Por Emilio Nazar Kasbo
Hoy se llama despectivamente
"revisionista" a quien pretende investigar datos históricos de modo
integral e interdisciplinario, y que no otorga alcances teológicos
extracatólicos a las cuestiones históricas, es decir, interpreta hechos
históricos aquellas que señalan la Providencia de Dios en los hechos, tal como
enseñó en una Encíclica Pío XII. El único alcance teológico es el católico. A
su vez, existe una corriente materialista que no contempla los hechos
teológicamente, sino que se reduce a una interpretación socioeconómica de los
hechos.
Veamos: un chiste de judíos
contado por un judío es un chiste de judíos; un chiste de judíos contado por un
no judío, es "antisemitismo" ¿Por qué cambia la naturaleza del chiste
dependiendo de quién lo dice? Hay una explicación: el no judío es considerado
como "no humano", y por tanto sin derecho de referirse a los
"seres humanos" (que vendrían a ser exclusivamente los judíos).
Del mismo modo, un historiador
judío escribiendo sobre la Segunda Guerra Mundial es un historiador científico;
pero un historiador no judío escribiendo sobre el mismo tema, sobre todo con un
punto de vista disidente y basado en datos concretos, confrontándolos interdisciplinariamente,
es un “antisemita”.
Afrontar la muerte como católico
con Esperanza en la Bienaventuranza, es el modo cristiano de morir a esta
vida... qué contraste con el resto, con los no católicos que carecen del
conocimiento cabal transmitido por la Tradición eclesial.
¿Era Hitler el
"Anticristo"? No. Pudo estar poseso, lleno de gnosticismo y
esoterismo anticatólico, pero ha sido calificado como el peor personaje de la
historia de la humanidad por efecto de propaganda, cuando fue responsable de
una atrocidad más del mundo (que obviamente no fue la única ni la más
multitudinaria, ni la primera... y cuya cifra se impone como un dogma, en lo
que sí se halla una originalidad).
En las Jornadas de San Bernardo,
escuché una vez a uno de los disertantes explicando que la pornografía que hoy
se difunde incluso en las escuelas, era nada comparado con lo que difundían los
nazis en los países bajo su dominio (claro, esto fue antes de la imposición del
putimonio, por lo que creo que hoy se quedaría corto, ya que Néstor-Cristina lo
superaron).
El hecho paradigmático para juzgar
a los revisionistas históricos, es la figura de Adolfo Hitler. ¿Es acaso éste el
centro de la Historia? ¿Quién convirtió a Hitler en el corazón de la Filosofía de la Historia, en el ser más despreciable de la Humanidad, mucho más que Judas Iscariote?
¿Cuántos judíos había en 1937 en
todo el mundo? ¿54 millones? ¿30 millones? ¿10 millones? Saquemos las
cuentas... y automáticamente nos convertiremos en revisionistas.