lunes, 27 de febrero de 2012

GENERAL BELGRANO: EL GRADO MILITAR DEL PATRIOTA

 
Usted, MI GENERAL lo tiene bien ganado el grado de GENERAL porque con su honor, su humildad, y devocion por la PATRIA lo dio todo por ella sin pedir nunca nada a cambio   

PRESENTE GENERAL aunque algunos..... le  digan doctor........


¡Viva la PATRIA!
VIVA EL GENERAL BELGRANO
uno de los padres de la PATRIA
creador de la bandera NACIONAL
   
 ¡CÓMO LES DUELE A MUCHOS POR SU ODIO  
NOMBRAR A UN GENERAL por su rango 
aunque haya servido lealmente A SU PATRIA 
y llevado con HONOR su uniforme!

BREVE RESEÑA SOBRE EL CENTRO DE ESTUDIOS MANUEL BELGRANO DE LA PLATA




Una iniciativa feliz reunió a un grupo de " quijotes convencidos " del valor de la Voz Patria en una casa de la ciudad de La Plata, en los primeros días de julio de 1982.
Se reunieron entonces el dueño de casa, Dr. Hugo Perugini, su esposa, la escribana Gladys Acosta, el también escribano Ángel Luis Zappa, el Dr. Juan Torraca, Juan Marchioni, Rodolfo Arena, C. Pereyra, y J.M. Panei, los que se propusieron fundar un Centro de Estudios históricos y geopolíticos con la intención de dejar huellas de un pensamiento nacional, con raíces en nuestra historia, al margen de las estériles discusiones de los partidos políticos.
Días después, el escribano Zappa y el Dr. Perugini ofrecieron al Prof. Juan José Alonso Grela la dirección de estudios de la joven institución, que se puso bajo la custodia de la Virgen generala de nuestro Ejército, Nuestra Señora de las Mercedes.
Años mas tarde se le dio partida oficial de nacimiento a esta asociación sin fines de lucro, que fue bautizada con el nombre que aun conserva: Centro de Estudios General Manuel Belgrano  adaptando el estatuto tipo de de la dirección de personas jurídicas de la Provincia de Buenos Aires.
Su primera Comisión Directiva conoció los nombres de Néstor Hugo Perugini, Ángel Luis Zappa, Manuel Lagrange, Bartolomé Pablo Balaguer, Oscar Peri, Enrique Pizarro, Rodolfo Arena, Juan Torraca, Ángel Gatto, Gladys Acosta, Elsa Tyrrell, Ricardo Díaz y Miguel Viglioco.
La curiosidad publica, descubrió nuestro nombre, cuando en noviembre de 1982, en la Casa de España de nuestra ciudad, el doctor Federico Ibarguren- emérito profesor de nuestra Universidad Nacional, investigador incansable y estudioso de nuestra historia Patria- así lo hizo saber a los concurrentes.
En dicha disertación brindó una estupenda lección sobre la "historia del liberalismo argentino ", en la oportunidad donde también hablaron el primer presidente del centro, Dr. Ángel Luis Zappa y el profesor Juan José Alonso Grela, director de estudios del instituto.
En aquella conferencia del profesor Ibarguren, ya nos contaba todo lo que amargamente hoy vemos cristalizado en nuestros días, por lo que  en nada nos sorprende este aciago presente.
Aquellas esclarecidas y proféticas notas, no estaban desprovistas  de la esperanzada reacción que nos redimiera, empeñados en el logro de una Nación con destino histórico.
Con el paso del tiempo se fueron sumando a nuestro Centro personas que compartían nuestro interés y que también es preciso mencionar: el Dr. Jorge Galarza, el Prof. Mayeregger, el Dr Pablo Bava Busalino, el Ing. Rubén Cáceres, el Prof. Gilbert París, el Dr. Nicolás Vidal, Rv Padre Gustavo Seguí, Monseñor Juan Carlos Ruta, Omar Ferrer, J. Lafrossia, José Rafael Olmedo, el Dr. José Gattó, el Dr Edmundo París, el Dr. Legnani y la Dra Chinda Brandolino, solo por destacar a algunos.
En la actualidad son otros los nombres que todos los lunes se siguen reuniendo, pero hay uno que sigue inalterable como si fuera el primero de los días: el Prof. Juan José Alonso Grela, más conocido como “profesor Alonso”, alma Mater y espejo de todos los recién llegados al Centro.
Además del mencionado Ibarguren, en estos 30 años que están por cumplirse del nacimiento de nuestro Centro, y en orden cronológico por nuestra casa pasaron expositores de fuste tales como el Dr. Ricardo Alberto Paz, el Dr. Enrique Lombardi, el profesor Raúl Rey Balmaceda, el Dr. Félix Alberto Lamas, el profesor Carlos Manfroni, el Dr. Marcelo Lazcano, el Lic. Héctor Norberto Fernández, el capitán Rubén Farinella, el Dr. Carlos Alberto Disandro, el capitán de aviación Rubén Carballo, la Dr. María Delia Buisel, el Dr. Mario Gregorini, Ing. Nicolás Boscovich, el arquitecto Patricio Randle, el capitán Carlos Cohen, el ingeniero Mario Muschini Mejía, el profesor R.P. Rubén Cardozo, el capitán José Ismael Demattei, el Contraalmirante Jorge Alberto Fraga, el ing. Jorge Pedro Scalabrini Ortiz, la Prof. Diana Durán, el ex presidente de la Nación Marcelo Levinsgton, el Ing. Raúl Scalabrini Ortiz, el Dr. Roberto J. Brie, el Dr. Mario Caponetto, el Dr. Aldo Ducler, el contraalmirante Carlos Castro Madero, el Dr. Alfredo Rizzo Romano, el Sr. José A. Di Santo, el Dr. Antonio Caponnetto, el Dr. Carlos Asnaghi ,el Dr. Walter Beveraggi Allende, el contraalmirante Castro Madero, el Dr. Horacio Aragón, el Lic. Rodolfo Mendoza, el Pbro. Alfredo Sáenz, el contador Gerardo Terán, el Tte. Coronel Santiago Alonso, el Arq. Mario González Moure, el Dr. Raúl Arloti, el Dr. Julio César González, el Lic. Norberto Ceresole, el ex presidente de la Nación Juan Carlos Onganía, el Dr. Guillermo Yacobucci, el Dr. Carlos Pesado Palmieri y el Prof. Enrique Bonomi, entre otros.
Como es de imaginarse, muchos de estos “amigos  de la casa” siguieron visitándonos en reiteradas ocasiones y esclareciendo con sus magníficas alocuciones.
Mas cercanos en el tiempo nos visitaron el Dr. Rafael Breide Obeid, el Dr. Enrique Díaz Araujo, el Lic. Héctor Giuliano, el Rp. José Luis Torres Pardo, la Lic. Mónica el Río, el Lic. Manuel Soaje Pinto, Adrián Salbuchi, el Dr. Guillermo Rojas, Rubén Gioaninni, el Crio (RE) Oscar Sosa, el Arq. Miguel Ángel Viglioco y el Tte Coronel Enrique Calderón, como asimismo el Dr Octavio Sequeiros entre tantos ilustres distinguidos que nos honraron con su presencia.
Por todo lo expresado supra, es que nuestros esfuerzos se centraron en el estudio de la historia y la geopolítica, seguros de encontrar argumentos para nuestro Ser Nacional.
Entendíamos que la "existencia" de la Nación se muestra en  la " resistencia " de sus miembros interiores y a la pretensión contraria de someterla se le opone el sacrificado empeño del que se compromete con esa existencia.
Concretamente, la labor del Centro se ve reflejada cuando año tras año en las reuniones de los días lunes se preparan los ciclos de conferencias-  los viernes en la segunda parte del año- como asimismo la conmemoración mediante actos recordatorios de días claves de nuestra Patria:
 -el 2 de abril- Malvinas-
- el 25 de mayo- Primera Junta Patria-
-el 20 de junio- Día de la Bandera-
-el 9 de julio –Día de la Independencia-
-el 20 de noviembre- Día de la Soberanía-
Justamente con motivo del festejo de esta fecha es cuando prácticamente se culminan las actividades del año con la celebración en el Campo de Deportes del Colegio Santo Tomás Moro en Abasto, La Plata, donde luego de la Santa Misa se produce un desfile y salva de 21 cañonazos a cargo de “Los blandengues”, capitaneados por el Padre Raúl Sidders, para proseguir con un almuerzo y espectáculo folklórico que se extiende hasta entrada la tarde.
El Centro ofrece,  año tras año a los nuevos integrantes, a tomar la posta de que van dejando otros por el lógico paso del tiempo, esta propuesta, la de mantener vivo ese espíritu patriótico que lamentablemente los medios de comunicación intentan apagar haciendo caso omiso a lo verdaderamente importante...
El asedio exterior e interior al que ya hiciéramos mención, no lo ha doblegado aun, merito que en parte se debe a quienes han compartido el compromiso de no abandonar las trincheras nada cómodas de la Verdad y la Justicia.
Este comprometido trabajo, se enriquece en nuestro caso, con la memoria de nuestro heroico pasado, la generosidad de nuestra raza fundadora  y las riquezas venerables de nuestra Fe, acerada en el sacrificio, el dolor y el martirio.
Nuestro Centro hizo suyo un compromiso similar.
Todo eso conforma el misterio del ser, y que solo encuentra explicación posible mirado desde el ángulo de la Cruz, siendo ese por siempre nuestro único programa.
Así nació la Patria y este signo de dolor y de vida, es para nosotros, como también lo fue para el soldado de la independencia o el gaucho de la resistencia, un símbolo de una vocación que no queremos abandonar.
Solo resta agregar, que, nuestro querido Centro de Estudios entiende a la Argentina en un trance por volver a su gesta fundadora, lo cual es reivindicar su existencia, animar su cordura política y ofrecer un proyecto nacional, creíble, viable y concreto.
Nos negamos a aceptar “cualquier cosa” con tal de permanecer, solo por permanecer.
Deseamos las cosas que conducen al Bien, privilegiando el Ser, pues como nos lo enseñara Leonardo Castellani: “Amar la Patria es el amor primero y el verdadero amor, después del amor de Dios, mas si es crucificado y verdadero son sólo un amor, ya no son dos”
Saber es la clave, y entre todos los conocimientos el saber mandar es en nuestro caso el principal; por ello hemos elegido el camino de la escuela política, esto que los latinos enseñaban, era hacer silencio para que pueda incorporarse a nuestro ser, el Logos fundador.

¿QUÉ ES SER MILITAR?




Por Heriberto J. E. Román
Coronel ( R ) OIM-EA


SER MILITAR RESPONDE: Primero a una vocación. Para lo cual es o debiera ser luego de los primeros años de formación; un profesional de la guerra, pero no porque le guste “LA GUERRA”, por el contrario la debe despreciar, sino porque debe estar preparado, para desenvolverse en el caos que estas originan, para afrontarla con Valor, Heroicidad y con capacidad de adoptar rápidas decisiones por cuanto está en juego la defensa de la nación y con ello encierro a la sociedad toda.

EN TAL FORMACIÓN: Que le lleva la vida, no solo el tiempo de academia en el Colegio Militar, está todo el resto de vida activa en la cual debe ser permanentemente observado y calificado mostrando las distintas facetas útiles como profesional. El Militar debe estar espiritualmente preparado para ofrendar su vida, preparado para morir, si fuera necesario o las circunstancias le imponen hasta Morir por la Patria. El ambiente que crea el enemigo de la Nación en oportunidad de guerra impone que eventualmente deba trasponer lo que en un trabajo he llamado el “UMBRAL”, Desagradable ocasión para la cual debe estar preparado, preparado para eliminar al oponente de su Nación.

EN TODO ELLO: No está solo, tiene hombres/mujeres bajo su responsabilidad, que lo acompañan en las misiones de combate, estarán bajo su mando y por lo tanto ha de requerir estar preparado y poseer las virtudes que son esenciales para el ejercicio del mando.

Paralelamente tanto el hombre o mujer que aspira ser un profesional militar, trae en su forma intrínseca de ser, al menos dos tendencias en sus gustos y/o habilidades; un camino de educación humanista y otro técnico, ambos deben ser atendidos y satisfechos en su formación.

ES NECESARIO QUE ESTAS CONDICIONES: Sean conocidas por aquel Hombre Político Civil, que no guarda idea alguna sobre qué es ser militar, que ocupa funciones en el estado, se prepare y conozca con seriedad todos estos aspectos mencionados si pretende liderar “EL COMO” y “EL QUE” de la formación militar. NO ES EL MILITAR UN PROFESIONAL SIMPLE.

NOTA DE DIARIO PREGÓN DE LA PLATA: El militar debe tener sentido de la vida y de la muerte, tanto de la propia como de la ajena. De tal modo, su preparación espiritual es proporcionada por la Religión, sumada al espíritu patriótico. El militar católico, ha de ser un Cruzado, alguien con el espíritu templario inspirado en la chispa encendida por San Bernardo de Claraval. Esa es la verdadera complejidad militar.

CUANDO EL P. CASTELLANI DESCRIBIÓ AL CLERO ARGENTINO EN 1954



En una carta que enviara al Nuncio Zanin en el año 1954, el Padre Leonardo Castellani S.J. decía: 
   
"En la Argentina no hemos tenido pastores santos, si se exceptúa el bondadoso y un poco corto Mamerto Esquiú. Hemos tenido en cambio pastores malnacidos, pastores cobardes, pastores avarientos, pastores iletrados, pastores simoníacos, pastores embusteros, pastores calumniadores, pastores concubinarios; y lo peor de todo, pastores villanos, estúpidos o idiotas.
Yo lo pongo en tiempo pasado, S.E. es muy posible que pueda conjugar el tiempo, si, como creo, no pertenece a ninguna de esas categorías.
El diablo conoce muy bien aquello de “heriré al pastor y se dispersarán las ovejas”.
En nuestro país ha hecho una obra fina; y a consecuencia de ella, la Iglesia Argentina es un montón de ruinas, donde se esconden no pocos bichos, algunos venenosos".