresamos al Nuevo Orden Mundial donde somos simplemente el último orejón del tarro mendigando derechos que no nos reconocen.
Han sido nuestros gobiernos "democráticos" los que nos llevaron a esta situación calamitosa. No hay alimentos, no hay salud, no hay formación, ni se come, ni se cura ni se educa, y no hay nadie que nos defienda de la inseguridad ¿qué "democracia" es esta, que ni siquiera nos puede defender de arbitrariedades de naciones extranjeras que usurpan nuestro territorio? ¿Qué "gobiernos" tenemos, dedicados a producir daño al pueblo y a la Patria, con el sentimiento de impunidad de que ni Dios ni la Patria los juzgará?
Pero somos argentinos, y con la Argentina no se juega.
