Por Carlos
Tórtora
septiembre 29, 2012
En su ping pong de anteayer con los estudiantes
de la Escuela de Gobierno de Harvard, la presidente reabrió las sospechas
acerca de su presunto enriquecimiento ilícito en el ejercicio de la función
pública. Una estudiante le preguntó cómo justificaba el incremento de su
patrimonio a casi ochenta millones de pesos en ocho años. Y la respuesta fue: “No
sé de dónde sacás esas cifras, pero no ha sido así. Ha habido denuncias en mi
país acerca de estas cuestiones, no sólo para mí sino también para otros
funcionarios y la verdad es que la Justicia lo ha determinado. Toda la vida he
tenido una determinada posición económica, que no fue desde que llegué a la
Presidencia. Todo el mundo sabe que siempre he ejercido la profesión
libremente. Mi estudio jurídico era uno de los más grandes y puedo dar cuenta
de todos y cada uno de mis bienes y lo he hecho a través de pericias y de cosas
que me he visto obligada a hacer como cualquier ciudadana. En cualquier lugar
uno es inocente hasta tanto es declarado culpable. (…) Los números que manejás,
infórmate bien, no son ésos. Tengo una determinada posición económica que ha
sido producto de que he trabajado toda mi vida y he sido una muy exitosa
abogada. Ahora soy una exitosa Presidenta también”. Hay en esta respuesta
distintos aspectos para analizar. El primero es la afirmación de que “todo
el mundo sabe que siempre he ejercido la profesión libremente. Mi estudio
jurídico era uno de los más grandes”. Justamente ocurre lo inverso a lo
afirmado, ya que se desconoce todo antecedente laboral de la presidente como
abogada. El C.V. oficial publicado por el Senado de la Nación, detalla la
siguiente carrera política:
2005 :Senadora Nacional por la provincia de Buenos Aires.
2001- 2005: Senadora Nacional por la provincia de
Santa Cruz.
1998: Convencional Provincial Constituyente en la
provincia de Santa Cruz.
1997-2001: Diputada Nacional por la provincia de
Santa Cruz.
1995-1997: Senadora Nacional por la provincia de
Santa Cruz (renuncia a su cargo para asumir como Diputada Nacional)
1995: Diputada Provincial reelecta (renuncia a su
cargo para asumir como Senadora Nacional).
1994: Convencional Nacional Constituyente por
Santa Cruz.
1993: Diputada Provincial reelecta.
1989: Diputada Provincial en la provincia de
Santa Cruz.
Es decir que en los últimos 23 años, CFK fue en
forma ininterrumpida legisladora provincial y nacional en dos provincias, Santa
Cruz y Buenos Aires. Durante este largo período -y como es obvio- cabe presumir
que estuvo dedicada full time a su actividad legislativa y desde el
2007, al ejercicio de la Presidencia. No se advierte entonces ninguna
posibilidad fáctica -y tampoco existe información pública- de que mientras era
legisladora actuase a la vez como una exitosa abogada y, menos todavía, que
fuera la cabeza de “uno de los estudios jurídicos más grandes”. Sus
declaraciones juradas patrimoniales durante este largo período tampoco
reflejarían ingresos provenientes de la actividad profesional.
Cabe analizar a continuación si la presidente
pudo haber tenido tan exitosa carrera profesional antes de 1989. La realidad es
que, en 2003, cuando Néstor y Cristina Kirchner llegaron a la Casa Rosada,
reconocieron en sus declaraciones juradas $ 6.851.810. En su declaración
correspondiente al 2009, CFK juró tener $ 55.537.290, casi $ 10 millones más
que el año anterior. Esto muestra la evolución de su economía ante el gran
salto de 2008, cuando su patrimonio creció 158% respecto de la anterior
declaración. Y en su última declaración jurada, correspondiente al 2011,
reconoció un patrimonio total propio de 39.572.589 pesos y que el ex presidente
le dejó como herencia poco más de 31 millones de pesos. Es la mitad de sus
propiedades, bienes, sociedades, dinero y deudas. La otra mitad se reparte
entre los hijos, Máximo y Florencia, en partes iguales. O sea, un total de 70
millones de pesos, pero de origen propio 40 millones que, con respecto a su
mitad de los 7 millones declarados por el matrimonio en el 2003, representan un
incremento de mas del 1100%.
Y bien, ¿puede aceptarse que este incremento se
originó en una actividad profesional de la cual no hay indicios en ninguna de
sus declaraciones juradas como legisladora? Menos creíble sería todavía que
este enriquecimiento vertiginoso a partir del 2003 sea el producto del
ejercicio de la abogacía antes de 1989, cuando ella no ejercía ningún cargo
público. Si bien los honorarios profesionales a veces demoran largos años en
cobrarse, estamos hablando de un cuarto de siglo de diferencia, lo que
convierte en absurda esta posibilidad. Queda por demás claro, entonces, que el
impresionante crecimiento patrimonial de los Kirchner se inicia a partir del
2003 y que no se conectaría en modo alguno con una improbable actividad profesional.
Por otra parte, en diciembre del 2009, el Juez Federal Norberto Oyarbide
sobreseyó a los Kirchner en la causa en la que se investigaba su presunto
enriquecimiento ilícito durante 2008, año en el que su patrimonio declarado se
multiplicó como nunca, hasta aumentar 28 millones de pesos. En el fuerte debate
que se generó por las discrepancias entre los peritos que intervinieron en el
tema, no hubo siquiera una mención a la existencia de ingresos originados en
honorarios profesionales.
Razones ocultas
La respuesta a lo ocurrido en Harvard parece
darla el sentido común. La presidente utilizó un evento internacional en una de
las principales universidades del mundo para mentir acerca de las causas del
crecimiento de su patrimonio. Es que si hubiera dicho la verdad, sería obvio
que los supuestos ingresos de su hipotético estudio jurídico jamás fueron
declarados ante la AFIP, lo que podría configurar los delitos de falsedad
ideológica y evasión impositiva, entre otros. En un país en el cual las
instituciones funcionan normalmente, la AFIP ya debería estar reclamándole a la
presidente que explique de qué se tratan estos ingresos de su estudio jurídico
que no aparecen en ninguna de sus declaraciones juradas. En definitiva, estas
afirmaciones hechas en Harvard reabren la puerta para el debate sobre el
presunto enriquecimiento ilícito del matrimonio Kirchner. En efecto, ¿por qué
CFK no contestó la pregunta ateniéndose a lo expresado en sus declaraciones
juradas durante el período de su mayor enriquecimiento, es decir, desde el
2003? De las mismas surgen las supuestas causas de este crecimiento
patrimonial, o sea, la compra y venta de inmuebles, la adquisición de terrenos
a valores que no existen en el mercado, y una destacable capacidad para hacer
rendir los alquileres y los depósitos a plazo fijo. El hecho de que la
presidente haya preferido mentir a sostener en un foro internacional las mismas
explicaciones que dio en sus declaraciones juradas estaría indicando lo difícil
que es defender estas últimas. A todo esto se le suman, además, las conocidas
sospechas acerca de su título de abogada, que motivaron varias presentaciones
judiciales que no aclararon el tema. El episodio de Harvard recrea entonces una
paradoja más de las tantas que caracterizan al kirchnerismo. A partir de que el
año pasado la AFIP pasara a controlar el mercado cambiario, este organismo pasó
a tener una gravitación inédita en la vida de los argentinos. En el medio de
esta enorme presión impositiva, la presidente acaba de decirle al mundo que el
crecimiento de su fortuna no coincide con sus declaraciones juradas. En el
colmo del doble discurso, respondiendo también en Harvard acerca del cepo
cambiario, ella advirtió que los que tengan dólares no declarados van a tener
que justificar el origen de los mismos.
Fuente: Informador Público
Hola Emilio. Mintió pues todo su accionar está sustentado en mentiras. ¡Esto es un efecto bola de nieve! Si dice la verdad, debiera estar presa. Su enriquecimiento está justificado ya que arrasa con todo. ¿Por qué no explicó como dejaron Santa Cruz? Pero su boca la traicionó, cuando sostuvo que los piquetes en Santa Cruz comenzaron en el 95... ¿No estaban ellos en esa época? Los ingresos de su estudio jurídico según leí en un artículo, eran de poco más de $1.000 ¿Cómo llegaron a 80 millones? ¿Cómo compraron todas las propiedades que tienen en Santa Cruz y en todos lados? ¿Cuanto nos salió el fastuoso Mausoleo Kirchnerista del Calafate? ¿Quien es el dueño de Ciccone? En fin, en Harvard podía haber explicado todo eso. En cambio ya vi que hicieron una publicación para esmerilar al chico de General Pico de la Pampa, por ser del PRO. ¿Hasta cuando vamos a permitir que esta gente nos falte el respeto y subestime nuestra inteligencia? Saludos y muy buena página.
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