sábado, 7 de mayo de 2011

LA FRASE SELECTA

Por Ricardo David Díaz

Ama y haz lo que quieras. Si callas, callarás con amor; si gritas, gritarás con amor; si corriges, corregirás con amor, si perdonas, perdonarás con amor.

San Agustín

(354-430) Obispo y filósofo

RIFIFI: CICLO DE CINE FRANCÉS

Rififi


CICLO DE CINE FRANCÉS
Idea y Dirección: JACK BOGHOSSIAN
presenta

 

 

Miércoles 11 de Mayo 19:30 Hs.

“RIFIFI”

(Chez Rififi dans les hommes)

 
Un film de Jules Dassin

 

Uno de los mayores exponentes del cine negro francés. Un imperdible clásico de increíble vigencia.

 

Auspician:

Embajada de la República de Francia - Embajada de la República de Armenia

Armenian Film Program Latinoamérica - Emerald

Entrada libre y gratuita


Centro Cultural del Colegio Mekhitarista de Buenos Aires 

 


Director: Jorge Ulises Murekian

Virrey del Pino 3511 Capital / 4552-3690 / 4554-3878

EL JUEZ PLATENSE ROZANSKI FUE DENUNCIADO POR VIOLENCIA LABORAL DESDE EL KIRCHNERISMO

Rozansky Carlos

Julio Piumato, hombre de Hugo Moyano, denunció al magistrado de La Plata Carlos Rozansky por"violencia laboral contra los trabajadores". Bajo "el disfraz de adalid y defensor de los derechos humanos, Rosansky esconde una personalidad perversa", dijo Laura Iparraguirre de UEJN.

El Diputado Nacional del FpV y titular de la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación (UEJN) Julio Piumato denunció ante el Consejo de la Magistratura al Juez del Tribunal Oral Criminal Federal N°1 de La Plata, Carlos Rozansky, quien fue el encargado de condenar por violación a los Derechos Humanos al sacerdote Christian Von Wernich y al Comisario Miguel Etchecolatz, entre otros.

Además, el sindicalista pidió la "suspensión precautoria" de Rozansky, como corolario de una serie de denuncias públicas que Piumato venía realizando contra el Juez desde hace tiempo.

"Las acciones del magistrado pueden ser configurativas de lo que la doctrina especializada considera violencia laboral en su variante de maltrato o 'mobbing' o acoso", indicó Laura Iparraguirre, secretaria de prensa de UEJN.

Esa violencia "se ha desarrollado en diferentes niveles de gravedad y han sido víctimas funcionarios y empleados, generando un medio ambiente laboral hostil", agregó.

La sindicalista explicó: "Rozansky parece considerar algunos de los juicios (por delitos) de lesa humanidad en los que ha intervenido como una suerte de pedestal mediático a partir del cual erigirse en una especie de justiciero mesiánico, cuando lo cierto es que más bien parece utilizarlos como excusas o camino para el lucimiento y protagonismo".

"El juez no se habría limitado a desplegar sus herramientas de maltrato y abuso de poder sino que llegó a dirigir sus ataques en perjuicio de los otros dos magistrados con quienes compartía en una época el tribunal. Mientras de uno cuestionaba su idoneidad profesional y lo acusaba de estar puesto por los servicios para obstaculizar el desarrollo de los juicios de lesa humanidad, del otro ponía en tela de juicio su estado de salud física y mental", añadió.

"Los hechos más graves denunciados muestran un escenario en el que fue constante la peregrinación de secretarios, muchos de los cuales se vieron forzados a retirarse, directa o indirectamente, por su hostigamiento y maltrato", sostuvo Iparraguirre.

Bajo "el disfraz de adalid y defensor de los derechos humanos,Rosansky esconde la personalidad perversa de alguien que, abusando del poder que le otorga la investidura,no duda en ejercer el maltrato o la violencia laboral", concluyó.

Cabe destacar que, al parecer, la denuncia no es referida al personal que actualmente trabaja en el Tribunal, quienes lo han defendido al Juez negando los cargos respecto a sus personas.

Según Telam, funcionarios y personal del Tribunal Oral Criminal Federal N° 1 de La Plata rechazaron las denuncias por violencia laboral efectuadas contra el titular de ese organismo, Carlos Rozanski, y aseguraron que “jamás" fueron acosados o maltratados” por ese magistrado.

A través de un comunicado entregado a Télam, evaluaron que la denuncia de Julio Piumato, titular de la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación, “describe una situación y actitud que nada tiene que ver con la realidad de nuestra actividad diaria”. “Los que suscribimos ponemos nuestro mejor esfuerzo para que las causas que tenemos a cargo, de lesa humanidad y las demás, avancen sin pausa”,precisó en el texto.

El escrito lleva la firma de Liliana Scheinkman, Eduardo Rezses, Raúl Nicora, Guadalupe Sobrado, Jimena Rodríguez, Raquel Koludrovich, Federico Aribe, Candela Abrego, Noelia García Bauza, Elcira Spina, Silvana Carus, Adriana Galetta, Darío Ojeda, Silvana Rivas y María Celeste Cumbeto.

El titular de la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación (UEJN), Julio Piumato, denunció el día viernes 6 de mayo de 2011 ante el Consejo de la Magistratura a Rozanski, por "violencia laboral contra los trabajadores", y solicitósu "suspensión precautoria".

El juez se encuentra en un congreso organizado por la Sociedad Internacional para la Prevención del Abuso Infantil y el Abandono en Denver, Estados Unidos, y realizaría un descargo sobre la denuncia, en la cual no estarían mencionados los firmantes del referido comunicado entregado a Télam, sino que sería respecto de otras personas que han estado vinculadas al Tribunal en que Rosansky ejerce su función.

“¿TE HAS HECHO DAÑO, HIJO MÍO?” EN EL DÍA DE LA MADRE

Amor de Madre

Por Plinio Corrêa de Oliveira

Es de Emile Faguet, si no me equivoco, la siguiente alegoría: “Había cierta vez un hombre joven dilacerado por una situación afectiva crítica. Quería con toda el alma a su bonita y joven esposa, y tributaba también mucho afecto y profundo respeto a su propia madre. Pero la relación entre nuera y suegra eran bastante tensas y, por celos tal vez, la encantadora joven llegó a ser tan mala, que concibió un odio infundado contra la venerable anciana. En cierta ocasión la joven colocó al marido entre la espada y la pared: o él iría a la casa de su madre y la mataría y le traería el corazón de la víctima, o la esposa abandonaría inmediatamente el hogar. Después de muchas dudas e indecisiones, el joven hombre cedió”.

Y dice Faguet que, “aquel conturbado marido, mató a aquella que le dio la vida, le arrancó el corazón de su pecho, lo envolvió fríamente en un paño y regresó apresuradamente a su casa. Pero sucedió que en el camino el caballo del joven, desbocado en loca carrera, tropezó violentamente lanzando por los aires al infeliz jinete. Caído en tierra oyó entonces él una voz que saliendo del corazón materno, le preguntaba llena de desvelo y cariño: ‘¿Te has hecho daño hijo mío?”.

Con esta cruda alegoría el mencionado autor quiso destacar lo que el amor materno tiene de más sublime y conmovedor: su desinterés completo, su entrega gratuita, su ilimitada capacidad de perdonar. La madre ama a su hijo cuando éste es bueno. Sin embargo, no lo ama sólo por ser bueno. Lo ama también aunque sea malo. Lo ama simplemente por ser su hijo, carne de su carne, sangre de su sangre. Lo ama generosamente sin esperar ninguna retribución. Lo ama desde el propio vientre y en la cuna, cuando todavía éste no tiene capacidad de merecer amor que le es prodigado. Lo ama a lo largo de su existencia ya sea cuando ascienda al auge de la felicidad y de la gloria, o cuando ruede por los abismos del infortunio y hasta del crimen. Es su hijo, y eso es suficiente.

Este amor, altamente de acuerdo con la razón, tiene en los padres también, algo de instintivo. En cuanto instintivo, es análogo al amor que la providencia puso hasta en los animales por sus crías. Para medir la sublimidad de este instinto, basta decir que el más tierno, el más puro, el más soberano y excelso, el más sacro y sacrificado de los amores que existió en la tierra, el amor del Hijo de Dios por los hombres, fue por Este comparado al instinto animal. Poco antes de padecer y morir, lloró Jesús sobre Jerusalén, diciendo: “¡Jerusalén, Jerusalén, cuántas veces quise yo reunir a tus hijos como la gallina reúne a sus pollitos debajo de las alas, y tu no quisiste!“.

Sin este amor no hay paternidad o maternidad digna de este nombre. Quien niega este amor en su excelsa gratitud, niega por lo tanto la familia. Es este amor lo que lleva a los padres a amar a sus hijos más que a otros -de acuerdo con la ley de Dios- y desear para ellos con afán una educación mejor, una instrucción mejor, una vida futura estable, una superación verdadera en la escala de todos los valores, inclusive los de índole social. Para esto los padres trabajan, luchan, economizan. Su instinto, su razón, los dictámenes de la propia Fe, los llevan a asumir tal actitud. Acumular una herencia, por ejemplo, para ser transmitida a los hijos, es un deseo natural de los padres. Negar la legitimidad de ese deseo, es afirmar que el padre debe tratar a su hijo como a un extraño. Es destruir la familia.

Fuente: Acción Familia

“TOLERANCIA INTERNACIONAL”, LA ONG PROVIDA DEL FUTURO

Tolerancia Internacional

Por Emilio Nazar Kasbo

Seguramente, todos los argentinos festejarán el 14 de julio. No por la Revolución Francesa, precisamente, sino por la revolución p...

Un tiempo de esfuerzos, de “logros provida”, de manifestaciones, de reuniones de ONG's, para que en el año 2080 alguien, en un supremo acto de "martirio" presente un papelito sellado ante los legisladores (todos "casados" por putimonio para ese momento), para salir "escrachado" en los diarios como resabio de una cultura "putifóbica" del Siglo XX que quedó atrás.

Sí: en el 2080 tras haber optado por la vía democrática de la partidocracia, la sociedad entera sólo conoce el putimonio, y no concibe otra cosa.

¿Qué es un católico en ese tiempo futuro? Un pus, un simple pus que hay que reventar, una lacra social que no acepta el relativismo y que "está todo bien", sobre todo después de que en el 2034, tras la re-re-re elección del oficialismo gobernante se aprobó el "putimoniobestial" (y para el 2080 ya hay varios legisladores casados con sus propias mascotas, elevando su "amor" a institución civil, es más, hay uno casado con una araña africana a la cual ha dejado toda su herencia en un testamento!)

Hubo en el año 2010 alguien que dijo que la vía democrática no servía para solucionar el tema. Pero todos le dieron la espalda. Esa persona había afirmado que la vía partidocrática estaba vedada por el grado de contaminación y la lentitud que implicaría lograr los cambios, y que por tanto debía desarrollarse una organización social, económica y cultural católica de modo independiente y sin vinculación con el Estado, pero jerárquicamente organizada. Esto sonó a ridiculez a la gran mayoría, es más, sonó a algo "desactualizado" por la "velocidad de los cambios de la vida moderna que hay que afrontar".

Olvidaban tales críticos que en la Historia de este mundo solamente hay tres tiempos: Antes de Cristo, Durante la presencia de Cristo, y Después de Cristo (aguardando su segunda venida en cualquier momento). Por lo tanto, no hay diferencia alguna entre el instante de la Resurrección de Cristo, los 20 años que siguieron a la Resurrección, o los 20 Siglos que después transcurrieron: todo es parte de un mismo tiempo en el cual no hay "progreso" sino alejamiento o acercamiento al único Dios Trinitario, tanto en lo personal como en lo social.

¿Velocidad de los cambios de la vida moderna? ¿qué diferencia hay en los vicios actuales de aquellos que existían en el Siglo III después de Cristo? Pues ninguna. El mismo adulterio de Herodes criticado por San Juan el Bautista, es el que vive cualquier adúltero... la misma gula, la misma ambición, lujuria, envidia, fornicación, avaricia, son todos los mismos vicios. ¿qué diferencia hay? Pues ninguna, sólo que hay gente embobada por la TV y la computadora que ha renunciado a pensar, tanto como antes renunciaban a pensar los que concurrían al Teatro o al Circo Romano.

Sí: esos fueron los críticos, los que renunciaron a pensar. ¿Tenían razón? Veamos: eran más en el 2010, y se impusieron con el relativismo y con el "frente ecuménico de diálogo inter-religioso" porque "eran mayoría" entre los pocos católicos que quedaban en aquél tiempo. Pero ahora, el el 2080 muchos de los que criticaron tienen a sus hijos como miembros de "Tolerancia Internacional" (la ONG que se creó para la defensa de la "tolerancia", fruto de grandes esfuerzos y labores). Desde allí buscan reivindicar el putimonio "tradicional", porque el "putimoniobestial" es ir contra la la unión del amor humano entre sí (indistintamente si es entre putos o lesbianas como seres humanos que son, claramente distinguidos por "Tolerancia Internacional" del resto de los animales con quienes los partidarios del putimoniobestial pretenden realizar uniones).

He aquí el futuro. En el 2010 dijeron: "señores legisladores, no los vamos a votar", pero no había salida: todos los legisladores se compraban, se vendían o se alquilaban... o hasta tenían interés personal en la aprobación de leyes antinaturales. ¿Antinaturales? ¡Pero eso es algo medieval! ¿Quién dice qué es lo natural y qué es lo antinatural? ¡Esta gente que se cree que son dueños absolutos de la verdad! ¡Qué terrible, qué intolerantes! El mismo catolicismo ahora acepta nuevos dogmas: el profiláctico, la eutanasia, anticonceptivos, planificación científica familiar, manipulación genética… hoy todo el mundo lo hace, y la Iglesia Católica está a favor, con tantos teólogos de prestigio que sustentan este progreso eclesial.

Católicos ahogados en su propia tibieza, en su propia mediocridad, incapaces de dar un paso que los diarios critiquen (ese era su "martirio" en el 2010, al igual que en el 2080). ¿Martirio? ¡Martirio fue el de aquellos que acabaron crucificados cabeza abajo contra una pared por no renunciar a la Verdad Eterna de Cristo como Verbo Encarnado! Pero no, eso pertenece a tiempos antiguos, derogados. El “martirio” de hoy es viajar en el subterráneo, en el metro o como se lo quiera llamar. ¡Así lo predican los más importantes teólogos católicos de la actualidad! ¿Qué santo del Siglo XII pudo haberse referido jamás antes a este martirio de hoy, incomparablemente más sufrido que el de todos los tiempos anteriores, por ser el martirio del futuro?

Católicos: sigan así. ¿Qué quieren, que les escriba con un libelo jurídico, legal o periodístico? No, la cosa no da más que para un cuentito de ciencia ficción al que muchos darán la espalda... ciencia ficción sólo superada por la realidad que ME toca vivir (porque al parecer para el resto de los católicos todo es una cuestión subjetiva de que lo que dice y enseña la Iglesia, todo es subjetivo del que lo difunde no como verdad propia sino como Verdad de Cristo). Católicos que más juegan para el enemigo que para Cristo...

Llega un nuevo aniversario próximo del 14 de julio... seguro que seguirá Ud festejando todas las "buenas acciones" que se han desarrollado, y que sólo sirven para consolidar y reconocer el desorden antijurídico socialmente impuesto por la fuerza de una minoría en el poder.

Usted no está para nada indignado.

Usted es un demócrata que reconoce la ley de la mayoría que ahora ha establecido por medio de los representantes del pueblo que el putimonio está bien, tanto como está bien el putimoniobestial, porque las instituciones se han pronunciado sobre el tema, y para cambiar esta realidad Usted considera que hace falta una nueva mayoría que revierta esta situación. Sí, una nueva mayoría de legisladores electos en fraudulentos comicios que siempre serán además minoría en el caso de ser honestos. Serán necesarios por tanto el tiempo de dos elecciones para alcanzar esa mayoría en las cámaras, suponiendo que los cargos sean ganados en un 100% por el partido de “Tolerancia Internacional”… pero aun si eso sucediera dentro de cuatro años, ya será demasiado tarde.

Usted es un demócrata, y la democracia está para usted por encima de la Fe, porque es su dogma, es el espíritu de la institución de la que Ud, sin querer o queriendo, forma parte: "Tolerancia Internacional"

MONS. AGUER: FALTA LA PERSPECTIVA “DEL BIEN COMÚN COMO FINALIDAD PROPIA DE LA ACCIÓN DEL ESTADO”

Mons Hector Aguer

 

“Estado, Subsidiariedad y Solidaridad”

En su reflexión televisiva semanal, en el programa “Claves para un Mundo Mejor” (América TV), Mons. Héctor Aguer, Arzobispo de La Plata, comentó que “en las últimas semanas se ha venido discutiendo, en la Argentina, acerca de cual es el papel del Estado y su intervención en la vida económica” y explicó que al respecto “la Doctrina Social de la Iglesia tiene una enseñanza muy clara y muy ponderada también. Ni un intervencionismo excesivo que sofoque la libertad de iniciativa y el desarrollo normal de la economía, ni tampoco una ausencia que deje librado el campo de las relaciones económicas al poder del más fuerte”.

Destacó que ante nuestra realidad “el camino correcto requiere equilibrar en la práctica el juego de estos dos principios (Subsidiariedad y Solidaridad) para que sean efectivamente aplicados. Subsidiariedad para que el Estado no invada los ámbitos de legítima iniciativa de personas e instituciones y solidaridad para que el Estado asista a las partes más débiles del todo social, especialmente en las circunstancias más difíciles”.

Indicó que la Doctrina Social de la Iglesia señala que “la acción del Estado y de los otros poderes públicos debe conformarse al principio de subsidiariedad y crear situaciones favorables al libre ejercicio de la actividad económica. Tal acción debe también inspirarse en el principio de solidaridad y establecer los límites de la autonomía de las partes para defender a la parte más débil”.

El prelado recordó que “la solidaridad sin subsidiariedad, de hecho, puede degenerar fácilmente en asistencialismo. Pero la subsidiariedad sin solidaridad corre el riesgo de alimentar formas de localismo egoísta. Para respetar estos dos principios fundamentales la intervención del Estado en el ámbito económico no debe ser ni invasiva ni ausente sino conmensurada a las reales exigencias de la sociedad”.

También afirmó que “el problema que podemos observar en la Argentina y en algunos otros países también, es que de hecho parece que no existiera el Estado. Existen los gobiernos, los sucesivos gobiernos. En un momento determinado el Estado es el gobierno. Entonces, ni siquiera se puede hablar de políticas de Estado. Más aún, el gobierno es el ámbito de conquista de un partido, de un sector determinado. Falta, en todo caso, esa perspectiva siempre clara y necesaria del bien común como finalidad propia de la acción del estado”.

“Entonces, el problema es un problema delicadamente político, de concepción de la vida política y de la sociedad en su conjunto. Por eso esta referencia a la Doctrina Social de la Iglesia me parece capital”.

Adjuntamos el texto completo de la alocución televisiva de Mons. Héctor Aguer:

“En las últimas semanas se ha venido discutiendo, en la Argentina, acerca de cual es el papel del Estado y su intervención en la vida económica”.

“Referido a este tema, la Doctrina Social de la Iglesia tiene una enseñanza muy clara y muy ponderada también. Ni un intervencionismo excesivo que sofoque la libertad de iniciativa y el desarrollo normal de la economía ni tampoco una ausencia que deje librado el campo de las relaciones económicas al poder del más fuerte”.

“A propósito, quiero recordarles esta enseñanza en un texto magnífico de la Encíclica Centesimus Annus de Juan Pablo II, recogido en el Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia”.

“Dice así: “La acción del Estado y de los otros poderes públicos debe conformarse al principio de subsidiariedad y crear situaciones favorables al libre ejercicio de la actividad económica. Tal acción debe también inspirarse en el principio de solidaridad y establecer los límites de la autonomía de las partes para defender a la parte más débil”.

“Y sigue explicando entonces: “La solidaridad sin subsidiariedad, de hecho, puede degenerar fácilmente en asistencialismo. Pero la subsidiariedad sin solidaridad corre el riesgo de alimentar formas de localismo egoísta. Para respetar estos dos principios fundamentales la intervención del Estado en el ámbito económico no debe ser ni invasiva ni ausente sino conmensurada a las reales exigencias de la sociedad”.

“Pues ven, como decía se trata de una visión ponderada de las cosas. Ni un intervencionismo excesivo que en nombre de la solidaridad crea asistencialismo o hace de los ciudadanos clientes, ni una ausencia, una retirada del Estado que deja que el campo de la vida económica y social quede librado al poder más fuerte”.

“Esto supone la aplicación de los dos principios, solidaridad y subsidiariedad, requiere que exista el Estado y que el Estado esté organizado razonablemente”.

“El problema que podemos observar, en la Argentina y en algunos otros países también, es que de hecho parece que no existiera el Estado. Existen los gobiernos, los sucesivos gobiernos. En un momento determinado el Estado es el gobierno. Entonces, ni siquiera se puede hablar de políticas de Estado. Más aún, el gobierno es el ámbito de conquista de un partido, de un sector determinado. Falta, en todo caso, esa perspectiva siempre clara y necesaria del bien común como finalidad propia de la acción del estado”.

“Entonces, el problema es un problema delicadamente político, de concepción de la vida política y de la sociedad en su conjunto. Por eso esta referencia a la Doctrina Social de la Iglesia me parece capital”.

“El camino correcto requiere equilibrar en la práctica el juego de estos dos principios para que sean efectivamente aplicados. Subsidiariedad para que el Estado no invada los ámbitos de legítima iniciativa de personas e instituciones y solidaridad para que el Estado asista a las partes más débiles del todo social, especialmente en las circunstancias más difíciles”.

¿VERDADERO PAPA ? II

Richard_Williamson

El pensamiento de Mons. Richard Williamson

COMENTARIOS  ELEISON  199   (7-V-2011) :

 

De ninguna manera están todos de acuerdo con la opinión que se presentó aquí hace una semana (EC  198) según la cual la buena fe subjetiva o la buena voluntad  de parte de los Papas Conciliares previene que sus escalofriantes herejías  objetivas los invalide como Papas (ver Profesor Doermann en referencia  a las enseñanzas de Salvación Universal de Juan Pablo II, ver al Obispo  Tissier en referencia al vaciamiento de la Cruz por Benedicto XVI). Según la opinión opuesta estas herejías son tan escalofriantes  que  #1, no pueden haber sido pronunciadas por verdaderos Vicarios de  Cristo,  o #2, ninguna cantidad de buena fe subjetiva puede neutralizar  su veneno objetivo, o #3, la buena fe subjetiva se excluye en el caso  de Papas Conciliares educados en la antigua teología. Revisemos con  tranquilidad estos argumentos de uno en uno: --

 

Primeramente, ¿hasta qué  punto puede el Señor Dios permitir que sus Vicarios lo traicionen  (objetivamente)?, solo Dios lo sabe exactamente. Sin embargo, sabemos por la Escritura (Lucas XVIII, 8) que cuando Cristo regrese, difícilmente  encontrará la Fe en la tierra. Pero la Fe, en el 2011, ¿está ya reducida  a ese punto?  Uno puede pensar que no. En ese caso Dios puede permitir  que sus Vicarios Conciliares hagan aún cosas peores, sin que estos  dejen de ser sus Vicarios. ¿Acaso las Escrituras no declaran que Caifás  era el Sumo Pontífice (Juan XI, 50-51) en el momento exacto en que estaba conspirando el crimen de crímenes  en contra de Dios, concretamente la muerte judicial de Cristo?

En segundo lugar, es verdad  que la herejía objetiva de herejes bien intencionados es mucho más  importante para la Iglesia Universal que sus buenas intenciones subjetivas,  y también es cierto que muchos herejes objetivos están convencidos  subjetivamente de su propia inocencia. Por ambas razones cuando la Madre  Iglesia se encuentra en su recta razón, ella tiene un mecanismo para forzar a esos herejes  materiales ya sea a renunciar a sus herejías o a convertirse en herejes  formales en toda la extensión de la palabra. Este mecanismo son sus  Inquisidores a quien dota de su autoridad otorgada por Dios para definir  y condenar la herejía, para mantener la pureza de la doctrina. Pero,  ¿qué pasa si es la autoridad más alta en la Iglesia la que está  nadando en herejías objetivas? ¿Quién está por encima de los Papas  que tenga la autoridad para corregirlos? ¡Nadie! Entonces, ¿acaso  Dios ha abandonado a su Iglesia? No, pero la está sometiendo  a un juicio severo, muy merecido por la gran cantidad de Católicos  tibios de hoy en día - e incluso, ¿de Tradicionalistas?

En tercer lugar, es cierto  que tanto Juan Pablo II como Benedicto XVI recibieron una educación  pre-Conciliar en filosofía y teología. Pero para su tiempo los gusanos  del subjetivismo Kantiano y del evolucionismo Hegeliano ya se habían  comido, por más de un siglo, el corazón del concepto de verdad objetiva e inmutable, sin el cual el concepto de dogma Católico  inmutable no tiene ningún sentido. Ahora, uno puede ciertamente  argumentar que ambos Papas son moralmente culpables -digamos, por amor a la popularidad, o digamos por orgullo intelectual- de su caída  en herejía material, pero las fallas morales no pueden reemplazar la  condenación doctrinal autoritativa para convertirlos de herejes materiales  en herejes formales.

Por lo tanto, ya que solamente  los herejes formales son excluidos de la Iglesia, y ya que la única  manera segura de probar que alguien es formalmente un hereje no está  disponible en el caso de los Papas, una gama de opiniones acerca del  problema de los Papas Conciliares debe permanecer abierta.

"Sedevacantista" no merece  ser la palabra sucia que los "Tradicionalistas" liberales hacen  de ella, pero por el otro lado los argumentos de los sedevacantistas  no son tan concluyentes como desearían o pretenden. En conclusión,  los sedevacantistas aún pueden ser Católicos, pero ningún católico  está obligado aún a ser sedevacantista. Por mi parte pienso que los  Papas Conciliares son Papas válidos.  

Kyrie eleison.