La actriz Florencia Peña es la cara de los pañales Huggies, ya que los bebés nacidos requieren de estos elementos de higiene. Pero cuando se promueve que los niños no nazcan, por cada niño que deja de nacer es una serie menos de pañales que las empresas venden… Para vender pañales, se necesita que los niños nazcan, no que sean abortados.
La postura de la actriz pareció no agradar la emprea Huggies y su foto podría no repetirse en los productos Huggies.
La interesada opinión expresada por la actriz Florencia Peña en el diario ultraoficialista Tiempo Argentino la llevó a criticar a la Iglesia por el sodomonio en una nota que tituló “A llorar a la Iglesia”, y luego se sumó a las huestes abortistas exigiendo la “despenalización del aborto”. A raíz de este último artículo, la multinacional Huggies analiza rescindirle el contrato y podría dejar de ser el rostro de los pañales. En una actitud desafiante la actriz se sentó junto al ex Presidente Néstor Kirchner en un acto por las “bodas homosexuales” hace unos diez días… claro que las uniones entre homosexuales son infértiles, y por tanto impiden el nacimiento de niños para los cuales se fabrican los insumos.
Efectivamente, se abrió una corriente entre los clientes de esos pañales para dejar de comprarlos hasta que la actriz deje de aparecer en los envases de los productos para niños a raíz de sus posturas respecto de la maternidad (o mejor dicho, en contra de la maternidad). Numerosos grupos de consumidores se pronunciaron en este sentido utilizando las listas de mail, difundiendo en facebook, twitter, correo electrónico y mensajes enviados a la Empresa
La Empresa Huggies debió salir al cruce y aclarar a sus clientes: “Frente a las recientes declaraciones de la Sra. Florencia Peña en relación con el aborto, Kimberly-Clark Argentina declara que la actriz emitió estas declaraciones como opiniones personales y no en representación de la compañía ni de ninguna de sus marcas”.
Mientras tanto, Peña tituló su escrito “Ladran Sancho” en el referido medio ultrakirchnerista, y en el mismo sostuvo que "la maternidad debería ser una bendición y no una condena. Y si creo que deberíamos avanzar en la despenalización del aborto no es porque yo lo necesite o lo desee. No creo que la clase media o alta lo necesiten, porque cuentan con los medios para que el aborto siga siendo ilegal y, sin embargo, se siga practicando (...) Yo creo que ser madre debería ser un momento de plenitud de una mujer, y no una tragedia o un accidente en la vida de una niña (…) "muchos de los que se les ponen los pelos de punta con el aborto después dicen “ estos negros tienen montones de hijos porque no se cuidan. Recordemos que la Iglesia también desaprueba los anticonceptivos y los profilácticos".
Finalmente, la actriz consideró que "impulsar que se despenalice o legalice el aborto no quiere decir necesariamente recomendarlo. Creo que si el tema deja de ser tabú, habrá muchas más oportunidades de conversarlo y debatirlo (...) Muchas mujeres estamos convencidas de que debemos tener soberanía sobre nuestro cuerpo, libertad de decidir sobre nuestra salud física y mental".
Tales son los argumentos proabortistas que sostiene Florencia Peña, dando los argumentos ultrafeministas de promoción del aborto, argumentos banales, repetitivos y carentes de toda racionalidad y del más básico instinto materno. Madres que odian a sus hijos y que toman la decisión de asesinarlos en el vientre… ¿son madres? Seguramente son hijas, pero de… y por ellas hay que rezar esperando su conversión.
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