Comunicado del Partido Demócrata Cristiano

Al amplio campo nacional, popular, humanista y cristiano
 
"El político que no vive para servir, no sirve para vivir"
 
   Leer y comprender los signos de los tiempos, siempre ha sido un imperativo para los cristianos.
   El camino hacia el bien común nunca sido el lugar de los fariseos.
   Porque el transitarlo, requiere de una condición ineludible:  el compromiso activo con el prójimo.
Ese compromiso no puede expresarse con una conducta de repliegue, frente a quienes hacen del individualismo una práctica constante.  Esto es fácil de ver en las actitudes personales, pero no lo es cuando se trata de discernir el camino que debería seguir un nucleamiento político.
   Nuestro Partido Demócrata Cristiano, no es una organización estructurada verticalmente en torno a la conducción institucional de la iglesia católica, ni de otras vertientes del cristianismo.
   Nuestro partido sí debe apuntar en sus actos políticos a ser parte de la construcción de una sociedad que convive
en armonía con los valores de Cristo.
   Así planteada la cuestión, proponemos desde éste Movimiento Nacional Social Cristiano, terminar con la práctica de achicar cada vez más el espacio político que ocupamos en la sociedad civíl argentina.
   La propuesta Demócrata Cristiana en muchos países del mundo occidental tiene vigorosa vigencia,
¿qué pasa entonces en nuestra patria?
¿el pensamiento cristiano solo es sostenido por el 5 % de los ciudadanos?
   Negociar la verdad puede tener varias caras: la de la mentira, la de la ceguera, la de la soberbia ... sepamos entonces discernir las causas de nuestra parálisis, propongámonos reinsertarnos desde una representación legitimada por el reconocimiento ciudadano, y por último admitamos y reconozcamos nuestros errores como partido.
   Ningún gobierno en ningún tiempo ha sido el generador de un 100 % de aciertos políticos.
   Del mismo modo muy ocasionalmente la oposición ha propuesto planes de gobierno que concensuados entre todos los opositores representen la voluntad e intereses de las mayorías desposeídas; y el hecho que no puedan organizar una fuerza que represente, al menos, el 25 % del electorado evacúa cualquier duda.
   La oposición al gobierno nacional es un manojo de expresiones personalistas incapaces de articular intereses mas allá de la cúpula. Por ésta razón afirmamos que ese no puede ser el lugar de la Democracia Cristiana, no creemos en los seguidismos personalistas. No propiciamos la ausencia del pensamiento crítico, sí adherimos a la construcción de una patria grande, no solo en la geografía sino en la capacidad de eliminar la pobreza, la exclusión social y el analfabetismo funcional. Promocionar los valores del cristianismo es incompatible con alianzas que representen el pensamiento y acción neoliberal. El capitalismo salvaje está en las antípodas del pensamiento cristiano.
   Por todas éstas razones, el Movimiento Nacional Social Cristiano convoca a construir con los valores cristianos y dentro de las opciones que brinda la vida republicana, la Argentina que nos merecemos.
   Por último y para aventar cualquier signo de especulación sectorial mezquina, decimos claro y fuerte:  la oposición al gobierno propone la desarticulación del estado nacional, haciéndolo instrumento de las minorías de siempre.
   El gobierno de la presidenta, aún con errores a nuestro juicio subsanables, ha trazado objetivos de profundo carácter nacional y popular, el que expresa un cambio de militancia política ausente de contradicciones, sólo espera hacerlo para transitar el camino de los logros personales.
   Quienes piensen que diciendo "yo no fui" quedan eximidos de responsabilidad ciudadana, sólo contemplan su propio ombligo. La política empieza donde fracasan las posibilidades personales de transformar una sociedad, para llevarla hacia un orden justo, y ésto significa que el avance se hará a partir de un mejor manejo de los disensos.
   Estamos para construir desde las instituciones, por esa razón Señora Presidenta, en este movimiento Nacional Social Cristiano encontrará el apoyo a su gestión, cada vez que podamos aportarlo. Como así también, nuestra opinión ciudadana, cuando no coincidamos.
 
   Un abrazo fraterno.
  
 
                                                                            NICOLAS  FUSCO
                                               PRESIDENTE DEL MOVIMIENTO NACIONAL SOCIAL CRISTIANO
                                                 VICEPRESIDENTE DEL PARTIDO DEMÓCRATA CRISTIANO DE LA PCIA DE BS. AS