jueves, 15 de septiembre de 2011

PODEROSO CABALLERO ES DON DINERO

 
 
Por: Ricardo Díaz
 
 
Otro protagonista de un caso de corrupción absuelto. Otra vez la impunidad. En esta oportunidad, la venta ilegal de armas en la década de los 90,  por la que nadie es encarcelado.
Si el siglo XX fue un “cambalache”, en donde daba lo mismo ser derecho que traidor, el siglo XXI es una “cambalache” elevado a la enésima potencia.
Absoluciones; impunidad; detenciones de “perejiles”; liberaciones de delincuentes y violadores que, obviamente, vuelven a delinquir; coimas; enriquecimiento ilícito; etc. etc. etc.; es decir, todas barbaridades sin explicación lógica, fuera del sentido común, fuera de la común comprensión. Salvo que ---y aquí está la posible explicación--- comencemos a pensar que, en el papel principal de todo esto, se encuentre el  PODEROSO CABALLERO, DON DINERO.
Y habría que ver, en que asuntos se trata de un caballero local y en cuales viene de afuera. El más poderoso de los “caballeros externos” sabemos que es el PODER INTERNACIONAL DEL DINERO, con Rockefeller a la cabeza. Poderosas mega empresas cuyas facturaciones superan el ingreso anual de un país como Argentina. Superbancos como el City Bank o el Illinois. Organizaciones como la Fundación Ford que hace lobby en naciones como la nuestra para que salgan leyes anticristianas, y anti-naturales. Bancos centrales  como la Reserva Federal de Estados Unidos, para sometimiento de los bancos centrales de los demás países.
En fin, la lista es larga respecto de los “caballeros” externos. Y los locales pueden ser los pertenecientes a los altos funcionarios del Estado, a expresidentes, que les sirve para sobornar a los jueces y comprar su libertad; apoderados de organizaciones que nacieron para una cosa y luego se dedicaron a otra, por ejemplo: Madres de Plaza de Mayo nació por la cuestión de los desaparecidos en la guerra contra la subversión y, después, se dedicaron a la construcción de viviendas. Si hay alguien que me lo pueda explicar, por favor, no dude en hacerlo, sabré escuchar.
Creo, en definitiva, tras este brevísimo análisis,  que la única explicación a todas las barbaridades que están sucediendo en nuestra querida patria, es esta del PODEROSO CABALLERO, DON DINERO.

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