En la foto: Adolfo Hitler en 1933, cuando tenía el apoyo de las masas y fue financiado por los mismos judíos alemanes.
El revisionismo histórico busca reconstruir la situación real del tiempo que se analiza, en base a documentación contrastada con análisis diversos, estudiando cada dato de manera científica. Estudiar la II Guerra Mundial y el régimen Nacional Socialista bajo dicha óptica no es un acto de antijudaísmo, ni de apología de un régimen condenado en sus desviaciones por el Magisterio de la Iglesia Católica, sino de investigar la verdad histórica, porque "la primera Ley de la Historia es no atreverse a mentir".
El revisionismo histórico busca reconstruir la situación real del tiempo que se analiza, en base a documentación contrastada con análisis diversos, estudiando cada dato de manera científica. Estudiar la II Guerra Mundial y el régimen Nacional Socialista bajo dicha óptica no es un acto de antijudaísmo, ni de apología de un régimen condenado en sus desviaciones por el Magisterio de la Iglesia Católica, sino de investigar la verdad histórica, porque "la primera Ley de la Historia es no atreverse a mentir".
Según informó el Diario La Prensa de Argentina el día 18 de enero de 1997, reproduciendo un despacho de la Agencia ANSA desde Moscú, el semanario ruso PRAVDA dedicó el día anterior (17 de enero de 1997) "una página entera a negar el exterminio nazi de millones de judíos y dio una versión descaradamente antisemita de las tesis de algunos historiadores occidentales revisionistas".
LA "CUESTIÓN WILLIAMSON"
En medio de una polémica provocada por dichos de Mons. Richard Williamson, quien afirmó que no murieron 6 millones de judíos en cámaras de gas, el Obispo debe responder actualmente ante un Tribunal alemán por tal motivo. Williamson no es "negacionista" como lo acusan los medios, sino que simplemente busca esclarecer la verdad a la luz del revisionismo histórico como metodología científica.
Muchos piensan que Williamson es alemán, y que por lo que dicen los diarios y los medios de comunicación, además es un alemán nazi. Sin embargo, nada más alejado: es un auténtico inglés británico.
El obispo lefebvrista Richard Williamson, está citado para declarar en el mes de abril ante un tribunal alemán por "negar el Holocausto", mientras que el mismo refiere las exageraciones difundidas sobre los datos históricos calificándolas de "enorme mentira", según consignó el semanario alemán "Der Spiegel". Según se difundió, dicho medio accedió a correos electrónicos internos de la Fraternidad San Pío X (¿utilizó hackers para ello?) y consigna que en los mismos Williamson descarta que perecieran seis millones de judíos.
El obispo critica en esos textos, además, que sobre ese "dato" del Holocausto "se construyó un orden mundial nuevo".
Williamson además afirma que se trasladó "a 1,3 millones de judíos deportados" de los campos de concentración de Treblinka, Madjanek, Belzec y Sobibor a la región de la Unión Soviética ocupada por el Ejército nazi, pero no perecieron en las cámaras de gas.
En una entrevista concedida a la televisión sueca desde Alemania hace más de un año, el obispo británico negó que hubiese habido un asesinato sistemático de seis millones de judíos en las cámaras de gas durante el Tercer Reich.
Williamson no negó la matanza de judíos, no obstante ello se le ha iniciado un proceso ya que la negación del Holocausto en Alemania constituye un delito penal y la fiscalía de Ratisbona (sur de Alemania) propuso a Williamson una multa de 12.000 euros contra la que éste interpuso un recurso, forzando que su caso fuese objeto de un proceso penal.
La justicia alemana en su caso deberá analizar los argumentos y documentación que aportará Williamson en su descargo, y estimar la existencia de la corriente del Revisionismo Histórico, y pronunciarse sobre la misma.
¿UN INGLÉS DISFRAZ DE NAZI?
En las series y películas de Hollywood se pueden ver fiestas de disfraces donde lo más común es ver al diablo... ¡y nadie dice nada! Alguno podría vestirse de los Sultanes Abdul Hamid II o de Mohamed V del Imperio Otomano ¿quién los conoce? o de Ismael Enver, Mehmet Taleat, y Ahmed Djemal ¿Alguien diría algo? ¡Si ni siquiera saben quiénes son! Nadie diría nada, porque ni el recuerdo queda de tales nombres extraños para la cultura occidental, a pesar de que son algunos de los nombres de los más crueles y sanguinarios genocidas del Siglo XX.
El comentario vale para la siguiente anécdota: muchos aun recuerdan que en enero del año 2005 hubo un gran revuelo mediático porque el Príncipe Harry de Inglaterra, hijo menor del Príncipe Carlos y de Lady Di, con 20 años de edad se disfrazó de nazi, concurriendo a una fiesta con un uniforme del ejército de Hitler y un brazalete con la esvástica.
"Harry el Nazi, Joven Hitler", tituló en tapa el tabloide The Sun, junto con la foto del príncipe, con una cerveza en una mano y un cigarrillo en la otra, vestido con un uniforme color caqui y un brazalete rojo con el emblema nazi. Según The Sun, quiso disfrazarse de soldado del "Afrika Korps", el destacamento alemán en Africa.
La comunidad judía internacional manifestó acerca de su disfraz: "Es un acto vergonzoso, que demuestra una total falta de sensibilidad hacia las víctimas del Holocausto", declaró el Centro Simon Wiesenthal, una de las organizaciones judías más importantes en el mundo. El príncipe Harry siempre fue conocido por sus excesos y sus borracheras... y se le ocurrió disfrazarse de nazi... Habría sido más fácil que se disfrazara por ejemplo de Ismael Enver, uno de los "jóvenes turcos" cuyo origen debería ser investigado a riesgo de ser contraproducente el descubrimiento.
En noviembre de 2004, el príncipe vino a la Argentina para practicar polo. Pasó sus días en una estancia de Lobos, con su rubia novia sudafricana de 19 años y debió irse antes de tiempo por las reiteradas transgresiones a la custodia que hacía durante sus salidas.
En la foto: El príncipe Harry de Inglaterra disfrazado de nazi provocó un gran revuelo, mientras el New York Post titulaba "Un Nazi Real. El shock del Príncipe Harry con una esvástica"
EL PRAVDA REVISIONISTA
Según la información del Pravda, el revisionismo de algunos historiadores occidentales también tendría una tendencia "semita", lo cual llama la atención.
La publicación rusa indicaba que "el número total de judíos muertos por los nazis fue de 500 mil, y las comunidades hebreas tuvieron un papel de primer orden a la hora de llevar al poder a Adolf Hitler".
Según Ansa, el autor de la nota, Valentín Prussakov, indicó que "el nazismo hizo un gran servicio al sionismo que logró acapararse Palestina". La nota indica que en 1996 la publicación "se separó, entre rumores de financiaciones de países árabes extremistas, del homónimo diario del Partido Comunista", y que "sigue fiel a una línea de izquierda que en la geografía de lapolítica rusa mezcla comunismo y nacionalismo.
REVISIONISMO EN RUSIA
Traducimos del inglés a continuación un artículo titulado "Un importante avance del Revisionismo en Rusia", del Instituto de Revisionismo Histórico de la página:
http://www.ihr.org/jhr/v16/v16n4p36_Weber.html
Bajo el titular de primera plana, "El mito del Holocausto: La verdad sobre el destino de los Judios en la Segunda Guerra Mundial", el periódico Vestnik Russkii Moscú (Mensajero Ruso) ha dedicado un número especial de la visión de la corriente revisionista sobre el análisis de la historia de exterminio del Holocausto.
Escrito por el historiador y educador suizo Jürgen Graf, este es el primer trabajo serio de escuela revisionista sobre el Holocausto, que recibe distribución masiva en Rusia.
Cerca de 200 mil copias fueron vendidas entre septiembre de 1996 y febrero de 1997, así como un número especial de Russkii Vestnik y un atractivo folleto de 123 páginas.
Graf en su bien organizado y cuidadosamente referenciado ensayo, echa por tierra numerosas afirmaciones específicas acerca del Holocausto, al tiempo que introduce a los lectores en la labor de especialistas del revisionismo como Robert Faurisson, Carlo Mattogno, Arthur Butz, Enrique Aynat y Fred Leuchter.
La introducción al ensayo de Graf es una nota editorial, en la primera página, en que condena los "horribles crímenes cometidos contra los judíos" por los "Hitleristas". Al mismo tiempo, sin embargo, subraya que las pérdidas de judíos durante la guerra han sido muy exageradas intencionalmente.
El editorial también introduce a los lectores en el revisionismo histórico, que no es bien conocido en Rusia.
"Sobre la base de investigación puramente académica", relata el primer párrafo, el Instituto de Revisionismo Histórico en los Estados Unidos "echa por tierra los mitos históricos". Y continúa:
La escuela de historiadores revisionistas, que existe desde hace varias décadas en Occidente, sobre la base de los documentos examinados escrupulosamente y de relatos de testigos, fue la primera en cuestionar las afirmaciones de los sionistas.
La Unión Soviética y Rusia no eran concientes de la existencia y los puntos de vista de la escuela revisionista, porque aun no se había abordado el problema de ese modo.
"Característicamente", refiere el editorial, "los principales 'argumentos' utilizados contra los revisionistas han sido cortas adaptaciones y terror", citando los casos de personas como Robert Faurisson, Thies Christophersen, y Wilhelm Ernst Zündel Stäglich."Esto por sí mismo indica que los enemigos del revisionismo simplemente no tienen ningún otro tipo de argumentos".
En el prefacio de la segunda página elogiosa al ensayo de Graf, el historiador ruso Dr. Oleg A. Platonov escribe sobre el "mito del "holocausto", es decir, que seis millones de judíos fueron presuntamente ejecutados en cámaras de gas durante la Segunda Guerra Mundial".
Este mito, continúa, "se ha afianzado en la mente de las masas con una fuerza particular", con el objetivo de alentar a los no-judíos a "un sentimiento de culpa, arrepentirse y pagar el resarcimiento". Y continúa: El mito del Holocausto es un insulto a la humanidad, porque retrata a los judíos como las principales víctimas de la última guerra, a pesar de que los judíos de hecho no surieron ni más ni menos que otros pueblos que fueron atrapados en ese conflicto asesino...
La humanidad pagó por la guerra con 55 millones de vidas humanas, en lo cual el real -no el mítico- número de judíos víctimas no fue de seis millones, sino alrededor de 500.000, según muestran los cálculos de los especialistas...
"En la onda del mito del Holocausto", añade Platonov, "el Estado de Israel se estableció de manera ilegal y en contra de la voluntad de los palestinos". Ambos, Graf y Platonov, son miembros del Consejo Editorial de esta revista del Comité Consultivo (véase el mes de mayo-junio de 1997, Journal, pp. 19-20).
Para satisfacer el apetito del público por el revisionismo en Rusia, las traducciones de numerosos escritos revisionistas se están realizando, incluyendo una edición rusa del libro de análisis de "los mitos fundadores de Israel" por el estudioso francés Roger Garaudy (revisado en marzo-abril de 1996, Journal pp. 35-36).
Este número especial de Russkii Vestnik fue citado favorablemente en el periódico Pravda de Moscú (24 de enero de 1997). El artículo del Pravda de Valentín Prussakov, "Judíos en los orígenes del Nazismo", discute el rol de los judíos y medio judíos en las fuerzas armadas alemanas durante los tiempos de guerra, y como antecedentes intelectuales del Nacional Socialismo.
Aunque el Pravda ya no desempeña el rol de liderazgo, lo hizo durante la época soviética, y sigue ejerciendo un papel influyente con lectura nacional.
"Es difícil no estar de acuerdo con la visión del historiador ruso Oleg Platonov", escribe Prussakov, quien pasa a citar el prefacio de Platonov en el Russkii Vestnik.
"obviamente, es tiempo de poner fin a la perorata del 'especial sufrimiento del pueblo judío'," concluye Prussakov.
¿Cómo el público ve el pasado, y especialmente la Historia del Siglo XX, es un aspecto crucial de la lucha actual entre los "nacionalistas" e "internacionalistas" para el futuro de Rusia (ver "El capitalismo en la Nueva Rusia", Journal mes de mayo-junio de 1997).
En Rusia, como en Estados Unidos y Europa Occidental, los "internacionalistas" promueven una interpretación altamente polémica de la historia del "Holocausto", con su sentimiento de culpa y "lecciones" para la humanidad no judía, mientras que los "nacionalistas" están interesados en fomentar una perspectiva veraz e imparcial sobre este capítulo de la historia.
LA "CUESTIÓN WILLIAMSON"
En medio de una polémica provocada por dichos de Mons. Richard Williamson, quien afirmó que no murieron 6 millones de judíos en cámaras de gas, el Obispo debe responder actualmente ante un Tribunal alemán por tal motivo. Williamson no es "negacionista" como lo acusan los medios, sino que simplemente busca esclarecer la verdad a la luz del revisionismo histórico como metodología científica.
Muchos piensan que Williamson es alemán, y que por lo que dicen los diarios y los medios de comunicación, además es un alemán nazi. Sin embargo, nada más alejado: es un auténtico inglés británico.
El obispo lefebvrista Richard Williamson, está citado para declarar en el mes de abril ante un tribunal alemán por "negar el Holocausto", mientras que el mismo refiere las exageraciones difundidas sobre los datos históricos calificándolas de "enorme mentira", según consignó el semanario alemán "Der Spiegel". Según se difundió, dicho medio accedió a correos electrónicos internos de la Fraternidad San Pío X (¿utilizó hackers para ello?) y consigna que en los mismos Williamson descarta que perecieran seis millones de judíos.
El obispo critica en esos textos, además, que sobre ese "dato" del Holocausto "se construyó un orden mundial nuevo".
Williamson además afirma que se trasladó "a 1,3 millones de judíos deportados" de los campos de concentración de Treblinka, Madjanek, Belzec y Sobibor a la región de la Unión Soviética ocupada por el Ejército nazi, pero no perecieron en las cámaras de gas.
En una entrevista concedida a la televisión sueca desde Alemania hace más de un año, el obispo británico negó que hubiese habido un asesinato sistemático de seis millones de judíos en las cámaras de gas durante el Tercer Reich.
Williamson no negó la matanza de judíos, no obstante ello se le ha iniciado un proceso ya que la negación del Holocausto en Alemania constituye un delito penal y la fiscalía de Ratisbona (sur de Alemania) propuso a Williamson una multa de 12.000 euros contra la que éste interpuso un recurso, forzando que su caso fuese objeto de un proceso penal.
La justicia alemana en su caso deberá analizar los argumentos y documentación que aportará Williamson en su descargo, y estimar la existencia de la corriente del Revisionismo Histórico, y pronunciarse sobre la misma.
¿UN INGLÉS DISFRAZ DE NAZI?
En las series y películas de Hollywood se pueden ver fiestas de disfraces donde lo más común es ver al diablo... ¡y nadie dice nada! Alguno podría vestirse de los Sultanes Abdul Hamid II o de Mohamed V del Imperio Otomano ¿quién los conoce? o de Ismael Enver, Mehmet Taleat, y Ahmed Djemal ¿Alguien diría algo? ¡Si ni siquiera saben quiénes son! Nadie diría nada, porque ni el recuerdo queda de tales nombres extraños para la cultura occidental, a pesar de que son algunos de los nombres de los más crueles y sanguinarios genocidas del Siglo XX.
El comentario vale para la siguiente anécdota: muchos aun recuerdan que en enero del año 2005 hubo un gran revuelo mediático porque el Príncipe Harry de Inglaterra, hijo menor del Príncipe Carlos y de Lady Di, con 20 años de edad se disfrazó de nazi, concurriendo a una fiesta con un uniforme del ejército de Hitler y un brazalete con la esvástica.
"Harry el Nazi, Joven Hitler", tituló en tapa el tabloide The Sun, junto con la foto del príncipe, con una cerveza en una mano y un cigarrillo en la otra, vestido con un uniforme color caqui y un brazalete rojo con el emblema nazi. Según The Sun, quiso disfrazarse de soldado del "Afrika Korps", el destacamento alemán en Africa.
La comunidad judía internacional manifestó acerca de su disfraz: "Es un acto vergonzoso, que demuestra una total falta de sensibilidad hacia las víctimas del Holocausto", declaró el Centro Simon Wiesenthal, una de las organizaciones judías más importantes en el mundo. El príncipe Harry siempre fue conocido por sus excesos y sus borracheras... y se le ocurrió disfrazarse de nazi... Habría sido más fácil que se disfrazara por ejemplo de Ismael Enver, uno de los "jóvenes turcos" cuyo origen debería ser investigado a riesgo de ser contraproducente el descubrimiento.
En noviembre de 2004, el príncipe vino a la Argentina para practicar polo. Pasó sus días en una estancia de Lobos, con su rubia novia sudafricana de 19 años y debió irse antes de tiempo por las reiteradas transgresiones a la custodia que hacía durante sus salidas.
En la foto: El príncipe Harry de Inglaterra disfrazado de nazi provocó un gran revuelo, mientras el New York Post titulaba "Un Nazi Real. El shock del Príncipe Harry con una esvástica"
EL PRAVDA REVISIONISTA
Según la información del Pravda, el revisionismo de algunos historiadores occidentales también tendría una tendencia "semita", lo cual llama la atención.
La publicación rusa indicaba que "el número total de judíos muertos por los nazis fue de 500 mil, y las comunidades hebreas tuvieron un papel de primer orden a la hora de llevar al poder a Adolf Hitler".
Según Ansa, el autor de la nota, Valentín Prussakov, indicó que "el nazismo hizo un gran servicio al sionismo que logró acapararse Palestina". La nota indica que en 1996 la publicación "se separó, entre rumores de financiaciones de países árabes extremistas, del homónimo diario del Partido Comunista", y que "sigue fiel a una línea de izquierda que en la geografía de lapolítica rusa mezcla comunismo y nacionalismo.
REVISIONISMO EN RUSIA
Traducimos del inglés a continuación un artículo titulado "Un importante avance del Revisionismo en Rusia", del Instituto de Revisionismo Histórico de la página:
http://www.ihr.org/jhr/v16/v16n4p36_Weber.html
Bajo el titular de primera plana, "El mito del Holocausto: La verdad sobre el destino de los Judios en la Segunda Guerra Mundial", el periódico Vestnik Russkii Moscú (Mensajero Ruso) ha dedicado un número especial de la visión de la corriente revisionista sobre el análisis de la historia de exterminio del Holocausto.
Escrito por el historiador y educador suizo Jürgen Graf, este es el primer trabajo serio de escuela revisionista sobre el Holocausto, que recibe distribución masiva en Rusia.
Cerca de 200 mil copias fueron vendidas entre septiembre de 1996 y febrero de 1997, así como un número especial de Russkii Vestnik y un atractivo folleto de 123 páginas.
Graf en su bien organizado y cuidadosamente referenciado ensayo, echa por tierra numerosas afirmaciones específicas acerca del Holocausto, al tiempo que introduce a los lectores en la labor de especialistas del revisionismo como Robert Faurisson, Carlo Mattogno, Arthur Butz, Enrique Aynat y Fred Leuchter.
La introducción al ensayo de Graf es una nota editorial, en la primera página, en que condena los "horribles crímenes cometidos contra los judíos" por los "Hitleristas". Al mismo tiempo, sin embargo, subraya que las pérdidas de judíos durante la guerra han sido muy exageradas intencionalmente.
El editorial también introduce a los lectores en el revisionismo histórico, que no es bien conocido en Rusia.
"Sobre la base de investigación puramente académica", relata el primer párrafo, el Instituto de Revisionismo Histórico en los Estados Unidos "echa por tierra los mitos históricos". Y continúa:
La escuela de historiadores revisionistas, que existe desde hace varias décadas en Occidente, sobre la base de los documentos examinados escrupulosamente y de relatos de testigos, fue la primera en cuestionar las afirmaciones de los sionistas.
La Unión Soviética y Rusia no eran concientes de la existencia y los puntos de vista de la escuela revisionista, porque aun no se había abordado el problema de ese modo.
"Característicamente", refiere el editorial, "los principales 'argumentos' utilizados contra los revisionistas han sido cortas adaptaciones y terror", citando los casos de personas como Robert Faurisson, Thies Christophersen, y Wilhelm Ernst Zündel Stäglich."Esto por sí mismo indica que los enemigos del revisionismo simplemente no tienen ningún otro tipo de argumentos".
En el prefacio de la segunda página elogiosa al ensayo de Graf, el historiador ruso Dr. Oleg A. Platonov escribe sobre el "mito del "holocausto", es decir, que seis millones de judíos fueron presuntamente ejecutados en cámaras de gas durante la Segunda Guerra Mundial".
Este mito, continúa, "se ha afianzado en la mente de las masas con una fuerza particular", con el objetivo de alentar a los no-judíos a "un sentimiento de culpa, arrepentirse y pagar el resarcimiento". Y continúa: El mito del Holocausto es un insulto a la humanidad, porque retrata a los judíos como las principales víctimas de la última guerra, a pesar de que los judíos de hecho no surieron ni más ni menos que otros pueblos que fueron atrapados en ese conflicto asesino...
La humanidad pagó por la guerra con 55 millones de vidas humanas, en lo cual el real -no el mítico- número de judíos víctimas no fue de seis millones, sino alrededor de 500.000, según muestran los cálculos de los especialistas...
"En la onda del mito del Holocausto", añade Platonov, "el Estado de Israel se estableció de manera ilegal y en contra de la voluntad de los palestinos". Ambos, Graf y Platonov, son miembros del Consejo Editorial de esta revista del Comité Consultivo (véase el mes de mayo-junio de 1997, Journal, pp. 19-20).
Para satisfacer el apetito del público por el revisionismo en Rusia, las traducciones de numerosos escritos revisionistas se están realizando, incluyendo una edición rusa del libro de análisis de "los mitos fundadores de Israel" por el estudioso francés Roger Garaudy (revisado en marzo-abril de 1996, Journal pp. 35-36).
Este número especial de Russkii Vestnik fue citado favorablemente en el periódico Pravda de Moscú (24 de enero de 1997). El artículo del Pravda de Valentín Prussakov, "Judíos en los orígenes del Nazismo", discute el rol de los judíos y medio judíos en las fuerzas armadas alemanas durante los tiempos de guerra, y como antecedentes intelectuales del Nacional Socialismo.
Aunque el Pravda ya no desempeña el rol de liderazgo, lo hizo durante la época soviética, y sigue ejerciendo un papel influyente con lectura nacional.
"Es difícil no estar de acuerdo con la visión del historiador ruso Oleg Platonov", escribe Prussakov, quien pasa a citar el prefacio de Platonov en el Russkii Vestnik.
"obviamente, es tiempo de poner fin a la perorata del 'especial sufrimiento del pueblo judío'," concluye Prussakov.
¿Cómo el público ve el pasado, y especialmente la Historia del Siglo XX, es un aspecto crucial de la lucha actual entre los "nacionalistas" e "internacionalistas" para el futuro de Rusia (ver "El capitalismo en la Nueva Rusia", Journal mes de mayo-junio de 1997).
En Rusia, como en Estados Unidos y Europa Occidental, los "internacionalistas" promueven una interpretación altamente polémica de la historia del "Holocausto", con su sentimiento de culpa y "lecciones" para la humanidad no judía, mientras que los "nacionalistas" están interesados en fomentar una perspectiva veraz e imparcial sobre este capítulo de la historia.