Por Emilio Nazar Kasbo
1- Salvación: Nadie se salva fuera de la Iglesia Católica
2- Identidad: Donde está el Papa, está la Iglesia
3- Unidad: No podemos ser católicos sin el Papa. Hubo tiempos en que hubo hasta tres Papas, y la grave situación fue dirimida en la ortodoxia doctrinal por la Tradición y fidelidad al Magisterio. Pero hoy hay un solo Papa.
4- Infalibilidad: El Papa es infalible cuando se expresa públicamente y de modo explícito ex-cathedra
5- Autoridad: Fuera de la expresión ex-cathedra, el Papa se pronuncia con distinto grado de autoridad, pudiéndose pronunciar incluso en determinados temas SIN AUTORIDAD ALGUNA, por emitir meras OPINIONES PERSONALES que no son parte del Dogma ni del Magisterio, y en lo cual incluso PUEDE EQUIVOCARSE, tal como lo enseña el Concilio Vaticano I
6- Infiltración: Hay una infiltración en la Iglesia Católica que viene de antaño, y fue denunciada por la encíclica Pascendi de San Pío X, que viene junto a las condenas contra la masonería, el Poder Internacional del Dinero (léase el Becerro de Oro o sionismo internacional), las condenas al liberalismo y al marxismo, y a todo materialismo en sus diversas vertientes que niegan de plano el Orden Sobrenatural.
7- Concilio Vaticano II: Muchos achacan al Concilio Vaticano II una identidad con el modernismo, lo cual es falso porque: a) el Concilio no es dogmático en general (aunque sí en algunas pequeñas partes), sino pastoral; b) hay una interpretación del Concilio que busca fundamentar el modernismo, lo cual contradice a San Pío X, y por tanto fue condenada de antemano; c) a esa interpretación herética del Concilio se la llama "espíritu del Concilio" y es utilizada para contradecir "la letra del Concilio", arrojando el resultado modernista; d) por tanto, el modernismo es más amplio que una interpretación herética del Concilio (que sí tiene alguna contradicción interna, sobre la cual el Papa debiera pronunciarse); e) hay una gran desorientación en la feligresía, que acaba siendo mal formada por sacerdotes mal formados que son defendidos por obispos mal formados (a ese grado llegó la infiltración denunciada por San Pío X)
8- Anti-tradición: Todo lo herético hoy es parte de una revolución interna intraeclesial, que busca eliminar la Tradición y sustituirla por "nuevos principios" sobre aquello que condenara San Pío X.
9- Herejes: Es cierto que hay sacerdotes, Obispos y Episcopados completos, incluso cardenales, que son heréticos de plano. Basta ver el Obispo mexicano que está de acuerdo con la aberración homosexual, que la justifica y defiende... Seguramente será calificado como ¿católico? por muchos, aunque de hecho está fuera de la Iglesia y en pecado mortal por ese hecho que además públicamente ha defendido. Baste ese solo ejemplo (más allá de los episcopados de Austria y de Alemania, por ejemplo, y ni hablar del holandés, que armó un catecismo completamente en onda modernista herética
10- Contradicción: El Papa tiene algunas actitudes contradictorias. Da la Comunión en la mano a algunos, pero a la vez da la Comunión en la boca y de rodillas a otros ¿Cómo entender estas actitudes? Incomprensible, porque implica que no hay "una línea coherente". Hubo Papas que tuvieron una vida disipada, pero mantuvieron la Tradición y el Magisterio intacto; ahora hay Papas que mantienen lo que es Ex Cathedra y el Magisterio intacto, pero se pronuncian sobre cuestiones opinables, que producen un efecto contradictorio entre los laicos y la jerarquía de la Iglesia, porque no habla exclusivamente lo que es doctrina segura, sino que se pronuncia sobre lo inseguro y opinable.
11- Opinable: Por tanto, podemos estar en desacuerdo con todo lo que el Papa expresa como opinable (que no es ex cathedra), sin faltar a la obediencia al Papa. Es como si se produjera en algún país una situación similar a los Cristeros, y el Papa hoy diera la misma orden de que se desarmen, y lo desobedezcan... ¿estarían desobedeciendo la infalibilidad del Papa? Un lema romano rezaba: "con lo que eres defendido, no lo pongas en poder de tu enemigo", es decir, no poner el escudo en manos de los enemigos, porque nos quedaremos sin defensas, no bajar las murallas que nos separan de los enemigos, porque nos aniquilarán... somos defendidos por el mismo Jesucristo: no lo pongamos en poder del enemigo.
12- Obediencia: No podemos estar en desacuerdo con el Magisterio Infalible en una unidad permanente y sin contradicción alguna desde la enseñanza de Jesucristo a los Apóstoles hasta el fin de los tiempos. En ello sí habría desobediencia y espíritu cismático.
CONCLUSIÓN:
I- Crítica: No toda crítica sobre lo que el Papa hace o dice, es crítica al Magisterio Infalible
II- Distinguir: Debemos advertir las contradicciones del Papa en materia que no es dogmática
III- Denunciar: Debemos advertir la infiltración de ideas (portadas por personas particulares) de quienes pretenden exterminar la Tradición de la Iglesia (y por tanto transmitir un mensaje distinto del de Jesucristo).
IV- Admitir: Debemos reconocer las cosas que el Papa hace correctamente, y estar agradecidos de ello.
V- Tradición: Debemos ayudar a defender la Tradición junto con el Papa, y que si hay un movimiento eclesial contra la Tradición, explícitamente se vaya de la Iglesia, y que los herejes infiltrados se declaren como cismáticos
VI- Apologética: Se debe exhibir con toda crudeza la doctrina herética que se infiltra por diversas vías en la Iglesia
VII- Defensa: El Papa debe ser defendido ante las agresiones que provienen de sectores heréticos modernistas, tanto por los laicos como por la Jerarquía de la Iglesia.
Los católicos seguimos al Papa en materia de infalibilidad del Magisterio, y en ello debemos sumisión y obediencia, ya que es en ello el Vicario de Cristo en la tierra, pero no somos “papólatras”.
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