domingo, 4 de marzo de 2012

AGUER: HABLÓ DEL IMPUESTO ALEMÁN “A QUIENES NO TIENEN HIJOS” Y DE LA BASE BIOLÓGICA DEL FUTURO




En el programa “Claves para un Mundo Mejor” (América TV), Mons. Héctor Aguer, Arzobispo de La Plata, dedicó su habitual reflexión televisiva semanal, a comentar una decisión del partido gobernante en Alemania que “ha presentado un proyecto para establecer un nuevo impuesto” que plantea “pedir a los ciudadanos sin hijos una mayor contribución con el fin de crear una caja de ahorro para hacer frente a los crecientes costos de seguridad social que implica el progresivo envejecimiento de la población. La propuesta consiste en que los ciudadanos sin hijos pagarían la totalidad del impuesto, los que tengan un solo hijo pagarían la mitad y los que tenga dos o más hijos se verían exentos de esta carga”.

Señaló que esto “se podrá discutir” pero que “es interesante ver hasta dónde llega la afirmación de que existe un vínculo muy profundo entre ese envejecimiento de la población y las realidades económicas concretas de la organización social”.

Además explicó cómo, en muchos países, se produce “una especie de invierno demográfico” y sus consecuencias porque si bien “todos nos alegramos porque se nos promete una vida larguísima en el futuro pero ¿quién va a empujar las sillas de ruedas de los ancianos, en todo caso, si no habrá jóvenes que sostengan con su trabajo esas vidas tan largas?”.

“Como ven, este es un problema económico, social, financiero, de organización social, pero que tiene que ver con una cierta mentalidad”, que se produce “porque ha cundido, se ha arraigado, una fuerte mentalidad anticonceptiva. Eso desde hace ya décadas”.

Recordó que “en 1968, el Papa Paulo VI publicó la celebre Encíclica “Humanae Vitae” donde mostraba proféticamente las consecuencias de esa mentalidad anticonceptiva” y que dadas las consecuencias culturales y sociales, “algunos países que hace tiempo han tratado de revertir esta tendencia no lo han logrado, o lo han logrado muy parcialmente, en términos que no son significativos, y eso por el arraigo de esa mentalidad”.

“Cuando pensamos en el futuro de la humanidad tenemos que pensar en la base biológica de este futuro. Muchos países, como el nuestro, por ejemplo, no tienen una política de población”.
Mons. Héctor Aguer afirmó que “de la Argentina no podemos decir que esté entrando en el invierno demográfico pero tenemos un territorio de casi tres millones de kilómetros cuadrados con una población de cuarenta millones, cuando tendría que ser de cien millones de personas, en proporción con semejante territorio”.

Manifestó que ahora “no notamos ningún efecto grave pero dentro de cincuenta o cien años, ¿que será de nosotros?” y por eso considera que “las políticas de población tienen que ser no sólo políticas de estado sino que tienen que estar vinculadas a la evolución de las cosas, porque la mentalidad anticonceptiva no se cambia rápidamente”.

En el final agregó que “los autores de ese proyecto alemán” hacen notar “que la familia que tiene hijos hace una contribución importante al bien de la sociedad y, en cambio, los que no tienen no la hacen. Por eso, para equilibrar las cosas ellos han inventado esta posible aplicación de un impuesto”.
“Algo que parece tan íntimo y tan reservado al fuero de la conciencia, tiene que ver con la posibilidad de subsistir de toda la sociedad”, concluyó.

Adjuntamos el texto completo de la alocución televisiva de Mons. Héctor Aguer:
“En varios países europeos se registra, ya desde hace tiempo, una honda preocupación por el progresivo envejecimiento de la población y las consecuencias económicas. Incluso en la reflexión corriente de hoy día hay muchos observadores políticos que sostienen una vinculación entre ese envejecimiento de la población y la crisis económica y financiera que viven los países de Europa”.

“La relación entre la economía y el problema demográfico se advierte a partir de cuestiones indudables: ¿cómo se sostiene un sistema de seguridad social a largo plazo cuando cada vez son menos los contribuyentes y muchos más los beneficiarios? Por otra parte, en ciertos sectores de la economía que requieren trabajadores especializados, el número de nuevos ingresantes al mercado laboral no alcanza a colmar el vacío dejado por las numerosas jubilaciones. Para reaccionar ante este problema, que es muy serio, en Alemania, el grupo más joven del partido de Gobierno ha presentado un proyecto para establecer un nuevo impuesto. Es interesante ver la finalidad que le atribuyen a esta carga. La propuesta plantea pedir a los ciudadanos sin hijos una mayor contribución con el fin de crear una caja de ahorro para hacer frente a los crecientes costos de seguridad social que implica el progresivo envejecimiento de la población. La propuesta consiste en que los ciudadanos sin hijos pagarían la totalidad del impuesto, los que tengan un solo hijo pagarían la mitad y los que tenga dos o más hijos se verían exentos de esta carga”.

“Se podrá discutir esto, y yo no sé si se aprobará, pero es interesante ver hasta donde llega la afirmación de que existe un vínculo muy profundo entre ese envejecimiento de la población y las realidades económicas concretas de la organización social”.

“Se habla, en muchos países, de una especie de invierno demográfico, en el cual se está entrando. Todos nos alegramos porque se nos promete una vida larguísima en el futuro pero ¿quien va a empujar las sillas de ruedas de los ancianos, en todo caso, si no habrá jóvenes que sostengan con su trabajo esas vidas tan largas?”.

“Como ven, este es un problema económico, social, financiero, de organización social, pero que tiene que ver con una cierta mentalidad”.

“¿Por qué se ha llegado a este extremo? Pues porque ha cundido, se ha arraigado, una fuerte mentalidad anticonceptiva. Eso desde hace ya décadas”.

“Quiero recordar que, en 1968, el Papa Paulo VI publicó la celebre Encíclica “Humanae Vitae” donde mostraba proféticamente las consecuencias de esa mentalidad anticonceptiva además de establecer la inmoralidad del uso de anticonceptivos artificiales, y lo que significaba eso en el contexto de la moralidad conyugal, de la vida de la familia, en el matrimonio”.

“Pero además hay consecuencias culturales y sociales. Algunos países que hace tiempo han tratado de revertir esta tendencia no lo han logrado, o lo han logrado muy parcialmente, en términos que no son significativos, y eso por el arraigo de esa mentalidad”.

“Cuando pensamos en el futuro de la humanidad tenemos que pensar en la base biológica de este futuro. Muchos países, como el nuestro, por ejemplo, no tienen una política de población”.

“Claro, de la Argentina no podemos decir que esté entrando en el invierno demográfico pero tenemos un territorio de casi tres millones de kilómetros cuadrados con una población de cuarenta millones, cuando tendría que ser de cien millones de personas, en proporción con semejante territorio”.

“Ahora, quizás, no notamos ningún efecto grave pero dentro de cincuenta o cien años, ¿que será de nosotros? Las políticas de población tienen que ser no sólo políticas de estado sino que tienen que estar muy vinculadas a la evolución de las cosas, porque la mentalidad anticonceptiva no se cambia rápidamente”.

“Con esto no estoy diciendo que todo el mundo tiene que tener montones de hijos, sino que nuestro país y muchos otros, necesitan que nazcan muchos niños y que puedan ser criados y educados dignamente por sus familias, y que eso es de interés público”.

“Los autores de ese proyecto alemán al cual me he referido hacen notar que la familia que tiene hijos hace una contribución importante al bien de la sociedad y, en cambio, los que no tienen no la hacen. Por eso, para equilibrar las cosas ellos han inventado esta posible aplicación de un impuesto”.

“Digo, de paso, que ciertas orientaciones de educación sexual no toman en cuenta que la sexualidad tiene un fin primordial que es comunicar la vida. Se intenta, en todo caso, evitar las consecuencias indeseadas de un acceso prematuro, inconsciente, a la actividad sexual pero no se advierte que la población joven se va insertando y arraigando una mentalidad anticonceptiva”.

“Algo que parece tan íntimo y tan reservado al fuero de la conciencia, tiene que ver con la posibilidad de subsistir de toda la sociedad”.

BUENAS NOTICIAS




El pensamiento de Mons. Richard Williamson
Obispo de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X
Número CCXLII (242), 3 de Marzo de 2012

Muchos, sino todos, estimados lectores, os habréis enterado ya de las buenas noticias de Alemania de la semana pasada: el Miércoles de Ceniza la Corte de Apelaciones de Baja Baviera en Nuremberg anuló mi condenación por la Corte Regional de Ratisbona del 11 de Julio del año pasado por “incitación al odio racial”, cuando me condenaron por haber, en Noviembre del 2008, en suelo alemán, en una entrevista a la televisión sueca, expresado un punto de vista políticamente incorrecto sobre ciertos eventos históricos diferente del pensamiento comúnmente tenido. Además, la Corte de Apelaciones decretó que el Estado Bávaro debe pagar mis gastos incurridos hasta el presente por mi juicio. Todo honor a mi abogado, Prof. Dr. Edgar Weiler, cuyos argumentos ellos adoptaron, al Padre Schmidberger que me lo ha propuesto como abogado, y a Mons. Fellay que lo ha aprobado.

Sin embargo, no estoy todavía libre y blanqueado ya que los jueces de Apelaciones basaron su decisión en cuestiones de procedimiento. He aquí su conclusión: “Si una acusación legal describe actos del acusado que no son punibles (como hasta el momento), dejándol y no precisa las circunstancias concretas que supuestamente los harían punibles, entonces, por no señalar los hechos internos y externos del caso, la acusación falla en su función esencial, explicada arriba, de definir la acción por la cual el acusado está siendo enjuiciado. Caso cerrado”.

Así las cosas, en teoría, la oficina del Fiscal de Ratisbona podría corregir su procedimiento y empezar la acusación desde el vamos. Sin embargo, en la práctica, bien podría dudar hacerlo, porque los jueces de Apelaciones exigieron especificar quienes exactamente llegaron a enterarse de las palabras incriminatorias, por que medios los mismos vinieron a enterarse, cómo, exactamente, estas palabras eran propensas a turbar la paz en Alemania y, finalmente, en que medida yo habría aprobado que estas palabras fueran publicadas en ese país.

Ahora bien, la fiscalía podría fácilmente mostrar que el mundo entero, sin mencionar a Alemania, fue bombardeado con mis palabras durante un mes por todos los medios de comunicación del mundo (con el objetivo principal de obligar a Benedicto XVI a distanciarse de la Tradición Católica), pero no sería tan fácil probar el disturbio de la paz en Alemania. Además los fiscales tendrían una dificultad real para probar que yo quería que mis palabras fueran hechas públicas en Alemania dado que en el último minuto de la entrevista (accesible en YouTube) yo he expresamente deseado lo contrario. De manera que está en las manos de Dios si la fiscalía le dará o no seguimiento.

Mientras tanto, estimados lectores, no vayan a creer que alguna vez he sufrido demasiado por estos juicios en Alemania, ni tampoco que he tenido que tomar demasiado trágicamente mi exilio correspondiente de tres años dentro de la Fraternidad San Pío X. Este exilio ha sido hasta demasiado confortable, y estos juicios han tomado fin, al menos por el momento, con su suspensión total. Quisiera yo entonces agradecerles a todos vosotros que en el transcurso de estos tres años habéis rezado por mi. Yo sé que sois muchos y estoy agradecido a cada uno de vosotros. En retribución he celebrado en Enero una novena de Misas por vuestras intenciones porque, seguramente, pruebas mucho mayores nos esperan a todos nosotros.

Kyrie eleison.

SI TU ESPOSO Y TU PAPÁ SE PARECIERAN A SAN JOSÉ... ¿SERÍA DIFERENTE TU VIDA?




Por Mayra Novelo de Bardo
Autor: Catholic.net | Fuente: Catholic.net

La oración es, sin duda, el arma más poderosa que tenemos los cristianos para luchar contra los embates del enemigo

San José es el más grande de los santos después de María. Es modelo de prudencia, de obediencia heroica, de disponibilidad pronta, de justicia, desprendimiento y pureza. Padre ejemplar y esposo solícito, lleno de fe, amor y respeto por Dios y los hombres. Elegido por Dios para ser el guardián, proveedor y protector de su Hijo y de su Madre Santísima.

Si todos los esposos y padres de hoy fijaran su mirada en San José como modelo y lo imitaran en sus virtudes, nuestras familias serían más fuertes y en ellas reinaría la fe, la unidad, el equilibrio y la armonía.

Es por eso que en este mes de marzo, Catholic.net ha organizado una Novena de oraciones por los esposos y padres, que iniciará el 11 de marzo y culminará el día 19, fiesta de San José.

Lo invitamos a unirse a las oraciones y Misas que se celebrarán durante este periodo, incluyendo los nombres que desee, para que San José les sirva de modelo y él mismo les consiga de Dios las gracias necesarias para cumplir su misión como padres y esposos, de una manera ejemplar y heroica.

Pidamos por los hombres que han sabido ser fieles, por los padres abnegados, honestos, valientes, leales. Pidamos también por los esposos infieles, por los desobligados, por aquellos que han abandonado a sus esposas, hijos, familia, y por todos los que atraviesan por algún momento difícil en su matrimonio o en su misión como padres.

Para anotar a las personas por las que quiere pedir, sólo tiene que llenar el formato que encontrará en http://es.catholic.net/espososypadres/ y, de manera automática, sus nombres serán incluidos en la Novena y en las Celebraciones Eucarísticas que se llevarán a cabo con esta intención.

El texto de la Novena, puede consultarlo dando click aquí: http://es.catholic.net/aprendeaorar/688/2097/articulo.php?id=22208

Si además, desea unirse a nosotros rezando la novena en esos días, o si es sacerdote y desea ayudarnos celebrando una misa por esta intención, también puede registrarse en http://es.catholic.net/espososypadres/

La oración es, sin duda, el arma más poderosa que tenemos los cristianos para luchar contra los embates del enemigo. No desperdiciemos esta gran oportunidad de fortalecer a nuestras familias, encomendando, de manera gratuita, a nuestro papá, esposo, cuñado, compadre, suegro o cualquier otro padre de familia que esté necesitado de nuestra oración. Dios escuchará nuestros ruegos, pues es fiel a sus promesas:
Pedid y se os dará, buscad y hallaréis, tocad y se os abrirá.

Mayra Novelo de Bardo
Dirección General
Catholic.net
Comentarios al autor: mbardo@catholic.net