CÓDIGO CIVIL FEMINISTA
Título I: De los principios fundamentales.
Art. 1: Toda mujer a los efectos de ser equiparada con los hombres, será considerada por tanto un hombre, eliminándose de ese modo todo tipo de distinciones.
Art. 2: Usted es una feminista, no le importa si la aman o no la aman, ya que sólo le interesa satisfacer la lujuria, según lo enseñan todos los planes de educación sexual.
Art. 2 bis: Toda lesbiana, travesti, bisexual, transexual o lo que fuese que no sea un hombre viril completo y sin amaneramientos (de los que hay que buscar con lupa), quedan equiparados a las mujeres, y por tanto a los hombres (art. 1). A esto se llama “igualdad de género” o “igualdad de degenerados”, equiparados todos en el vocabulario y en la práctica.
Art. 3: Muéstrese siempre como lo que es: con falta de pureza, mala y sin inocencia alguna. Mienta con talento o sin él, y niegue todo hasta la muerte.
Art. 4: Regálese, véndase, alquílese, planifique su primera relación sexual, porque allí empezará su vida conforme a la legislación que se implementa en esta Ley, y comenzará la infelicidad. Siga todos los manuales de educación sexual que le indican que tiene que iniciarse precozmente en la sexualidad.
Art. 5: Nunca confíe en los hombres, ni aunque sea su hermano, su padre, su esposo o su hijo (claro que en este último caso las posibilidades quedarán reducidas porque usted toma anticonceptivos o acude al aborto)
Art. 6: Vivirá su lujuria en concubinato, uniones transitorias, uniones civiles o cualquier otra cosa prefiriendo siempre la irregularidad al matrimonio como Dios manda: con un varón y para toda la vida en unión Sacramental.
Art. 7: Si aun así, usted todavía quiere mantener un amigo varón, nunca le cuente sus estrategias de guerra, y mucho menos sus victorias. Usted será una infeliz, sin arraigo, pero podrá decir que es una feminista coherente.
Art. 8: ¿Usted piensa en un 'bonus track' con algún ex? Recuerde que 'figurita repetida no completa el álbum' (aunque las buenas se pueden coleccionar)*
Art. 9: Toda persona heterosexual, entendiéndose tal un varón que se comporte como tal o una mujer que se comporte como tal, serán considerados violatorios de los “derechos degenerados”, delincuentes, discriminadores, nazis y fascistas, y serán condenados a cadena perpetua en caso de que semejantes seres pretendan reproducirse de modo natural estando casados por “civil”, y a fusilamiento en caso de que pretendan elevar su amor a Sacramento del Matrimonio en la Iglesia Católica.
* Nota de la legisladora: La ignorancia de las leyes no sirve de excusa, si la excepción no está expresamente autorizada por la ley.
Título II: De los Hombres en General
Art. 11: Insinúese a todos los varones, para que todos la miren, la admiren y busquen estar con usted, sin importar se está sola o acompañada, la tendrán por una mujer fácil, y eso es tal cual lo que Usted será (siendo la palabra vulgar que la designa el conocido vocablo p…).
Art. 12: Cuando un hombre pide un 'tiempo', significa que quiere intentar con otra. Y si no tiene suerte, volverá con usted. Tenga presente que 'Tiempo, solo da el reloj', y que a Usted no le importan las relaciones serias, formales, para toda la vida, basadas en el amor recíproco consagrado ante Dios (que implica casarse por la Iglesia Católica).
Art. 13: Los hombres ahora vienen en formato inseguro, por lo que parecerán gallinas a la hora de declararse o de pedir matrimonio. Esta situación la beneficia, así que búsquese una gallina sin personalidad, para poder mantenerse soltera toda la vida, y sin compromiso alguno, aunque esto le cueste vivir en pecado y hasta morir en pecado mortal para ganarse el infierno.
Art. 14: Tenga siempre un titular, y un enorme banco de reservas. Usted ha recibido la educación sexual hedonista y lujuriosa, y eso es lo único que le importará ¿amor? Evítelo ¿qué era eso?
Art. 15: Nunca deje de estar en todos los lugares; si no fuera posible tenga siempre detective que le pase informaciones. Las informaciones solamente le servirán para hallar a sus víctimas, porque como usted es por naturaleza infiel, no le importa la infidelidad ajena (se debe actuar con coherencia).
Art. 16: Catalogue sus víctimas siempre, y sepa que quien tenga el más mínimo sentimiento de amor o de afecto puede caer en una angustia total al ser abandonado. Por ello, tanto usted como sus víctimas deben evitar todo sentimiento de alegría al encontrarse, todo celo, todo afecto, toda emoción y en especial evitar enamorarse, para lograr su propósito de lujuria sin sufrimiento.
Art. 17: No trate con prioridad a quien la trata como opción, mientras que sus prioridades son las opciones que jamás terminará de conocer, pues tratando de conocer a todos los hombres para ver sus diferencias puede hallar todas las cosas comunes que hay entre ellos, en lo cual hallará la indiferencia ante todos por evitar el conocimiento y el amor hacia uno en particular.
Art. 18: ¿El hombre es la cabeza...? ...La mujer es el cuello, y puede mover la cabeza como se le venga en gana (y a donde le convenga, claro está).
Título III: De los Hombres en Particular.
Art. 19: El hombre que no da asistencia, abre la concurrencia y pierde la preferencia.
a-) Repita siempre: 'No tropiece que la fila avanza'.
b-) Pero recuerde: La puerta es selectiva.
Art. 20: Si el hombre que tropezó decide regresar, repita siempre: 'saque número y espere al final de la fila'. En caso de que regrese arrepentido, no sirve ni siquiera que saque número.
Art. 21: No viva en el pasado... quien piensa en pasado es museo. Usted debe “rehacer” la vida a cada instante, porque al no tener a nadie estable tiene que comenzar de nuevo con cada uno. Claro que eso significa que usted es una frustrada que no tiene capacidad para “sentar cabeza”, pero esos son razonamientos del “pasado”, usted es más que moderna, usted es “modernista”, y sabe vivir la infelicidad y el hastío de esta vida con todo orgullo, y sostener esa posición como la única realidad posible.
Art. 22: Su hombre le dice '¿usted es demasiado para mí'? Tenga presente que: ¡ES VERDAD!
Art. 23: ¿'Príncipe azul'...? Usted es una feminista casi lesbiana, no le importan los hombres que son una cosa que se usa y se tira. Menos los hombres perfectos (aunque pueda tropezar con alguno de ellos por la vida). Evite a los Príncipes Azules, porque se puede enamorar de ellos, y el amor no cuenta en la lujuria a la que quiere someter su propia vida. Y tenga en cuenta que un Príncipe Azul jamás aceptará a una mujer lujuriosa, impura, que no llega virgen al matrimonio y que vive faltando a la castidad, que es infiel y que no da importancia al amor ni al matrimonio por la Iglesia Católica.
Art. 24: Ingenie alguna estrategia para pasar al frente del su víctima en cuestión, sólo para exclamar '¡¡¡que coincidencia que usted pase por aquí!!!'.
Título IV: De las Obligaciones de la Mujer
Art. 25: Chamulle, (Hablar o escribir con intención persuasiva, pero falazmente o sin argumentos sólidos), el hombre no se percata que nosotras también podemos hacerlo.
Art. 26: Una verdadera experta nunca es sorprendida en flagrancia.
Art. 27: Detone todos los hombres, ninguno merece su consideración.
Art. 28: Registre todo: celular, cajones, auto, bolsillos, papeles... el conocimiento es dominio
Art. 29: No sea fiel nunca.
Art. 30: ¿Algún hombre la irrita? Estas son las formas de irritarlo a él:
a-) Esconda el control remoto de la tele y del mini componente.
b-) Cierre la puerta del auto con toda su fuerza.
c-) Ponga todas las cervezas en el freezer y déjelas congelar completamente.
d-) Use el espejo retrovisor del auto para maquillarse y déjelo completamente movido. Si tiene tiempo, haga lo mismo con los demás espejos.
e-) Convénzalo que usted sabe cortarle el pelo.
f-) Suba al auto con los tacos llenos de barro y refriéguelos en la alfombra.
g-) Cuando le pregunte '¿Y...? como estuvo...?', diga: 'No te preocupes por mí, yo estoy bien'.
h-) Escriba mensajes tontos en los vidrios empañados del auto.
i-) Corte la luz 'accidentalmente' en medio del partido de fútbol, sobre todo cuando el relator se entusiasma indicando que están por meter un gol.
Art. 31: Usted es una mujer independiente: trabaja, se mantiene a sí misma, y gana un salario muy elevado, por lo cual un hombre es accesorio en su “status” y “nivel de vida”. Nunca se preocupe por los varones, no les preste atención, y sométalos a que cumplan las labores de la casa. Si usted es la “macha”, que él también lo sea, que es un principio correlativo del art. 1 de la presente Ley.
Título V: De la anticoncepción y el aborto
Art. 32: Usted busca el sexo y la lujuria, y por tanto odia todo aquello que se lo impida, incluyendo los posibles hijos nacidos de las furtivas y efímeras relaciones, por lo cual el homicidio es aceptado en pos de la causa de su vida.
Art. 33: Usted utiliza anticonceptivos, no le importan sus contraindicaciones (y jamás se le va a ocurrir leerlas del prospecto), y como vive “el momento” no le importan las consecuencias que tendrán a largo plazo en su propia biología.
Art. 34: Usted por el artículo 1 es un hombre, equiparada a un hombre, y por tanto no tiene sentimientos femeninos, no es sensible ni tiene sentimientos maternales, por lo cual no aprecia la vida concebida en su vientre y no teme asesinarlo
Art. 35: No solamente el amor es una palabra desconocida para Usted respecto de los hombres, sino también respecto del ser concebido en su vientre, sea varón o mujer, y por eso no tiene el más mínimo afecto y es capaz de tomar las píldoras anticonceptivas e incluso de abortarlo.
Art. 36: A Usted tampoco le molesta operarse para no poder tener hijos, sabiendo que es posible que tales operaciones sean irreversibles.
Art. 37: A Usted no le importan las consecuencias de los anticonceptivos ni de los abortos, y si el día de mañana quiere tener hijos y no puede, no importa, quedará sola pero habiendo vivido todo lo que usted quiso: la lujuria, más lujuria y que ningún hombre haya visto en Usted más que un objeto de lujuria.
Art. 38: Usted considerará como “reprimida”, “puritana”, “mojigata”, “tontita”, “beata” y ridiculizará y se burlará de toda mujer que quiera llegar virgen al matrimonio casándose con un varón que la ama por la Iglesia Católica deseando tener una familia numerosa para dar gracias a Dios que es Amor con mayúsculas. Usted es “científica”, “inteligente”, “profesional” y no presta atención a lo que digan esas ignorantes que viven felices, y que desconocen que el sentido de la vida es la lujuria y la infelicidad.
Art. 39: No se arrepienta nunca, evite a los sacerdotes, a la Iglesia Católica, acordarse de Dios, y también evite los funerales que le hacen pensar que un día se acabará la lujuria y que llegará el Juicio Particular y su alma irá al infierno. Usted prefiere adelantar el infierno en esta vida viviendo con placer su egoísmo, su lujuria y su falta de amor, para prolongarlo eternamente después de morir en la angustia de estar alejada del Amor de Dios.
Art. 40: Usted debe convertirse en una militante anticatólica, degradarse lo máximo que pueda y atacar en toda oportunidad a la Iglesia Católica, porque usted no puede ver a nadie viviendo feliz, y por tanto debe hacer extensiva su propia infelicidad y resentimiento a toda la sociedad. Su orgullo le impide acercarse a la Iglesia Católica, y la gente católica que vive Feliz no tiene derecho de serlo.
Art. 41: Usted tiene asco a concebir un hijo con un varón de modo natural. Por eso, recurre a la reproducción artificial, o incluso al alquiler de vientres humanos o transplantes embrionarios para evitar 9 meses de improductividad laboral. Usted es una “macha”, que en pos de la igualdad de los sexos quiere también abolir toda ley laboral beneficiosa a la mujer, ya que se trata de una discriminación. ¿Quién se cree el legislador heterosexual que es él para “conceder beneficios” laborales a las mujeres? ¿O acaso las mujeres son menos que los hombres?
Art. 42: Si usted tiene todo el derecho de vivir la lujuria y de hallar la infelicidad hasta el grado de la locura misma en sus relaciones, nadie tiene derecho de vivir haciéndole notar que su camino está equivocado. Porque la infelicidad debe ser ley, nadie debe vivir como el Evangelio indica y alcanzar la Felicidad.
TÍítulo VI: De las disposiciones de éste Código
Art. 43: A partir de su entrada en vigencia, las leyes se aplicarán aun a las consecuencias de las relaciones jurídicas existentes.
Art. 44: Las leyes del presente, tienen efecto retroactivo y su infelicidad asegurada.
Art. 45: De forma. Notifíquese, Comuníquese, Archívese.